/ martes 3 de mayo de 2022

Acontecer político | A un mes de la elección

  • “El Truco” busca sumar
  • Américo enarbola la bandera guinda
  • Reforma electoral ¿otro anzuelo?

Estamos prácticamente a un mes de que concluyan las campañas electorales de los aspirantes a gobernar Tamaulipas, en un proceso en el que ha quedado claramente que la competencia real se da entre los candidatos del PAN, PRI y PRD, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS, y el abanderado de MORENA, PT Y Partido Verde, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, quienes siguen recorriendo la geografía estatal en busca del voto ciudadano.

Cada uno ha venido exponiendo sus propuestas ante la sociedad civil, los grupos empresariales, obreros y académicos en el intento de conquistar simpatía, confianza y lealtad para sus respectivas causas, en medio de una seria de encuestas que lo mismo colocan a uno y otro a la cabeza de las preferencias de los votantes.

Esta será sin duda una elección muy especial, en la que se decidirá si el Partido Acción Nacional, que echó del poder al Partido Revolucionario Institucional en nuestro estado al impulso de los vientos de cambio, permanece en la conducción de nuestra entidad o es desplazado por la llamada Cuarta Transformación, que representaría una nueva esperanza. CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS ha sido alcalde de Xicoténcatl y diputado federal. Durante cinco años fungió como Secretario General de Gobierno, cargo que implica el control político del estado, y a pesar de que al principio de la actual administración muchos personajes cercanos al gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA trataron de eliminarlo, logró sobrevivir a los embates ganándose la confianza de su jefe.

Nadie le puede regatear su experiencia política, su conocimiento del transcurrir cotidiano de la entidad y sobre todo, de los esquemas de seguridad que han sido implementados en la actual administración estatal. Y todo eso se refleja en sus discursos de campaña.

A su causa se ha sumado el Partido Revolucionario Institucional, que de ser la fuerza política predominante durante décadas, ahora aparece como un simple apéndice que trata de sobrevivir bajo el manto protector de quienes antes consideraban como su principal enemigo y al que denostaron a más no poder.

Pero “El Truco”, como le llaman, se acoge a la suma más que a la división, así sea con las fuerzas que antes fueron antagónicas. En política no hay reglas inalterables y la coalición del PAN, PRI y PRD está en la lucha por llegar al gobierno de Tamaulipas en un proyecto compartido cuya aprobación quedará sujeta a los votantes.

Y en el frente contrario, el doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA trata de extender a nuestro estado la Cuarta Transformación, bajo la bandera del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, bajo el argumento de que los llamados vientos de cambio no satisfacen las expectativas que en su momento despertaron.

En realidad, en Tamaulipas, como en los demás estados donde habrá elección de gobernador, la auténtica lucha se dará entre el lopezobradorismo y las fuerzas de oposición, lo que sin duda será una referencia para la gran batalla que se dará en el 2024, cuando lo que esté en disputa sea la Presidencia de la República.

Pero lo que sí es cierto, dentro de todo lo controversial que entraña el proceso electoral, es que los tamaulipecos ya no quieren un gobernador que acabe en la cárcel o salpicado de la sospecha de corrupción. A VERÁSTEGUI y a AMÉRICO, les queda un mes para convencer a sus ciudadanos de que su plumaje no se mancha aunque atraviesen el pantano. Habrá que estar pendientes.

Cambiando de tema, se aproxima el tiempo en que entrará a discusión en el Poder Legislativo la Reforma Electoral que propone el Presidente de la República, que en uno de sus puntos centrales contempla la eliminación de los cargos de representación proporcional, mejor conocidos como “plurinominales”, y la sustitución del INE por un organismo electo por la ciudadanía.

Ya la oposición aglutinada en el movimiento “Va por México” ha anticipado que votará en contra, tal como lo hizo con la Reforma Energética, que no logró ser aprobada en la Cámara de Diputados, en lo que ellos consideraron como una derrota para LÓPEZ OBRADOR. Pero tal vez podrían estar cayendo en una trampa.

Si rechazan en lo absoluto la iniciativa presidencial, principalmente en lo que se refiere a las “pluris”, estarían exhibiéndose como defensores de un sistema que tolera que lleguen a cargos de representación popular personajes que no tuvieron que competir en las urnas, que no representan a nadie y que cómodamente se instalaron en sus puestos gracias a componendas de grupos que solo buscan vivir de las nóminas oficiales.

Ese solo argumento bastaría para que nuevamente el Presidente acuse a sus contrapartes de defender un esquema político convenenciero que cuesta mucho a la nación y que para nada enriquece la vida democrática del país y solo sirve para mantener parásitos. Un anzuelo que la oposición debe observar detenidamente antes de morderlo. Habrá que estar pendientes.


Concluyó la vacunación masiva contra el covid en la que se dio oportunidad para quienes no tenían completado su esquema de inmunización. Sorprende el desaire que la población demostró ante la dosis de refuerzo, que hizo que millones de dosis entraran en la etapa de caducidad. La confianza derrotó a la prevención dejando un enorme hueco de riesgo ante un virus que no deja de estar presente.

  • raulpazos45@gmail.com
  • “El Truco” busca sumar
  • Américo enarbola la bandera guinda
  • Reforma electoral ¿otro anzuelo?

Estamos prácticamente a un mes de que concluyan las campañas electorales de los aspirantes a gobernar Tamaulipas, en un proceso en el que ha quedado claramente que la competencia real se da entre los candidatos del PAN, PRI y PRD, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS, y el abanderado de MORENA, PT Y Partido Verde, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, quienes siguen recorriendo la geografía estatal en busca del voto ciudadano.

Cada uno ha venido exponiendo sus propuestas ante la sociedad civil, los grupos empresariales, obreros y académicos en el intento de conquistar simpatía, confianza y lealtad para sus respectivas causas, en medio de una seria de encuestas que lo mismo colocan a uno y otro a la cabeza de las preferencias de los votantes.

Esta será sin duda una elección muy especial, en la que se decidirá si el Partido Acción Nacional, que echó del poder al Partido Revolucionario Institucional en nuestro estado al impulso de los vientos de cambio, permanece en la conducción de nuestra entidad o es desplazado por la llamada Cuarta Transformación, que representaría una nueva esperanza. CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS ha sido alcalde de Xicoténcatl y diputado federal. Durante cinco años fungió como Secretario General de Gobierno, cargo que implica el control político del estado, y a pesar de que al principio de la actual administración muchos personajes cercanos al gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA trataron de eliminarlo, logró sobrevivir a los embates ganándose la confianza de su jefe.

Nadie le puede regatear su experiencia política, su conocimiento del transcurrir cotidiano de la entidad y sobre todo, de los esquemas de seguridad que han sido implementados en la actual administración estatal. Y todo eso se refleja en sus discursos de campaña.

A su causa se ha sumado el Partido Revolucionario Institucional, que de ser la fuerza política predominante durante décadas, ahora aparece como un simple apéndice que trata de sobrevivir bajo el manto protector de quienes antes consideraban como su principal enemigo y al que denostaron a más no poder.

Pero “El Truco”, como le llaman, se acoge a la suma más que a la división, así sea con las fuerzas que antes fueron antagónicas. En política no hay reglas inalterables y la coalición del PAN, PRI y PRD está en la lucha por llegar al gobierno de Tamaulipas en un proyecto compartido cuya aprobación quedará sujeta a los votantes.

Y en el frente contrario, el doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA trata de extender a nuestro estado la Cuarta Transformación, bajo la bandera del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, bajo el argumento de que los llamados vientos de cambio no satisfacen las expectativas que en su momento despertaron.

En realidad, en Tamaulipas, como en los demás estados donde habrá elección de gobernador, la auténtica lucha se dará entre el lopezobradorismo y las fuerzas de oposición, lo que sin duda será una referencia para la gran batalla que se dará en el 2024, cuando lo que esté en disputa sea la Presidencia de la República.

Pero lo que sí es cierto, dentro de todo lo controversial que entraña el proceso electoral, es que los tamaulipecos ya no quieren un gobernador que acabe en la cárcel o salpicado de la sospecha de corrupción. A VERÁSTEGUI y a AMÉRICO, les queda un mes para convencer a sus ciudadanos de que su plumaje no se mancha aunque atraviesen el pantano. Habrá que estar pendientes.

Cambiando de tema, se aproxima el tiempo en que entrará a discusión en el Poder Legislativo la Reforma Electoral que propone el Presidente de la República, que en uno de sus puntos centrales contempla la eliminación de los cargos de representación proporcional, mejor conocidos como “plurinominales”, y la sustitución del INE por un organismo electo por la ciudadanía.

Ya la oposición aglutinada en el movimiento “Va por México” ha anticipado que votará en contra, tal como lo hizo con la Reforma Energética, que no logró ser aprobada en la Cámara de Diputados, en lo que ellos consideraron como una derrota para LÓPEZ OBRADOR. Pero tal vez podrían estar cayendo en una trampa.

Si rechazan en lo absoluto la iniciativa presidencial, principalmente en lo que se refiere a las “pluris”, estarían exhibiéndose como defensores de un sistema que tolera que lleguen a cargos de representación popular personajes que no tuvieron que competir en las urnas, que no representan a nadie y que cómodamente se instalaron en sus puestos gracias a componendas de grupos que solo buscan vivir de las nóminas oficiales.

Ese solo argumento bastaría para que nuevamente el Presidente acuse a sus contrapartes de defender un esquema político convenenciero que cuesta mucho a la nación y que para nada enriquece la vida democrática del país y solo sirve para mantener parásitos. Un anzuelo que la oposición debe observar detenidamente antes de morderlo. Habrá que estar pendientes.


Concluyó la vacunación masiva contra el covid en la que se dio oportunidad para quienes no tenían completado su esquema de inmunización. Sorprende el desaire que la población demostró ante la dosis de refuerzo, que hizo que millones de dosis entraran en la etapa de caducidad. La confianza derrotó a la prevención dejando un enorme hueco de riesgo ante un virus que no deja de estar presente.

  • raulpazos45@gmail.com