- Tampico brillará en todo el estado
- Oseguera, prospecto en Morena
- Once años de la muerte de Rodolfo
- Incontenible la pandemia
“Tampico suena y suena mucho y vamos a seguir sonando en todos los rincones de Tamaulipas y a nivel nacional”. Con estas palabras, el alcalde de Tampico, JESÚS NADER NASRALLAH, pareció apuntarse en la carrera por la candidatura de Acción Nacional al gobierno del estado.
El pronunciamiento de CHUCHO se dio a pocos días de que el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA hiciera un virtual “destape” del secretario de gobierno, CESAR VERASTEGUI, a quien colmó de elogios diciendo que pronto estará sonando muy fuerte.
Estos posicionamientos insertan un ingrediente interesante al próximo proceso interno del PAN que, por lo pronto, ya tendría dos cartas visibles para ponerlas sobre la mesa a la hora de decidir quién será su abanderado para la sucesión estatal el año próximo.
Y las credenciales del jefe de la comuna porteña no son poca cosa. Ha sido alcalde suplente, diputado federal, delegado regional del IMSS y secretario de Administración del gobierno del estado, antes de ser electo por primera vez como presidente municipal y luego reelecto el pasado 6 de junio.
NADER NASRALLAH fue, además, coordinador de la campaña presidencial de FELIPE CALDERÓN HINOJOSA en el sur de Tamaulipas y norte de Veracruz, donde logró que el michoacano tuviera una de las más altas votaciones regionales.
En el ejercicio de su cargo al frente de la administración local, ha transformado radicalmente la ciudad, no solo en lo que respecta a infraestructura urbana y de servicios públicos, sino con acciones de bienestar social, lo que le ha valido estar entre los mejores alcaldes en el país.
Fue el único alcalde panista en el estado que logró de manera holgada su reelección y su prestigio ayudó a que el partido blanquiazul ganara también la diputación federal y las dos diputaciones locales que corresponden a la tierra de las jaibas.
Se sabe que la dirigencia nacional del PAN ha seguido de cerca la trayectoria de CHUCHO, por lo que a ese nivel se le considera como un prospecto altamente competitivo que podría atraer el voto no solo de los militantes de su partido, sino también de perredistas, priistas, de Movimiento Ciudadano y hasta de Morena. Además, sus magníficas relaciones con el sector empresarial de toda la entidad le permitirían formar un poderoso frente electoral.
Y la posibilidad de que desde el sur de Tamaulipas vuelva a emerger un gobernador del estado ha despertado el entusiasmo de amplios segmentos de la comarca. Desde MANUEL RAVIZE, ningún otro tampiqueño ha estado en el despacho principal del palacio de gobierno en Ciudad Victoria.
Claro está que con el apoyo directo y claramente manifestado del gobernador CABEZA DE VACA, el exalcalde de Xicoténcatl, CESAR VERASTEGUI, hará su lucha por llevarse la estafeta. Así que para Acción Nacional no parece haber más opciones, tras de que otras de sus figuras a las que se les concedía un promisorio futuro político no lograron despegar o sufrieron sendas derrotas en la pasada elección. Desde ahora se reciben apuestas.
Y mire usted que otro alcalde de la zona conurbada, pero de Morena, también se encuentra entre los prospectos de ese partido para la candidatura al gobierno del estado. Se trata de ADRIÁN OSEGUERA KERNION, que igualmente está calificado entre los mejores alcaldes y cuya eficaz administración del municipio le permitió ser reelecto para un segundo período. En el frente guinda hay muchos tiradores, pero el jefe edilicio maderense está allí y no hay que perderlo de vista.
Ayer se cumplieron once años de que el entonces candidato del PRI a la gubernatura del estado, RODOLFO TORRE CANTÚ y varios de sus acompañantes fueron ultimados despiadadamente a balazos en la carretera que conduce de Victoria al aeropuerto, suceso que conmocionó al país y que sumió a Tamaulipas en una crisis política que obligó a postular un candidato emergente, precisamente el hermano del fallecido, EGIDIO TORRE CANTÚ.
Y a esa distancia no se sabe nada sobre los ejecutores y los ordenadores de la matanza, que se llevó dentro de una operación fríamente calculada al estilo militar. Aunque el crimen se atribuye a la delincuencia organizada, nunca se han disipado las sospechas de que personas relacionadas con el gobierno del estado estuvieron involucradas. Ni siquiera EGIDIO mostró mayor interés por aclarar la muerte de su hermano.
Pasemos a otro tema aflictivo. Pese a que las cifras son aterradoras, parece que la población le ha perdido el miedo a las estadísticas sobre contagios de Covid-19 y las autoridades de Salud se limitan a emitir recomendaciones, sin tomar medidas directamente proporcionales a la gravedad del problema.
En la semana anterior se registraron 1500 nuevos casos de coronavirus en el estado, en una afectación que ya empieza a vulnerar a jóvenes y niños de una manera ascendente. En promedio, cada día se documentan 140 enfermos del terrible mal, algo que se acerca a las cifras iniciales de la pandemia.
Pero fuera de las voces “cuídense”, la Secretaría de Salud no impone las restricciones que la situación reclama a gritos. Y la ciudadanía parece haberse acostumbrado a vivir en medio del peligro con la idea de que “tóquele a quien tenga que tocarle”. Duele decirlo, pero falta responsabilidad de ambas
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