VICENTE FOX QUESADA sorprendió al mundo cuando en el año 2000 puso fin a un predominio político que por décadas había mantenido en México el Partido Revolucionario Institucional, logrando que por primera vez un candidato opositor llegara a la presidencia de la república. El Partido Acción Nacional lograba, con él como abanderado, culminar una lucha histórica que iniciaron sus fundadores. Pero esa conquista monumental, respaldada por un voto mayoritario, no tuvo los efectos que la ciudadanía esperaba.
FOX, en aras de llevarse en calma su gestión, decidió convivir con las viejas estructuras priistas sin preocuparse por desmantelarlas para dar paso a una transformación del país que estaba harto de los saqueos del tesoro nacional cometidos por funcionarios públicos y empresarios consentidos del régimen en turno. Simplemente se alió a ellos, olvidando aquello de que gobernaría “para los jodidos”.
Luego, a pesar de no ser de sus simpatías, apoyó a FELIPE CALDERÓN HINOJOSA como candidato del PAN para que este partido continuara en el poder. FELIPE parecía un auténtico guerrero contra los vicios que asolaban al país y de entrada concitó la confianza pública.
Inició una supuesta guerra contra el narcotráfico que convirtió al país en un enorme campo de batalla donde las “víctimas colaterales”, esto es, ciudadanos ajenos a la batalla, sucumbieron por miles en las calles de manera inesperada.
Dos sexenios panistas que tuvieron la oportunidad histórica de acabar con la corrupción rampante y de cambiar de manera permanente las cosas en nuestro país, permitieron que el gobierno siguiera siendo fuente de riqueza para empresarios, amigos y familiares y con el paso del tiempo demostraron que no tenían en realidad aquella voluntad transformadora de la que hicieron gala en sus respectivas campañas.
Al término del régimen calderonista, fue evidente que ambos promovieron la candidatura del priista ENRIQUE PEÑA NIETO. FELIPE facilitándole el camino al exgobernador del Estado de México y FOX apoyándolo abiertamente como el “mejor candidato”, dándole la espalda al partido que los llevó al poder, en una clara simbiosis tendiente a que las cosas siguieran como en los viejos tiempos. El dinero público tenía que mantenerse como nutriente de bolsillos acomodaticios.
¿Y qué pasó? Que el gobierno de PEÑA NIETO se convirtió, con el binomio PRI-PAN, en un ejemplo de la corrupción con la que la ciudadanía quiso acabar cuando acudió a las urnas en el año 2000. Todo había sido en vano.
Todo esto conformó una conciencia social de que había que buscar una nueva alternativa y fue así como en 2018, treinta millones de mexicanos votaron por ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, que recién había formado el Movimiento de Regeneración Nacional para que se encargara de los destinos de la Nación, tras de que por todos los medios se trató de bloquear su arribo al poder.
Y allí empezó el tronar de huesos. Los empresarios que acostumbraban evadir impuestos, tuvieron que ponerse al corriente de sus pagos fiscales y se acabaron los contratos de obra al amparo del amiguismo y la complicidad. Se cerró la fastuosa casa presidencial de “Los Pinos”, donde los mandatarios llevaban una vida de reyes con cargo a los contribuyentes.
Y, lógicamente, esto ha provocado la airada reacción de quienes vieron perdidos sus privilegios y buscan rescatarlos fomentando movimientos de resistencia que, hasta ahora, no han tenido el efecto que los “damnificados” desean. Pero es seguro que no cejarán en sus intentos, lo cual, desde luego, es legítimo y comprensible.
Así, en el tablero político hay corrientes encontradas y con intereses distintos. Un dicho popular reza que “el que tienen más saliva, traga más pinole”. En las elecciones del año próximo, veremos quiénes tienen más capacidad de deglución.
Pasando a temas locales, los alcaldes de la zona conurbada están cerrando el año a tambor batiente, lo cual redunda en beneficio de los habitantes del sur de Tamaulipas.
En Tampico, JESÚS NADER NASRRALAH sigue iniciando y entregando obras de pavimentación en populosos sectores que ven así un nuevo panorama en su ritmo y comodidad de vida. La tierra de las jaibas luce un nuevo rostro para disfrute de propios y extraños.
En Ciudad Madero, la administración de ADRIÁN OSEGUERA KERNION ha ejercido una inversión de cien millones en obra pública, beneficiando a miles de familias y transformando el municipio, sobre todo en sectores ancestralmente olvidados. La antigua capital petrolera de México definitivamente tiene otra cara.
Y en Altamira, el cabildo aprobó el proyecto de presupuesto de egresos para el año próximo por un monto de mil 68 millones de pesos que se destinará a bienestar social, obras y servicios públicos. La alcaldesa ALMA LAURA AMPARÁN honra su palabra de que “aquí venimos a trabajar”.
En las redes sociales se siguen promoviendo el PROFR. JAVIER ÁVILA REYES y el abogado CARLOS PÉREZ HERNÁNDEZ como aspirantes a un puesto de elección popular en Tampico, aunque no precisan cuál y por qué partido. ¿Será que alguno de ellos, o ambos, están pensando en Morena? Pronto tendrán que definirse si realmente sus aspiraciones son serias.
Agradecemos al LIC. JUAN JOSÉ VILLELA su invitación para participar en la reunión de la “Claraboya Literaria”, que tendrá lugar esta noche teniendo como temática el 70 aniversario de EL SOL DE TAMPICO, en la que también estará presente nuestro director, LIC. BENITO MORANTE y otros colegas.
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