Ya con los tres inminentes candidatos para la elección de Tamaulipas, en el análisis, estos son algunos de los factores por las características de cada uno para ganar o perder la elección el domingo 6 de junio, detallemos a cada uno de los protagonistas.
Américo Villarreal Anaya puede ganar:
1.- Si mantiene las tendencias a su favor de las encuestas presentadas desde el año pasado.
2.- Al ganar por mayoría la elección al Senado, conoce bien el golpeteo de los opositores.
3.- Porque Morena y sus aliados que desde el 2018 se han llevado el triunfo no sólo en Tamaulipas, también en la mayoría del país.
4.- Porque simpatiza con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
5.- Al capitalizar los beneficios que reciben del gobierno federal los pobres, los jóvenes que reciben becas, la pensión de los abuelitos y los programas sociales.
6.- Porque los tamaulipecos no están satisfechos con lo hecho por el PAN y PRI.
7.- Por la baja aprobación ciudadana del gobierno del estado actual.
8.- Por los municipios morenistas como Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo, Matamoros, Ciudad Victoria, Altamira, Madero entre los principales, así como la mayoría de los diputados locales y federales.
9.- Por su trabajo político alejado de escándalos.
10.- Porque en la elección a gobernador se espera una gran participación ciudadana en la jornada electoral.
Villarreal Anaya podría perder:
1.- Si recibe una intensa “guerra sucia” y que no se defienda de los ataques.
2.- Por dejar de hacer una campaña de propuestas y dedicarse a señalar a sus oponentes.
3.- Por carecer de propuestas que le den a los tamaulipecos una certeza que cambiarán las políticas estatales.
4.- Que se confíe en los resultados de las encuestas y vea la campaña como un trámite para llegar a gobernar la entidad.
5.- Que por los contagios por covid el día de la elección se marque el semáforo en rojo al igual que haya lluvias o mal tiempo en la entidad, se corre el riesgo de poca votación ciudadana y es ahí donde la compra de votos podría definir la contienda.
6.- Que aparezcan personajes que, escudándose en la 4T, de forma prepotente insulten, humillen a la oposición y a quienes no simpatizan con su movimiento.
7.- No tener controlados a los liderazgos actuales de Morena, sus aliados, también a los alcaldes, legisladores, y dejar suelta a la exalcaldesa de Reynosa Maqui Ortiz Domínguez.
César Verástegui Ostos, puede ganar:
1.- Si hace una campaña que convenza de no ser extensión de la administración actual.
2.- Si dedica su campaña a proponer cómo hacer un mejor gobierno y sume en su equipo también a ciudadanos que no tengan tintes partidistas.
3.- Sabedor de la problemática que actualmente tiene el estado, si presenta un diagnóstico frío de la entidad y convenza cómo actuará.
4.- Si se alía con Jesús Nader, quien tiene un gran capital político, Cabeza de Vaca lo aprovechó en su campaña a gobernador.
5.- Si se muestra menos político, más auténtico, humilde, eficaz y conocedor.
6.- Si puede convencer a los habitantes de los municipios rurales de la entidad; por ellos el PAN no perdió todo en la elección del 2021.
Verástegui Ostos podría perder:
1.- Por la inercia de las preferencias electorales, en este caso Morena lleva una clara ventaja.
2.- Si se obsesiona con hacer una campaña de golpeteo a sus oponentes.
3.- Si no entiende que los eventos donde acarrean cientos de gente son engañosos, ellos no van por su propia voluntad, ese tipo de actos no garantizan un triunfo.
4.- Si relega a los liderazgos del PRI y del PRD, así como a los panistas tradicionales que no comulgan con el gobierno estatal.
5.- Si deja su campaña en las manos de los diversos operadores, algunos de mala fama.
6.- Si salen a la luz pública denuncias judiciales, videos o fotografías con personajes ligados en líos con la justicia.
Arturo Diez Gutiérrez, por Movimiento Ciudadano, diferente a los anteriores por las circunstancias propias de la elección tiene todo para perder; sólo podría ganar la elección:
1.- Si sabe convencer al electorado principalmente joven, a los tamaulipecos agraviados, cansados de los malos gobiernos de los tradicionales partidos políticos.
2.- Si puede persuadir a la ciudadanía, que encabeza un verdadero movimiento de políticos decentes, preparados para hacer mejores modelos de gobierno.
3.- Si lleva una campaña limpia, innovadora, escuchando, sin provocar ni caer en provocaciones.
4.- Ante la inminente “guerra sucia” de las dos coaliciones, ante las descalificaciones de los dos principales y por el hartazgo de la gente de esa batalla sin fin, podría ser el beneficiario del triunfo como la tercera y única opción elegible.
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