/ martes 29 de octubre de 2019

Be SMART

Tal vez, hemos estado en situaciones poco favorables en algún momento de nuestras vidas al momento de emprender un proyecto, por ejemplo...

Todos hemos conocido lo que es la falta de dinero para cumplir ciertos compromisos importantes, o tal vez, nuestra idea pueda ser buena a base de una mejor definición.

En vista de ello, hoy te traigo este tema que es tan importante para ti: joven con un sueño por cumplir, ya sea un negocio o una meta de tipo social para transformar tu entorno, y en ocasiones no sabes cómo llevarla a cabo, pues dependes de algo muy importante para comenzar este tipo de asuntos; focalización y realismo.

Ante esto, el emprendedor en sus inicios puede sentir que corre peligro su idea, un negocio sobre todo si es, muy rentable, en muchas ocasiones, los jóvenes no lo llevan a cabo por ese mismo temor, o prefieren esperar a contar con mayor capital financiero un poco más adelante en la vida, y luego las ideas se pierden, los sueños quedan sin cumplirse, y por consecuencia, nunca se sabrá si fue buena esa idea, si nunca se emprendió.

O caso contrario, puedes tener la idea, y el dinero, pero te puede hacer falta claridad en la definición de tus objetivos para iniciar o seguir adelante en tu proyecto.

Me parece interesante comentarte que, al principio de todo, lo primordial es la idea bien definida, con objetivos y metas claras; en este punto he de recalcar el aspecto de que tus objetivos cumplan con los criterios simplificados en el acrónimo SMART (inteligente en inglés) lo cual significa que cumplan con los siguientes cinco puntos…

Specific (específico): pregúntate a ti o a tu equipo que te apoya, ¿qué quieres conseguir en tu área focal?

Measurable (medible): cuestiona lo siguiente, ¿qué indicadores se pueden utilizar para medir su eficiencia?

Attainable (alcanzable): piensa en este punto importante, ¿es razonable con respecto de la situación interna y externa de la empresa o proyecto?

Relevant (relevante): nunca está de más valorar, ¿por qué le interesa a tu empresa (proyecto) o a tus clientes (a quien (es) va a impactar)?

Timely (a tiempo): y sobre todo, ¿cuándo se tiene que conseguir esta meta?

No solamente es tener la idea de cumplir con, por ejemplo, cierto número o porcentaje de ventas incrementado en tanto tiempo (meses, días, semanas, etc) o, de plantar determinado número de árboles en el parque de la colonia. Se trata, además, de definir a través de quien se llevará a cabo, y generar indicadores que nos permitan medir a través de ese tiempo si se está cumpliendo o no con ese objetivo, y tal vez, sea la oportunidad de ajustar algo.

Los criterios SMART hacen referencia a las 5 características básicas que cada objetivo debe de tener para considerarlo como inteligente; intenta definir bajo estos criterios tus proyectos (no solo empresariales o sociales), además los puedes implementar en la escuela, o en proyectos de vida a futuro, por ello, sé inteligente; Be SMART.

¿Habías considerado en alguna ocasión estos criterios al pensar en tu proyecto?

Coméntame tu respuesta y mantengámonos en contacto a través de mis redes sociales y de mi correo electrónico.

¡Hasta la próxima semana!

twitter: @frankjpedraza

e-mail: francisco.javier.pedraza@outlook.com

Tal vez, hemos estado en situaciones poco favorables en algún momento de nuestras vidas al momento de emprender un proyecto, por ejemplo...

Todos hemos conocido lo que es la falta de dinero para cumplir ciertos compromisos importantes, o tal vez, nuestra idea pueda ser buena a base de una mejor definición.

En vista de ello, hoy te traigo este tema que es tan importante para ti: joven con un sueño por cumplir, ya sea un negocio o una meta de tipo social para transformar tu entorno, y en ocasiones no sabes cómo llevarla a cabo, pues dependes de algo muy importante para comenzar este tipo de asuntos; focalización y realismo.

Ante esto, el emprendedor en sus inicios puede sentir que corre peligro su idea, un negocio sobre todo si es, muy rentable, en muchas ocasiones, los jóvenes no lo llevan a cabo por ese mismo temor, o prefieren esperar a contar con mayor capital financiero un poco más adelante en la vida, y luego las ideas se pierden, los sueños quedan sin cumplirse, y por consecuencia, nunca se sabrá si fue buena esa idea, si nunca se emprendió.

O caso contrario, puedes tener la idea, y el dinero, pero te puede hacer falta claridad en la definición de tus objetivos para iniciar o seguir adelante en tu proyecto.

Me parece interesante comentarte que, al principio de todo, lo primordial es la idea bien definida, con objetivos y metas claras; en este punto he de recalcar el aspecto de que tus objetivos cumplan con los criterios simplificados en el acrónimo SMART (inteligente en inglés) lo cual significa que cumplan con los siguientes cinco puntos…

Specific (específico): pregúntate a ti o a tu equipo que te apoya, ¿qué quieres conseguir en tu área focal?

Measurable (medible): cuestiona lo siguiente, ¿qué indicadores se pueden utilizar para medir su eficiencia?

Attainable (alcanzable): piensa en este punto importante, ¿es razonable con respecto de la situación interna y externa de la empresa o proyecto?

Relevant (relevante): nunca está de más valorar, ¿por qué le interesa a tu empresa (proyecto) o a tus clientes (a quien (es) va a impactar)?

Timely (a tiempo): y sobre todo, ¿cuándo se tiene que conseguir esta meta?

No solamente es tener la idea de cumplir con, por ejemplo, cierto número o porcentaje de ventas incrementado en tanto tiempo (meses, días, semanas, etc) o, de plantar determinado número de árboles en el parque de la colonia. Se trata, además, de definir a través de quien se llevará a cabo, y generar indicadores que nos permitan medir a través de ese tiempo si se está cumpliendo o no con ese objetivo, y tal vez, sea la oportunidad de ajustar algo.

Los criterios SMART hacen referencia a las 5 características básicas que cada objetivo debe de tener para considerarlo como inteligente; intenta definir bajo estos criterios tus proyectos (no solo empresariales o sociales), además los puedes implementar en la escuela, o en proyectos de vida a futuro, por ello, sé inteligente; Be SMART.

¿Habías considerado en alguna ocasión estos criterios al pensar en tu proyecto?

Coméntame tu respuesta y mantengámonos en contacto a través de mis redes sociales y de mi correo electrónico.

¡Hasta la próxima semana!

twitter: @frankjpedraza

e-mail: francisco.javier.pedraza@outlook.com