/ viernes 1 de abril de 2022

¡De bien para arriba! | El arte de hablar en público

El miedo es innato en los seres humanos y estadísticamente entre los 5 mayores miedos, siempre aparece el hecho de hablar en público, actividad que generalmente se asocia a pasar vergüenza o sentirse humillado, es la posibilidad de cometer errores ante un grupo de personas, lo que muchas personas relacionan también con falta de confianza en sí mismo. Muchas veces, el mayor temor se centra en la idea de quedarse “en blanco” en mitad del discurso a pesar de conocer el tema o incluso ser un experto en lo que se expone.

Sin embargo, reconozcamos que gran parte de las habilidades y conocimientos de cualquier persona, están relacionados con lo asimilado a lo largo de la vida, no con lo que se trae desde el nacimiento y ello depende también del deseo de aprender cosas nuevas, de desarrollar habilidades que nos pueden parecer imposibles en un inicio.

En el caso de hablar ante una audiencia, cualquiera que esta sea, lo primero que se debe reconocer es que perfeccionar esta destreza no significa simplemente leer en voz alta algún tema, ni hablar en un volumen más alto que los demás en una reunión de amigos o colegas; significa transmitir un mensaje claro y concreto aplicando técnicas que han sido estudiadas y comprobadas a lo largo de las últimas décadas, significa impactar, la persona que desee convertirse en un buen orador deberá dominar ciertas técnicas de expresión, ciertas habilidades de persuasión, de pensamiento crítico y de autoestima.

La finalidad de dominar la expresión ante un grupo de personas se centra en los siguientes puntos básicos: 1) organización, preparar una presentación estructurada planeando el tiempo dedicado a cada punto, esto es altamente recomendable aunque el presentador sea un experto o un erudito en el tema que se expondrá; 2) apertura, Oscar Wilde decía “nunca tendrás una segunda oportunidad para causar una primera impresión”, es importante destacar y captar la atención desde el primer momento; 3) sencillez verbal, expresar el mensaje concreto y transmitir de manera clara cada idea en el menor número de palabras posibles, es lo que permitirá que los oyentes capturen, comprendan el discurso y sobre todo que lo recuerden; 4) lenguaje corporal, gran parte del éxito es practicar movimientos adecuados, sencillos y coherentes mientras se expone, el objetivo es crear una conexión con nuestra audiencia y un ambiente de confianza para lograr transmitir con éxito nuestro mensaje, algo muy importante es mantener el contacto visual con los asistentes en todo momento, repartir miradas de manera sistemática hacia ambos lados y el centro de donde se ubique nuestra audiencia; 5) cierre, tan importante como la apertura es la finalización de nuestro discurso, la mejor recomendación es finalizar con una frase que sintetice el mensaje que se desea transmitir, de hecho esta frase se recomienda que se repita varias veces a lo largo de la intervención, pero sobre todo al final de la misma.

Algunos estudios han demostrado que el público solo recuerda el 2% de lo que expresa un orador, por ello es importante utilizar técnicas de expresión, lenguaje y estructura para lograr captar la empatía, la atención y concentración de la audiencia, por tanto, un buen conversador no solo habla, sino que también sabe escuchar, una conversación no es un monólogo, deje hablar, aunque el tema le sea muy interesante o sea un auténtico experto en la materia, tampoco hable en exceso de sí mismo, hable de temas que interesen a sus interlocutores, si sabe hablar y escuchar creará un buen clima para una perfecta conversación entre todos los presentes.

Recordemos que cuando se habla en público hay que estar pendiente no sólo de lo que se dice, sino de cómo se dice, del vocabulario que se emplea, de los gestos, de los movimientos, de la forma de vestir, etcétera, todo ello será valorado por el público y determinará el mayor o menor éxito de la intervención, no en vano, el significado de la palabra comunicar (del latín comunicare) es el de compartir, hacer partícipe a otro de lo que uno sabe, por lo tanto, comunicación es primordialmente participación, intercambio.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

Re-Generación 19

El miedo es innato en los seres humanos y estadísticamente entre los 5 mayores miedos, siempre aparece el hecho de hablar en público, actividad que generalmente se asocia a pasar vergüenza o sentirse humillado, es la posibilidad de cometer errores ante un grupo de personas, lo que muchas personas relacionan también con falta de confianza en sí mismo. Muchas veces, el mayor temor se centra en la idea de quedarse “en blanco” en mitad del discurso a pesar de conocer el tema o incluso ser un experto en lo que se expone.

Sin embargo, reconozcamos que gran parte de las habilidades y conocimientos de cualquier persona, están relacionados con lo asimilado a lo largo de la vida, no con lo que se trae desde el nacimiento y ello depende también del deseo de aprender cosas nuevas, de desarrollar habilidades que nos pueden parecer imposibles en un inicio.

En el caso de hablar ante una audiencia, cualquiera que esta sea, lo primero que se debe reconocer es que perfeccionar esta destreza no significa simplemente leer en voz alta algún tema, ni hablar en un volumen más alto que los demás en una reunión de amigos o colegas; significa transmitir un mensaje claro y concreto aplicando técnicas que han sido estudiadas y comprobadas a lo largo de las últimas décadas, significa impactar, la persona que desee convertirse en un buen orador deberá dominar ciertas técnicas de expresión, ciertas habilidades de persuasión, de pensamiento crítico y de autoestima.

La finalidad de dominar la expresión ante un grupo de personas se centra en los siguientes puntos básicos: 1) organización, preparar una presentación estructurada planeando el tiempo dedicado a cada punto, esto es altamente recomendable aunque el presentador sea un experto o un erudito en el tema que se expondrá; 2) apertura, Oscar Wilde decía “nunca tendrás una segunda oportunidad para causar una primera impresión”, es importante destacar y captar la atención desde el primer momento; 3) sencillez verbal, expresar el mensaje concreto y transmitir de manera clara cada idea en el menor número de palabras posibles, es lo que permitirá que los oyentes capturen, comprendan el discurso y sobre todo que lo recuerden; 4) lenguaje corporal, gran parte del éxito es practicar movimientos adecuados, sencillos y coherentes mientras se expone, el objetivo es crear una conexión con nuestra audiencia y un ambiente de confianza para lograr transmitir con éxito nuestro mensaje, algo muy importante es mantener el contacto visual con los asistentes en todo momento, repartir miradas de manera sistemática hacia ambos lados y el centro de donde se ubique nuestra audiencia; 5) cierre, tan importante como la apertura es la finalización de nuestro discurso, la mejor recomendación es finalizar con una frase que sintetice el mensaje que se desea transmitir, de hecho esta frase se recomienda que se repita varias veces a lo largo de la intervención, pero sobre todo al final de la misma.

Algunos estudios han demostrado que el público solo recuerda el 2% de lo que expresa un orador, por ello es importante utilizar técnicas de expresión, lenguaje y estructura para lograr captar la empatía, la atención y concentración de la audiencia, por tanto, un buen conversador no solo habla, sino que también sabe escuchar, una conversación no es un monólogo, deje hablar, aunque el tema le sea muy interesante o sea un auténtico experto en la materia, tampoco hable en exceso de sí mismo, hable de temas que interesen a sus interlocutores, si sabe hablar y escuchar creará un buen clima para una perfecta conversación entre todos los presentes.

Recordemos que cuando se habla en público hay que estar pendiente no sólo de lo que se dice, sino de cómo se dice, del vocabulario que se emplea, de los gestos, de los movimientos, de la forma de vestir, etcétera, todo ello será valorado por el público y determinará el mayor o menor éxito de la intervención, no en vano, el significado de la palabra comunicar (del latín comunicare) es el de compartir, hacer partícipe a otro de lo que uno sabe, por lo tanto, comunicación es primordialmente participación, intercambio.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

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