/ viernes 23 de julio de 2021

¡De bien para arriba! | Gestión del tiempo

Hemos sido testigos de la nueva normalidad a consecuencia del Covid-19 y como en los últimos 18 meses han cambiado las modalidades de forma acelerada, esta transformación ha incidido de manera directa en las nuevas acciones que se han suscitado en el campo laboral, de negocios, de la educación, de mercadotecnia, entre otros, hemos adoptado los medios digitales como herramientas para interactuar a distancia con la comunidad, y para lo cual vale la pena delinear los posibles alcances que de ello pueden derivarse.

Tomando en cuenta las limitantes de información y el clima de incertidumbre, con los datos actuales, que se hacen evidentes a contar de la pandemia, sabemos que, a pesar de las limitaciones, hemos podido identificar tendencias y efectos generales, lecciones y desafíos, que nos aterriza en una realidad que hace unos pocos meses atrás no imaginamos, ante este escenario inédito, ser flexible y comprensivo nos ayudará a evitar el estrés en caso de que nuestro plan de actividades cambie por cualquier circunstancia.

Todo este antecedente es una condición que nos pone a prueba en la gestión que hacemos del tiempo, trabajar desde casa puede haber presentado un periodo de adaptación, con inconvenientes para dormir o establecer horarios de comida, pero si esto sigue ocurriendo después de dieciocho meses, nos sugiere que el problema estaba previo a la pandemia y puede ser que teniendo la intención de rendir más, exponemos la convivencia familiar, los tiempos de descanso y relajación, seguramente no estamos aprovechando adecuadamente del tiempo que antes se usaba para transportarnos a nuestro lugar de trabajo, por ejemplo.

Las reglas de administración del tiempo han cambiado, cada día atendemos los mensajes desde casa, así como las diversas actividades laborales encomendadas y en la mayoría de los casos nuestros correos siguen recibiendo mensajes a toda hora y nos persiguen todo del día, con todo este antecedente debemos encontrar las formas para administrar nuestro tiempo de manera efectiva, aplicando una programación adecuada del tiempo de planificación de la agenda semanal, definir claramente los tiempos de inicio y término de cada tarea, ser específico en lo que se va a hacer, estableciendo prioridades y tomando en cuenta nuestra actividad personal y desde luego respetar ese plan de trabajo.

Tengamos un espacio para celebrar pequeños logros cada día, hagamos uso de las diversas aplicaciones que nos ayuden a organizarnos, elaboremos un check list de las actividades del día, respetemos los tiempos asignados a cada actividad y las prioridades, es importante darle el tiempo que merece a cada cosa, pero hagamos una sola cosa a la vez, no olvidemos los espacios para la diversión y el descanso, debemos tomar un break entre actividades para reanimarnos y hacer estiramientos, incluso escuchar un poco de música.

Debemos ser flexibles con la agenda del día y con nosotros mismos, ya que estando en casa surgen un montón de necesidades ocasionando que los tiempos y los espacios se combinen generando estrés al querer resolver el trabajo, necesidades de la familia y prioridades de la casa, no descuidemos nuestra salud mental, ayudémonos con actitud positiva y actividades saludables como el yoga, el fitness y sobre todo nuestra alimentación, recordemos la frase de Winston Churchill: “Esto no es el fin, ni siquiera es el comienzo del final. Pero tal vez sea el fin del comienzo”.

Tengamos en cuenta que algunos cambios adoptados durante esta crisis pueden volverse permanentes, todos somos consecuencia de un cambio; el tiempo no retorna, sigue su curso, y para ello debemos estar preparados, aprendamos a equilibrar todos estos cambios con una adecuada administración del tiempo y de nuestra salud.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

Re-Generación 19.

Hemos sido testigos de la nueva normalidad a consecuencia del Covid-19 y como en los últimos 18 meses han cambiado las modalidades de forma acelerada, esta transformación ha incidido de manera directa en las nuevas acciones que se han suscitado en el campo laboral, de negocios, de la educación, de mercadotecnia, entre otros, hemos adoptado los medios digitales como herramientas para interactuar a distancia con la comunidad, y para lo cual vale la pena delinear los posibles alcances que de ello pueden derivarse.

Tomando en cuenta las limitantes de información y el clima de incertidumbre, con los datos actuales, que se hacen evidentes a contar de la pandemia, sabemos que, a pesar de las limitaciones, hemos podido identificar tendencias y efectos generales, lecciones y desafíos, que nos aterriza en una realidad que hace unos pocos meses atrás no imaginamos, ante este escenario inédito, ser flexible y comprensivo nos ayudará a evitar el estrés en caso de que nuestro plan de actividades cambie por cualquier circunstancia.

Todo este antecedente es una condición que nos pone a prueba en la gestión que hacemos del tiempo, trabajar desde casa puede haber presentado un periodo de adaptación, con inconvenientes para dormir o establecer horarios de comida, pero si esto sigue ocurriendo después de dieciocho meses, nos sugiere que el problema estaba previo a la pandemia y puede ser que teniendo la intención de rendir más, exponemos la convivencia familiar, los tiempos de descanso y relajación, seguramente no estamos aprovechando adecuadamente del tiempo que antes se usaba para transportarnos a nuestro lugar de trabajo, por ejemplo.

Las reglas de administración del tiempo han cambiado, cada día atendemos los mensajes desde casa, así como las diversas actividades laborales encomendadas y en la mayoría de los casos nuestros correos siguen recibiendo mensajes a toda hora y nos persiguen todo del día, con todo este antecedente debemos encontrar las formas para administrar nuestro tiempo de manera efectiva, aplicando una programación adecuada del tiempo de planificación de la agenda semanal, definir claramente los tiempos de inicio y término de cada tarea, ser específico en lo que se va a hacer, estableciendo prioridades y tomando en cuenta nuestra actividad personal y desde luego respetar ese plan de trabajo.

Tengamos un espacio para celebrar pequeños logros cada día, hagamos uso de las diversas aplicaciones que nos ayuden a organizarnos, elaboremos un check list de las actividades del día, respetemos los tiempos asignados a cada actividad y las prioridades, es importante darle el tiempo que merece a cada cosa, pero hagamos una sola cosa a la vez, no olvidemos los espacios para la diversión y el descanso, debemos tomar un break entre actividades para reanimarnos y hacer estiramientos, incluso escuchar un poco de música.

Debemos ser flexibles con la agenda del día y con nosotros mismos, ya que estando en casa surgen un montón de necesidades ocasionando que los tiempos y los espacios se combinen generando estrés al querer resolver el trabajo, necesidades de la familia y prioridades de la casa, no descuidemos nuestra salud mental, ayudémonos con actitud positiva y actividades saludables como el yoga, el fitness y sobre todo nuestra alimentación, recordemos la frase de Winston Churchill: “Esto no es el fin, ni siquiera es el comienzo del final. Pero tal vez sea el fin del comienzo”.

Tengamos en cuenta que algunos cambios adoptados durante esta crisis pueden volverse permanentes, todos somos consecuencia de un cambio; el tiempo no retorna, sigue su curso, y para ello debemos estar preparados, aprendamos a equilibrar todos estos cambios con una adecuada administración del tiempo y de nuestra salud.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

Re-Generación 19.