/ viernes 17 de septiembre de 2021

¡De bien para arriba! | Síndrome de Cronos

La salud ocupacional tiene como finalidad promover y mantener el más alto grado de bienestar físico, mental y social de los trabajadores, en los últimos años se presenta un nuevo tipo de riesgos ocupacionales que tienen que ver con factores psicosociales y que se están convirtiendo en problemáticas muy importantes en el ámbito laboral, por las patologías concomitantes.

Según la mitología griega, Crono o Cronos era el líder, y parece ser que el más joven de la primera generación de Titanes (una raza de poderosos dioses), descendientes divinos de Gea (Tierra) y Urano (Cielo), de esa leyenda surge lo que actualmente en psicología laboral se conoce como síndrome de Cronos: el alto directivo, gerente o mando medio que impide que los demás hagan carrera en la empresa por miedo a ser desplazado, expresado de otra manera, dicho síndrome se caracteriza por la actitud de los directivos que evitan el crecimiento de los subordinados en el área en donde él ejerce su poder o lo posee.

Tenemos entonces que por Síndrome de Cronos, se entiende el miedo enfermizo y patológico a ser superado, y de él se deriva una exagerada necesidad de mantenerse seguro en el puesto que ocupa, y evitar a toda costa que nadie intente derrocarle de dicho puesto, resultado de estos miedos patológicos, el líder que lo padece evita expresar sus emociones, exhibir sus carencias, hablar de sus temores, y por otro lado, ostentar cualquier manifestación de poder, básicamente ante sus subordinados, para que les desanime, en la mayoría de las ocasiones irreal, tentativa de atentar contra su estabilidad en su puesto.

Cuando se presenta esta patología, se atenta contra los cinco principios de la gerencia del capital humano: productividad, comunicación, identificación, conducta y motivación, al ser un estilo de liderazgo basado en el miedo, afecta el estilo de mando y la calidad gerencial, impidiendo un correcto estilo directivo, orientado a ofrecer bienestar y al desarrollo de talento, buscan la sumisión y la obediencia y no el compromiso de todos los integrantes de la organización, cuando existen personas con el síndrome de Cronos, la gestión administrativa afecta la productividad y el rendimiento, y por el estrés que genera, influye en la salud de los trabajadores.

Entre los trastornos adicionales asociados a la cultura organizacional tenemos el mobbing (acoso laboral), la adicción laboral y el presentismo, estas afecciones administrativas se deben identificar, combatir y erradicar en cualquiera de las áreas administrativas donde pueda encontrarse, ya que hace crónicos los síntomas de insatisfacción laboral, las situaciones que reducen la salud psicológica y física de sus víctimas y afectan negativamente su bienestar y la eficiencia de otros trabajadores, y que al mismo tiempo da pie a la negligencia, el ausentismo y un aumento de permisos e incapacidades médicas.

Algunas de las soluciones que deben practicarse en toda organización consisten en una adecuada gestión de la cultura organizacional que fomente las relaciones interpersonales estimulantes, realizar periódicamente un diagnóstico de clima laboral que detecte áreas o personas con conflictos, fomentar la comunicación programando encuentros de integración donde todos expongan y comenten sus ideas con total soltura y libertad, gestionar un plan de salud ocupacional, que detecte estrés, depresiones, malestares físicos que provienen de las presiones laborales y pueden dificultar el desempeño de las actividades, e influir en la salud de los trabajadores.

Los puestos con alto grado de responsabilidad deben ser ocupados por personas que gozan de un mayor potencial, liderazgo y valor para que guíen a la organización y definan el clima que va a predominar en la organización, el poder es importante para aquellos que están sometidos a él, su ausencia produce desorden y esto va en contra de la eficiencia de la empresa, ya que la patología aquí descrita transgrede a las personas, a la organización y el desarrollo empresarial, como puede ser, ampliación de la curva de vida e innovación y el desarrollo social, entre otras afectaciones.

Por todo lo visto y descrito, la cualidad más importante que debe tener un jefe es que sea lo suficientemente honesto para reconocer, sin mezquindad, que sus subordinados pueden llegar a ser mejores que él y que no gane indulgencias ni loas con el trabajo que otros han realizado, que sepa motivar al logro, e incentivar sin amenazar, pero lo más esencial, y sin lo cual todo lo anterior sería un fracaso, es que el jefe debe ser una persona con un alto nivel ético, ya que sin esta cualidad todas las características anteriores no sirven de nada.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

Re-Generación 19

La salud ocupacional tiene como finalidad promover y mantener el más alto grado de bienestar físico, mental y social de los trabajadores, en los últimos años se presenta un nuevo tipo de riesgos ocupacionales que tienen que ver con factores psicosociales y que se están convirtiendo en problemáticas muy importantes en el ámbito laboral, por las patologías concomitantes.

Según la mitología griega, Crono o Cronos era el líder, y parece ser que el más joven de la primera generación de Titanes (una raza de poderosos dioses), descendientes divinos de Gea (Tierra) y Urano (Cielo), de esa leyenda surge lo que actualmente en psicología laboral se conoce como síndrome de Cronos: el alto directivo, gerente o mando medio que impide que los demás hagan carrera en la empresa por miedo a ser desplazado, expresado de otra manera, dicho síndrome se caracteriza por la actitud de los directivos que evitan el crecimiento de los subordinados en el área en donde él ejerce su poder o lo posee.

Tenemos entonces que por Síndrome de Cronos, se entiende el miedo enfermizo y patológico a ser superado, y de él se deriva una exagerada necesidad de mantenerse seguro en el puesto que ocupa, y evitar a toda costa que nadie intente derrocarle de dicho puesto, resultado de estos miedos patológicos, el líder que lo padece evita expresar sus emociones, exhibir sus carencias, hablar de sus temores, y por otro lado, ostentar cualquier manifestación de poder, básicamente ante sus subordinados, para que les desanime, en la mayoría de las ocasiones irreal, tentativa de atentar contra su estabilidad en su puesto.

Cuando se presenta esta patología, se atenta contra los cinco principios de la gerencia del capital humano: productividad, comunicación, identificación, conducta y motivación, al ser un estilo de liderazgo basado en el miedo, afecta el estilo de mando y la calidad gerencial, impidiendo un correcto estilo directivo, orientado a ofrecer bienestar y al desarrollo de talento, buscan la sumisión y la obediencia y no el compromiso de todos los integrantes de la organización, cuando existen personas con el síndrome de Cronos, la gestión administrativa afecta la productividad y el rendimiento, y por el estrés que genera, influye en la salud de los trabajadores.

Entre los trastornos adicionales asociados a la cultura organizacional tenemos el mobbing (acoso laboral), la adicción laboral y el presentismo, estas afecciones administrativas se deben identificar, combatir y erradicar en cualquiera de las áreas administrativas donde pueda encontrarse, ya que hace crónicos los síntomas de insatisfacción laboral, las situaciones que reducen la salud psicológica y física de sus víctimas y afectan negativamente su bienestar y la eficiencia de otros trabajadores, y que al mismo tiempo da pie a la negligencia, el ausentismo y un aumento de permisos e incapacidades médicas.

Algunas de las soluciones que deben practicarse en toda organización consisten en una adecuada gestión de la cultura organizacional que fomente las relaciones interpersonales estimulantes, realizar periódicamente un diagnóstico de clima laboral que detecte áreas o personas con conflictos, fomentar la comunicación programando encuentros de integración donde todos expongan y comenten sus ideas con total soltura y libertad, gestionar un plan de salud ocupacional, que detecte estrés, depresiones, malestares físicos que provienen de las presiones laborales y pueden dificultar el desempeño de las actividades, e influir en la salud de los trabajadores.

Los puestos con alto grado de responsabilidad deben ser ocupados por personas que gozan de un mayor potencial, liderazgo y valor para que guíen a la organización y definan el clima que va a predominar en la organización, el poder es importante para aquellos que están sometidos a él, su ausencia produce desorden y esto va en contra de la eficiencia de la empresa, ya que la patología aquí descrita transgrede a las personas, a la organización y el desarrollo empresarial, como puede ser, ampliación de la curva de vida e innovación y el desarrollo social, entre otras afectaciones.

Por todo lo visto y descrito, la cualidad más importante que debe tener un jefe es que sea lo suficientemente honesto para reconocer, sin mezquindad, que sus subordinados pueden llegar a ser mejores que él y que no gane indulgencias ni loas con el trabajo que otros han realizado, que sepa motivar al logro, e incentivar sin amenazar, pero lo más esencial, y sin lo cual todo lo anterior sería un fracaso, es que el jefe debe ser una persona con un alto nivel ético, ya que sin esta cualidad todas las características anteriores no sirven de nada.

Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!

Re-Generación 19