Actualmente en las organizaciones la transformación digital es una necesidad cuyo objetivo es optimizar los procesos, mejorar la competitividad y ofrecer un nuevo valor agregado a sus clientes; consiste en la integración de las nuevas tecnologías en todas las áreas de una empresa para cambiar su forma de funcionar y en su implantación deben participar todos los integrantes de la organización, pues también incluye un cambio de cultura y una reinvención de habilidades.
Dicho en otras palabras, la transformación digital son los cambios que las empresas adoptan como nuevas e innovadoras maneras de prestar sus servicios y hacer negocios con base en los avances tecnológicos y el uso de herramientas digitales, incorporando todas las Tecnologías de la Información (TI) en cada sector. Considerando que la sociedad actual está digitalizada y confiada en que la tecnología funcione sin problemas, tomemos como ejemplo los teléfonos inteligentes que contienen las herramientas suficientes para ser productivos todo el día: procesadores de texto, calendarios, notificaciones sobre el consumo de energía en el hogar, alternativas de transporte, servicios de entrega de comida y pronósticos del estado del tiempo, entre muchos otros.
Las dependencias públicas también buscan la transformación digital y en algunos estados del país es posible realizar diversos servicios relacionados con derechos vehiculares, renovación y canje de placas, pagos de contribuciones, renovación de licencias de manejo y servicios del Registro Civil como obtención en línea de actas de nacimiento, CURP, etc. Al mismo tiempo existen sitios de compras de bienes y servicios, así como sitios de consulta de contratos de servicios y obra pública, propiciando con esto, la transparencia, la simplificación administrativa y la disminución de actos de corrupción. Respecto a la Cd. de México se destaca la creación de la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) que busca concentrar la información, digitalizar los trámites y mejorar la relación entre la sociedad y el Gobierno.
Hoy en día el acceso a la información digitalizada y al conocimiento es relativamente fácil, inmediato, universal y económico, todos tenemos la oportunidad de acceder a todo tipo de datos, siguiendo la línea de indagación que parezca oportuna, sin el control de nadie; si se prefiere, es posible integrarse en redes múltiples de personas y colectivos que comparten intereses, proyectos y actividades, sin restricción de ninguna índole. Todo esto, en conjunto, ha propiciado un cambio en nuestra forma de comunicar, de actuar, de pensar y de expresar, representando transformaciones importantes en los ámbitos fundamentales de la vida social como la economía, la política y en general en la convivencia diaria entre seres humanos.
Lo que actualmente entendemos como pluralidad informativa y libre acceso a información o servicios, no debe ser visto como un avance o crecimiento tecnológico, sino como una posición de fortaleza para enfrentar el desarrollo que diariamente experimentan la tecnología y la digitalización. Habrá quien diga que estamos a medio camino o en el comienzo de una nueva era de la información o de las tecnologías, pero como sociedad debemos integrar un modelo incluyente, un escenario que nos prepare para el auge en lo digital y en lo tecnológico que transitan las sociedades actuales; considerando que los individuos establecen contacto con los recursos actualmente en pleno crecimiento y expansión, sumando la participación ciudadana, los movimientos sociales, los grupos más vulnerables y en las zonas más apartadas de nuestro país, y sobre todo observando la transversalidad.
Mientras tanto, recuerda que todo está previsto para que tengas un día ¡de bien para arriba!
Re-generación 19.
