/ martes 27 de abril de 2021

Economía para todos | Inflación y remanentes

Dentro de los principales temas que surgieron en la semana destacan la inflación durante la primera quincena de abril que rebasó los 6 puntos porcentuales y los remanentes del Banco de México.

Nuevamente vuelve a surgir inquietud por el dato reportado por el Inegi acerca de la inflación durante la primera quincena de abril, la cual aumentó hasta los 6.05 por ciento anual, cifra que no sobrepasaba los 6 puntos porcentuales desde la segunda quincena de diciembre de 2017.

Y es que de nuevo vuelve a ser incidida fuertemente por los precios de los energéticos debido a que hace un año, los precios del barril de petróleo por estas mismas fechas habían estado cayendo día con día por la débil demanda global por el confinamiento generalizado llegando a estar en precios negativos como en el 20 de abril de 2020 cuando la Mezcla Mexicana de Exportación llegó a cotizarse en (-)2.37 dólares por barril.

Sin embargo, si se analiza la variación quincenal, la inflación apenas incrementó un 0.06 por ciento respecto a la segunda quincena de marzo, donde según Inegi, los precios de los energéticos tuvieron un decrecimiento del (-)2.31 por ciento, mientras que las frutas y verduras fueron las que tuvieron un incremento del 3.23 por ciento y fueron las que tuvieron mayor incidencia en la inflación general.

Por su parte, si tomamos en cuenta solamente al área geográfica de Tampico en la medición de la inflación, tenemos que la variación quincenal fue menor a la observada a nivel nacional, siendo esta de (-)1.33 por ciento; mientras que la variación respecto a la misma primera quincena de abril del año pasado, la variación fue mayor comparada con la inflación nacional, siendo de 6.33 por ciento.

Por lo que es cuestión de que conforme vaya pasando el tiempo y se tome en base cifras menos impactadas por los precios de los energéticos de hace un año —segundo trimestre en adelante—, que volveremos a ver datos de inflación cercanos al rango objetivo de Banco de México, el cual es del 3 ± 1 puntos porcentuales.

Y ya que hablamos del “banco de bancos”, el viernes pasado publicó sus estados financieros dictaminados, donde de acuerdo con la Ley del Banco de México, en su Artículo 55º, se deberá entregar el importe íntegro de los remanentes de operación al Gobierno Federal dado que el Banco de México es una institución sin fines de lucro.

Sin embargo, este importe está condicionado debido a que después del ejercicio financiero anual, se deben amortizar las pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, así como preservar el valor real del capital del Banco más sus reservas e incrementar dicho valor conforme al producto interno bruto real y, en su caso, se podrán constituir las reservas adicionales; para posteriormente, y si existiera algún remanente, ser entregado al Gobierno Federal de acuerdo con la Ley del Banco de México.

Por lo que, según Banxico, los estados financieros dictaminados para el año 2020 presentaron un resultado de 165 mil 17 millones de pesos, de los cuales, se asignaron 121 mil 775 millones de pesos a la amortización de pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, mientras que los 43 mil 242 millones de pesos restantes, se destinaron a incrementar las reservas de capital. A su vez, para la reserva de revaluación de activos, no se pudieron asignar recursos y, por consiguiente, tampoco hubo un remanente de operación.

De tal forma, el Gobierno Federal no podrá contar con este recurso, siendo que hace unos meses se estaban relamiendo los bigotes al pedir que se adelantara la asignación de los remanentes de operación que, según sus cálculos, era entre 300 mil y 700 mil millones de pesos, siendo que con la depreciación del peso mexicano durante inicios de la pandemia el año pasado, las reservas de capital ascendieron fuertemente, para posteriormente, reducirse por una apreciación significativa del peso mexicano en los meses subsecuentes. Cuídese mucho.

Regeneración 19

Dentro de los principales temas que surgieron en la semana destacan la inflación durante la primera quincena de abril que rebasó los 6 puntos porcentuales y los remanentes del Banco de México.

Nuevamente vuelve a surgir inquietud por el dato reportado por el Inegi acerca de la inflación durante la primera quincena de abril, la cual aumentó hasta los 6.05 por ciento anual, cifra que no sobrepasaba los 6 puntos porcentuales desde la segunda quincena de diciembre de 2017.

Y es que de nuevo vuelve a ser incidida fuertemente por los precios de los energéticos debido a que hace un año, los precios del barril de petróleo por estas mismas fechas habían estado cayendo día con día por la débil demanda global por el confinamiento generalizado llegando a estar en precios negativos como en el 20 de abril de 2020 cuando la Mezcla Mexicana de Exportación llegó a cotizarse en (-)2.37 dólares por barril.

Sin embargo, si se analiza la variación quincenal, la inflación apenas incrementó un 0.06 por ciento respecto a la segunda quincena de marzo, donde según Inegi, los precios de los energéticos tuvieron un decrecimiento del (-)2.31 por ciento, mientras que las frutas y verduras fueron las que tuvieron un incremento del 3.23 por ciento y fueron las que tuvieron mayor incidencia en la inflación general.

Por su parte, si tomamos en cuenta solamente al área geográfica de Tampico en la medición de la inflación, tenemos que la variación quincenal fue menor a la observada a nivel nacional, siendo esta de (-)1.33 por ciento; mientras que la variación respecto a la misma primera quincena de abril del año pasado, la variación fue mayor comparada con la inflación nacional, siendo de 6.33 por ciento.

Por lo que es cuestión de que conforme vaya pasando el tiempo y se tome en base cifras menos impactadas por los precios de los energéticos de hace un año —segundo trimestre en adelante—, que volveremos a ver datos de inflación cercanos al rango objetivo de Banco de México, el cual es del 3 ± 1 puntos porcentuales.

Y ya que hablamos del “banco de bancos”, el viernes pasado publicó sus estados financieros dictaminados, donde de acuerdo con la Ley del Banco de México, en su Artículo 55º, se deberá entregar el importe íntegro de los remanentes de operación al Gobierno Federal dado que el Banco de México es una institución sin fines de lucro.

Sin embargo, este importe está condicionado debido a que después del ejercicio financiero anual, se deben amortizar las pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, así como preservar el valor real del capital del Banco más sus reservas e incrementar dicho valor conforme al producto interno bruto real y, en su caso, se podrán constituir las reservas adicionales; para posteriormente, y si existiera algún remanente, ser entregado al Gobierno Federal de acuerdo con la Ley del Banco de México.

Por lo que, según Banxico, los estados financieros dictaminados para el año 2020 presentaron un resultado de 165 mil 17 millones de pesos, de los cuales, se asignaron 121 mil 775 millones de pesos a la amortización de pérdidas acumuladas de ejercicios anteriores, mientras que los 43 mil 242 millones de pesos restantes, se destinaron a incrementar las reservas de capital. A su vez, para la reserva de revaluación de activos, no se pudieron asignar recursos y, por consiguiente, tampoco hubo un remanente de operación.

De tal forma, el Gobierno Federal no podrá contar con este recurso, siendo que hace unos meses se estaban relamiendo los bigotes al pedir que se adelantara la asignación de los remanentes de operación que, según sus cálculos, era entre 300 mil y 700 mil millones de pesos, siendo que con la depreciación del peso mexicano durante inicios de la pandemia el año pasado, las reservas de capital ascendieron fuertemente, para posteriormente, reducirse por una apreciación significativa del peso mexicano en los meses subsecuentes. Cuídese mucho.

Regeneración 19