De pronto, Di Stéfano estaba comprometido con Barcelona, Millonarios, River Plate y Real Madrid.
Barcelona vs Real Madrid... Sí, pero fijate que ambos equipos en este momento se encuentran a la baja, ¿Y? No existe mayor convocatoria futbolistica en el mundo, que la de estos dos gigantes... Sí, pero hoy no jugará Messi y Cristaino Ronaldo ya no está con los merengues... ¿Y? Hace tiempo que Di Stéfano ya no está con el Real Madrid y ni a los blancos ni a los blaugrana ni al público les ha afectado para que no llenen con su derbi el Camp Nou y el Santiago Bernabéu, ni que los mexicanos, argentinos, japoneses, rusos, árabes, australianos y cameruneses estén prendidos al televisor, con la seguridad de que nuestras expectativas de excitante emoción nos serán satisfechas.
Al igual que ocurre con todos los fans de un equipo, mis predilecciones cromáticas se definieron en mi pubertad, en México el América y en España el Real Madrid. Digamos 1952, ni el Barcelona ni el Madrid dominaban la península, los mandones eran el Atlético de Madrid y el Athlétic de Bilbao, pero los merengues se exhibieron por primera vez como émulos de Nicolás Maquiavelo, autor de la siguiente frase: “El león no puede protegerse de las trampas y el zorro no puede defenderse de los lobos. Uno debe ser por tanto un zorro para reconocer trampas y león para asustar a los lobos”. Por aquel tiempo, el equipo Millonarios de Colombia se encontraba de gira por Europa, y con sobresaliente actuación de Alfredo Di Stéfano, venció a los Merengues en el antiguo Chamartín por cuatro goles a dos, anotando el argentino en tres ocsiones.
En 1949, Di Stéfano había decidido abandonar al River Plate donde le pagaban 3 mil 500 dólares al año, para irse a Colombia en donde el Millonarios le ofreció 12 mil. Después del juego en Chamartín, Santiago Bernabéu, echó el ojo al chavo aquel, pero ahí también se encontraba José Samitier, visor del Barcelona, quienes fueron primeros en contactar con Alfredo, dado que a su estrella Vladislao Kubla se le había diagnosticado una tuberculosis que le impedía jugar. Así, el Barcelona habló con Di’Stéfano y con River y se trasladó a Barcelona. La FIFA recordó a los culés que el traspaso no era legal, pues Alfredo aún pertenecía a Millonarios, el argentino apenas si jugó tres amistosos con el Barça. En 1953, Martí Carreto, presidente de los catalanes, quiso cerrar trato con Millonarios, quienes le pidieron 1 millón 350 mil pesetas, que no depositaron, entonces apareció el Real Madrid y pagó.
Entonces Di Stéfano se encontró en una encrucijada, pues estaba comprometido con el Barcelona, Millonarios, River Plate y Real Madrid, sin poder jugar con ninguno por órdenes de FIFA. Fue así que la Federación Española pidió arbitraje al Organismo Internacional, quienes fueron salomónicos al ordenar dos temporadas para Barcelona y dos para Real Madrid. Y, ocurrió que en ese momento, la tuberculosis de Kubala había desaparecido, decidiendo el Barcelona que era tan grande, que no necesitaban compartir a ningún jugador. Fue entonces que Di Stéfano se convirtió en Merengue, iniciando así la leyenda que dio gloria a la Casa Blanca del futbol español. 8 Ligas, 5 Copas de Europa (Champions), algo difícil de superar.
Así, esos dos equipos que en este momento adolecen de la fuerza que los ha hecho los más populares del mundo, vuelven a llenar el Camp Nou ahora y, seguramente harán lo mismo en el juego de vuelta en el Bernabéu, y tendrán a todo el mundo frente al televisor, pues fuertes o débiles, en futbol, no hay quién ofrezca más que ellos. Hoy, los merengues sin CR-7, sin Gareth Bale ni Casemiro, los dos últimos entraron en la segunda parte igual que el gran ausente del Barcelona Lionel Messi. Pronto, al minuto 5, Karim Benzemá, el todólogo que haciéndola de atacante, armador y defensor, cobrando lo mismo que los demás, realizó una asistencia para el joven Lucas Vázquez que a bocajarro introdujo el balón en la meta blaugrana. Con Vázquez por derecha y Vinicius por izquierda, el Madrid llega en proporción que nada tiene que ver con la producción, que es raquítica, perdiéndose una gran cantidad de opciones claras de gol.
En la segunda parte, Bale sustituye a Vinicius aunque cambie nada, las llegadas de Gareth igualan a las del pequeño brasileño, pero igual que este, el balón sigue sin entrar y uno intenta imaginar lo que sería el galés encontrándose bien, siento que su tiempo como merengue está llegando a su fin, y lo mismo ocurre con Marcelo, quien no hace mucho, su ida y vuelta era única, pero ahora, o defiende o ataca, las dos cosas ya no, con lo que se le carga la chamba a Toni Kross, y es preocupante ver que por el lado derecho ocurre lo mismo, pues Dany Carvajal ha vuelto de su lesión dando muestras claras de una pérdida de ritmo dando la impresión de que sus recuperaciones son tan incompletas como las de Gareth Bale. Grave situación la de los merengues que, ya lo verán ustedes, como siempre, saldrán de este bache para sorprendernos como es su costumbre, y pronto, estos nombres que ya hicieron lo suyo dejaran su espacio para que los Ordeozola, Reguilón, Valverde, Llorente, Ceballos, Vallejo y más tomen la estafeta hasta cumplir la meta.
Hasta pronto amigo.
