/ sábado 16 de junio de 2018

El optimismo es fruto de un proceso interno de construcción de ilusiones

Las grandes obras fueron antes una idea. No hay idealista que no tenga un residuo positivo, como CR7.

En un juego disputado, Uruguay y Egipto se presentaron en el Mundial, en donde como ya sabíamos hubo de lamentarse la ausencia de Mohamed Salah en las filas de los africanos. Juego de consabido rigor táctico, en donde Héctor Cúper, por Egipto, y Óscar Tabárez, por Uruguay, dos viejos estrategas platenses, opondrían su sapiencia para llevarse los primeros puntos para su causa. Era obvio que con semejantes técnicos al frente de los equipos resultase un juego tan cerrado que se resolvió hasta el miunuto 90, con un cabezazo de Giménez a centro del rayado de Monterrey, Carlos Sánchez, sentenciándose así el partido en favor de los charrúas. Uruguay jugó con: Muslera; Valera, Godín, Giménez, Cáceres, Nahitán Nández, Bentancur, Vecino, Auain de Arrascaeta, Suárez y Cavani. Y por Egipto: Gabr, Gegazy, Eishehawy, Fathy, Elneny, Hamei, Warda, Abdalah, Treziguet, Moshen, Abdelshafy.

En el siguiente juego, notamos una gran diferencia en cuanto a eficacia con relación a Uruguay y Egipto. Marruecos e Irán, de buena técnica, adolecieron de igual táctica y eficacia, pues en 90 minutos de juego fueron incapaces de culminar con remate a gol sus avances, llegando a tornarse aburrido el partido que en momentos fue recriminado por el público que exigía mayor acción. Repito, los jugadores en el terreno de juego lucieron una técnica aceptable que no era acorde a la conclusión de las jugadas, lo que habla mal del trabajo de los directores técnicos.

Y más tarde, en el balneario de Rusia, la turística y calurosa Sochi, junto a Ucrania y a orillas del Mar Negro, donde se escenificaría el juego más importante de la jornada, España vs. Portugal, el clásico de la península ibérica entre España, en donde se encuentra el Real Madrid, tricampeón de la Champions League, y Portugal, monarca de la Eurocopa, o sea, un juego entre los campeones de las dos ligas más importantes de Europa, resultado, un juego que complacería a los más exigentes.

Apenas había iniciado el partido una internada de Cristiano Ronaldo por la banda izquierda, desde donde acostumbra enfilarse a gol en perfil cambiado, en esta ocasión enfrentando a Nacho, su compañero merengue, quien lo trabó dentro del área para que el árbitro decretara la pena máxima, siendo el mismo CR7 el encargado de cobrar, lanzando un balazo alto al lado izquierdo al que De Gea nunca hubiera llegado, que movió el marcador uno a cero.

El encuentro continuó bien jugado hasta que en el minuto 23, Diego Costa, que como siempre es un peligro para los defensas rivales, recibió fuera del área y con mucha categoría cambió el perfil, de estar de espaldas al marco a posicionarse de frente perfil derecho, amagó tiro y le creyeron, entonces enganchó a izquiereda, haciendo exactamente lo mismo, o sea enganche a derecha, para sacar un disparo seco que se metió pegado al poste derecho... 1-1. Vino entonces una muy buena jugada conducida por Iniesta, que concluyó Isco con un potente disparo que se estrelló en el travesaño, picando justo en la línea de gol, salvándose milagrosamente Portugal.

A punto de pitar el árbitro el fin de la primera parte, Cristiano patea fuerte de izquierda, saliendo el tiro directo a las manos del portero, que atacó mal el balón que le rebotó en la pierna derecha para irse a gol, clara falla de David de Gea, quien rara vez se equivoca. Dos para Portugal y uno para España cuando se van al descanso. Al reinicio, siendo el minuto 54, Diego Costa culminó su doblete cuando recibe de Busquets, quien se apuntó buena asistencia. Y así es el futbol, apenas pasó un minuto, el balón viajó hasta la meta lusitana, donde Nacho justo en la línea del área grande prendió un remate frontal venciendo a Rui Patricio.

Y fue hasta el minuto 87 cuando Cristiano Ronaldo fue fauleado por Piqué justo un metro fuera del área grande, desde donde intentaría hacer daño a la meta hispana. Sabemos bien que Cristiano Ronaldo tiene capacidad goleadora lanzando tiros libres desde fuera del área, y hoy fue la ocasión ideal cuando CR7 se perfiló lanzando a gol una curva impresionante que dejó a De Gea igual que a una estatua. Increíble, esto ha resultado una gran fiesta en la que quedamos conformes, pues ninguno de los dos equipos merecía perder. Los equipos alinearon con: Portugal: Rui Patricio; Raphael Guerreiro, Pepe, Fonte, Bernardo Silva, Joao Moutinho, Silva, Carvalho, Bruno Fernandes, Guedes, Soares y Cristiano Ronaldo... Cambios, André Silva, Joao Mario y Quaresma... Por España: De Gea, Nacho, Piqué, Ramos, Jordi Alba; Koke, Busquets, Iniesta, Isco, Diego Costa, David Silva... cambios, Tiago Alcántara, Lucas Vázquez, Iago Aspas.

Hasta pronto amigo.

Las grandes obras fueron antes una idea. No hay idealista que no tenga un residuo positivo, como CR7.

En un juego disputado, Uruguay y Egipto se presentaron en el Mundial, en donde como ya sabíamos hubo de lamentarse la ausencia de Mohamed Salah en las filas de los africanos. Juego de consabido rigor táctico, en donde Héctor Cúper, por Egipto, y Óscar Tabárez, por Uruguay, dos viejos estrategas platenses, opondrían su sapiencia para llevarse los primeros puntos para su causa. Era obvio que con semejantes técnicos al frente de los equipos resultase un juego tan cerrado que se resolvió hasta el miunuto 90, con un cabezazo de Giménez a centro del rayado de Monterrey, Carlos Sánchez, sentenciándose así el partido en favor de los charrúas. Uruguay jugó con: Muslera; Valera, Godín, Giménez, Cáceres, Nahitán Nández, Bentancur, Vecino, Auain de Arrascaeta, Suárez y Cavani. Y por Egipto: Gabr, Gegazy, Eishehawy, Fathy, Elneny, Hamei, Warda, Abdalah, Treziguet, Moshen, Abdelshafy.

En el siguiente juego, notamos una gran diferencia en cuanto a eficacia con relación a Uruguay y Egipto. Marruecos e Irán, de buena técnica, adolecieron de igual táctica y eficacia, pues en 90 minutos de juego fueron incapaces de culminar con remate a gol sus avances, llegando a tornarse aburrido el partido que en momentos fue recriminado por el público que exigía mayor acción. Repito, los jugadores en el terreno de juego lucieron una técnica aceptable que no era acorde a la conclusión de las jugadas, lo que habla mal del trabajo de los directores técnicos.

Y más tarde, en el balneario de Rusia, la turística y calurosa Sochi, junto a Ucrania y a orillas del Mar Negro, donde se escenificaría el juego más importante de la jornada, España vs. Portugal, el clásico de la península ibérica entre España, en donde se encuentra el Real Madrid, tricampeón de la Champions League, y Portugal, monarca de la Eurocopa, o sea, un juego entre los campeones de las dos ligas más importantes de Europa, resultado, un juego que complacería a los más exigentes.

Apenas había iniciado el partido una internada de Cristiano Ronaldo por la banda izquierda, desde donde acostumbra enfilarse a gol en perfil cambiado, en esta ocasión enfrentando a Nacho, su compañero merengue, quien lo trabó dentro del área para que el árbitro decretara la pena máxima, siendo el mismo CR7 el encargado de cobrar, lanzando un balazo alto al lado izquierdo al que De Gea nunca hubiera llegado, que movió el marcador uno a cero.

El encuentro continuó bien jugado hasta que en el minuto 23, Diego Costa, que como siempre es un peligro para los defensas rivales, recibió fuera del área y con mucha categoría cambió el perfil, de estar de espaldas al marco a posicionarse de frente perfil derecho, amagó tiro y le creyeron, entonces enganchó a izquiereda, haciendo exactamente lo mismo, o sea enganche a derecha, para sacar un disparo seco que se metió pegado al poste derecho... 1-1. Vino entonces una muy buena jugada conducida por Iniesta, que concluyó Isco con un potente disparo que se estrelló en el travesaño, picando justo en la línea de gol, salvándose milagrosamente Portugal.

A punto de pitar el árbitro el fin de la primera parte, Cristiano patea fuerte de izquierda, saliendo el tiro directo a las manos del portero, que atacó mal el balón que le rebotó en la pierna derecha para irse a gol, clara falla de David de Gea, quien rara vez se equivoca. Dos para Portugal y uno para España cuando se van al descanso. Al reinicio, siendo el minuto 54, Diego Costa culminó su doblete cuando recibe de Busquets, quien se apuntó buena asistencia. Y así es el futbol, apenas pasó un minuto, el balón viajó hasta la meta lusitana, donde Nacho justo en la línea del área grande prendió un remate frontal venciendo a Rui Patricio.

Y fue hasta el minuto 87 cuando Cristiano Ronaldo fue fauleado por Piqué justo un metro fuera del área grande, desde donde intentaría hacer daño a la meta hispana. Sabemos bien que Cristiano Ronaldo tiene capacidad goleadora lanzando tiros libres desde fuera del área, y hoy fue la ocasión ideal cuando CR7 se perfiló lanzando a gol una curva impresionante que dejó a De Gea igual que a una estatua. Increíble, esto ha resultado una gran fiesta en la que quedamos conformes, pues ninguno de los dos equipos merecía perder. Los equipos alinearon con: Portugal: Rui Patricio; Raphael Guerreiro, Pepe, Fonte, Bernardo Silva, Joao Moutinho, Silva, Carvalho, Bruno Fernandes, Guedes, Soares y Cristiano Ronaldo... Cambios, André Silva, Joao Mario y Quaresma... Por España: De Gea, Nacho, Piqué, Ramos, Jordi Alba; Koke, Busquets, Iniesta, Isco, Diego Costa, David Silva... cambios, Tiago Alcántara, Lucas Vázquez, Iago Aspas.

Hasta pronto amigo.