/ sábado 7 de diciembre de 2019

Elon y el dilema del auto eléctrico

El empresario alemán Hansjörg Gemmingen adquirió en el año 2014 un automóvil Tesla Model S de segunda mano con alrededor de 30,000 kilómetros recorridos, y quizás en ese momento ni en sus mejores expectativas se hubiera imaginado que 5 años después en noviembre de 2019 su auto seguiría operando con la extraordinaria cifra de 1 millón de kilómetros en su andar, y según él, le queda mucho aún por recorrer.

Hoy en el mundo la producción, venta y comercialización masiva de los autos eléctricos es una realidad, con Tesla Motors en la cima, Elon Musk ha demostrado que es una industria no solo viable, sino que, además, podría ser, gracias a los estímulos fiscales de muchos países, un nuevo paradigma en el escenario de la movilidad mundial.

Pero el camino de estas nuevas tecnologías no ha sido nada sencillo, amigo lector, y es muy posible que en los siguientes años veamos también nuevos y grandes retos para esta industria. Muchas empresas, en vista de la seria competencia que presentan los eléctricos, han comenzado a presentar sus versiones para este mercado, que ha dejado de ser de nicho, y se ha convertido en masivo. Mercedes, Volkswagen, Opel, Audi y más recientemente Ford han presentado modelos deportivos y SUV eléctricos con excelentes características y que pretenden si no de uno, en conjunto, eclipsar las ventas de Tesla.

El mercado del vehículo eléctrico sigue siendo muy pequeño en comparación al convencional, pero tiene un crecimiento vigoroso. Se ve en mercados locales y se observa a nivel mundial. Si bien en México y Latinoamérica aún no llega su auge, debido en gran parte a la falta de infraestructura de súper cargadores (las “gasolineras eléctricas” de esta tecnología) en países de Europa, Asia, EE.UU. y Canadá cada vez tiene mayor penetración.

Y con este acelerado modelo de crecimiento han aparecido también los primeros problemas, y algunas dudas que nos asaltan. ¿Realmente el uso de autos eléctricos es la panacea para el problema de contaminación mundial? ¿Cuántos años tardará para que todos los países en el mundo tengan al menos un Súper Cargador por cada 1,000 usuarios?. Recientemente en el fin de semana de Acción de Gracias, en EE.UU. se hizo viral un video que mostraba una fila de varias decenas de autos eléctricos, en su mayoría Tesla, esperando para recargarse al norte de California, junto a él, un usuario comentaba si este sería un problema recurrente de esta tecnología, sin embargo, antes de que la fila llegara a los 100 vehículos, Tesla hizo llegar un Centro de Carga Masivo en uno de sus camiones (eléctrico también) para incrementar las tomas en 12 unidades, lo que solventó la larga espera a solo unos minutos por vehículo.

Pero, ¿ésta será la realidad para todos los lugares del mundo?. Si bien la electricidad como combustible tiene la ventaja de una rápida escalabilidad en cuanto a conexiones se refiere, sigue teniendo los mismos inconvenientes de los combustibles fósiles en cuanto a la enorme dependencia de los mismos.

¿Y cuánta contaminación se genera para producir la electricidad que alimenta a esta industria?, será que solo estamos haciendo un eufemismo del mismo problema. A nivel internacional, Tesla consiguió en 2018 su récord de ventas con 245 mil 240 unidades, cifra que este año va camino de llegar a las 400 mil que pronosticó su CEO Elon Musk, por supuesto, en twitter®. Habrá que ver las de 2019 el próximo año. A las que no solo se sumarán las de las empresas ya mencionadas, hay un nuevo jugador en la balanza, y parece ser un rival muy importante, su nombre es NIO, y su país no podría ser otro China.

Para la industria y para Tesla, quedarán muchas preguntas que responder si es que quieren seguir creciendo, y con el fiasco que acaban de pasar en la presentación de su primera camioneta la CyberTruck (donde muchos pudimos ver cómo sus vidrios irrompibles se rompieron) hay mucho trabajo por hacer, sin embargo Musk ha dicho muchas veces que su empresa está más de 6 años por delante en cuanto a tecnología a todos sus competidores, lo cual se materializa en su sistema de conducción autónoma, el cual recibe actualizaciones de manera constante y se ha ido perfeccionando de gran manera (luego de algunos accidentes que no debemos olvidar).

Sin duda habrá aún muchas sorpresas en los próximos 10 años, y en una época donde la tecnología y la magia parecieran ser lo mismo, el auto eléctrico tendrá que pasar muchas y duras pruebas, sea de Tesla o no.

Nos vemos en la Red.

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El empresario alemán Hansjörg Gemmingen adquirió en el año 2014 un automóvil Tesla Model S de segunda mano con alrededor de 30,000 kilómetros recorridos, y quizás en ese momento ni en sus mejores expectativas se hubiera imaginado que 5 años después en noviembre de 2019 su auto seguiría operando con la extraordinaria cifra de 1 millón de kilómetros en su andar, y según él, le queda mucho aún por recorrer.

Hoy en el mundo la producción, venta y comercialización masiva de los autos eléctricos es una realidad, con Tesla Motors en la cima, Elon Musk ha demostrado que es una industria no solo viable, sino que, además, podría ser, gracias a los estímulos fiscales de muchos países, un nuevo paradigma en el escenario de la movilidad mundial.

Pero el camino de estas nuevas tecnologías no ha sido nada sencillo, amigo lector, y es muy posible que en los siguientes años veamos también nuevos y grandes retos para esta industria. Muchas empresas, en vista de la seria competencia que presentan los eléctricos, han comenzado a presentar sus versiones para este mercado, que ha dejado de ser de nicho, y se ha convertido en masivo. Mercedes, Volkswagen, Opel, Audi y más recientemente Ford han presentado modelos deportivos y SUV eléctricos con excelentes características y que pretenden si no de uno, en conjunto, eclipsar las ventas de Tesla.

El mercado del vehículo eléctrico sigue siendo muy pequeño en comparación al convencional, pero tiene un crecimiento vigoroso. Se ve en mercados locales y se observa a nivel mundial. Si bien en México y Latinoamérica aún no llega su auge, debido en gran parte a la falta de infraestructura de súper cargadores (las “gasolineras eléctricas” de esta tecnología) en países de Europa, Asia, EE.UU. y Canadá cada vez tiene mayor penetración.

Y con este acelerado modelo de crecimiento han aparecido también los primeros problemas, y algunas dudas que nos asaltan. ¿Realmente el uso de autos eléctricos es la panacea para el problema de contaminación mundial? ¿Cuántos años tardará para que todos los países en el mundo tengan al menos un Súper Cargador por cada 1,000 usuarios?. Recientemente en el fin de semana de Acción de Gracias, en EE.UU. se hizo viral un video que mostraba una fila de varias decenas de autos eléctricos, en su mayoría Tesla, esperando para recargarse al norte de California, junto a él, un usuario comentaba si este sería un problema recurrente de esta tecnología, sin embargo, antes de que la fila llegara a los 100 vehículos, Tesla hizo llegar un Centro de Carga Masivo en uno de sus camiones (eléctrico también) para incrementar las tomas en 12 unidades, lo que solventó la larga espera a solo unos minutos por vehículo.

Pero, ¿ésta será la realidad para todos los lugares del mundo?. Si bien la electricidad como combustible tiene la ventaja de una rápida escalabilidad en cuanto a conexiones se refiere, sigue teniendo los mismos inconvenientes de los combustibles fósiles en cuanto a la enorme dependencia de los mismos.

¿Y cuánta contaminación se genera para producir la electricidad que alimenta a esta industria?, será que solo estamos haciendo un eufemismo del mismo problema. A nivel internacional, Tesla consiguió en 2018 su récord de ventas con 245 mil 240 unidades, cifra que este año va camino de llegar a las 400 mil que pronosticó su CEO Elon Musk, por supuesto, en twitter®. Habrá que ver las de 2019 el próximo año. A las que no solo se sumarán las de las empresas ya mencionadas, hay un nuevo jugador en la balanza, y parece ser un rival muy importante, su nombre es NIO, y su país no podría ser otro China.

Para la industria y para Tesla, quedarán muchas preguntas que responder si es que quieren seguir creciendo, y con el fiasco que acaban de pasar en la presentación de su primera camioneta la CyberTruck (donde muchos pudimos ver cómo sus vidrios irrompibles se rompieron) hay mucho trabajo por hacer, sin embargo Musk ha dicho muchas veces que su empresa está más de 6 años por delante en cuanto a tecnología a todos sus competidores, lo cual se materializa en su sistema de conducción autónoma, el cual recibe actualizaciones de manera constante y se ha ido perfeccionando de gran manera (luego de algunos accidentes que no debemos olvidar).

Sin duda habrá aún muchas sorpresas en los próximos 10 años, y en una época donde la tecnología y la magia parecieran ser lo mismo, el auto eléctrico tendrá que pasar muchas y duras pruebas, sea de Tesla o no.

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