Si hay algo que sabemos hacer muy bien los emprendedores mexicanos es convertir las condiciones de incertidumbre cuando existen escenarios cambiantes en oportunidades para hacer negocios y sacudir al mercado.
Ahora buscamos la profesionalización, formamos equipos con habilidades multidisciplinarias, ya no emprendemos en solitario y cada vez hay más mujeres al frente de un negocio. Incluso algunos emprendedores abren más de una startup.
Y es que en el país, la actividad emprendedora vive una etapa de esplendor, de hecho, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía, cada mes se abren 35,000 empresas, Además, tres de cada 10 emprendedores que abrieron un negocio lo hicieron por necesidad, mientras que el resto lo hizo con el fin de mejorar su estilo de vida y de profesionalizarse, ello de acuerdo a datos del reporte Global Entrepreneurship Monitor.
En ello, un papel preponderante lo jugó el hoy extinto Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM) organismo que canalizaba la política de apoyo al sector productivo mediante esquemas de financiamiento diversificados, con lo cual, el ecosistema emprendedor tuvo un auge y avanzó con miras a su consolidación.
Sin embargo, la actual administración decidió extinguir el instituto, una decisión aprobada por la Cámara de Diputados en abril de 2019, el argumento para ello fue acabar con los intermediarios entre los emprendedores y las mipymes y el gobierno federal.
De hecho, incluso en economías desarrolladas, el ecosistema emprendedor depende de un esquema triple hélice (sector público, academia y sector privado) con miras a establecer políticas conjuntas de crecimiento y desarrollo económico.
Si bien es cierto que el ecosistema emprendedor mexicano ya tiene una cierta madurez, en adelante los emprendedores buscarán recursos y mecanismos para crecer por sí mismos, con ingenio, sumando esfuerzos, y sobre todo, tendrán que profesionalizarse para poder levantar capital a través de fondos privados de inversión.
De 2013 a 2018, el INADEM fondeó 108 mil proyectos productivos, 500 mil negocios y 181 proyectos de alto impacto, apoyando a un total de 4.4 millones de mipymes y emprendedores, que generaron alrededor de cuatro millones de empleos nuevos. Pese al impulso que dio, algo en lo que coinciden diversos analistas especializados es que le faltó transparentar aún más los métodos para obtener estos recursos.
No obstante, otro de los aciertos que tuvo el INADEM es que fomentó la creación de empresas de alto impacto en sectores específicos de tecnología e innovación. Además, a raíz de la creación del instituto, más fondos de venture capital (capital de riesgo) voltearon a ver a México para invertir en startups mexicanas, con lo que aumentó el número de empresas que se fundaron en nuestro país.
El ritmo de atracción de inversión que está teniendo México es alentador para el ecosistema emprendedor, para muestra, algunos fondos de inversión privados como Softbank, AlLLVP, Angel Ventures, Dila Capital, Mountain Nazca, entre otros, están apostando en esta área de oportunidad. Según la Asociación para la Inversión de Capital Privado en América Latina (LAVCA) tan sólo en 2018 las startups mexicanas levantaron un total de 175 millones de dólares, y en el primer semestre de 2019, diversos fondos han invertido cerca de 139 millones de dólares.
Sin duda alguna, el cierre del INADEM es una oportunidad para replantear los esfuerzos que deben hacerse desde la política pública, para seguir fomentado e impulsando el emprendimiento en México de una manera estratégica.
Es bien cierto que el Instituto Nacional del Emprendedor apalancó el surgimiento de más empresas en México, pero aún quedan sin respuesta las preguntas acerca de cuántas realmente se mantienen vivas en el mercado y cuántas lograrán ser escalables en los próximos años.
El dato Emprende y Aprende
La importancia de las Pymes para nuestro país radica en que de los 4.2 millones de unidades económicas que existen en México, el 99.8% son Pymes y generan el 78% del empleo en el país aportando un 42% del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo a datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Por parte del actual gobierno federal, se muestra disposición para impulsar el emprendimiento, sin embargo, los emprendedores debemos estar preparados para sacar a flote nuestros negocios, aún con las incertidumbres y turbulencias económicas, políticas y sociales que vive el país en estos momentos. En perspectiva personal, te comparto que la entrada al país de jugadores con fondos para invertir en startups mexicanas, ayudará mucho más al ecosistema que otro instituto como el INADEM dado que para acceder a estos mecanismos de financiamiento, es requisito indispensable estar en mejora continua.
Mantengamos comunicación a través de mi correo electrónico y redes sociales para que juntos hagamos más grande la comunidad de emprendedores que aprenden.
¡Hasta la próxima semana!
