/ jueves 25 de febrero de 2021

Fractal | Generación de hierro... hay que salvarla, pero aplicando la lógica

Estos días son de mucho jaleo, entre la pandemia y las cuestiones de supervivencia diaria de toda la sociedad, pero hay algo que llamó mi atención por el lado médico, lo que está en boca de todos es el importante tema de las vacunas, pero ¿qué fue lo que me hizo ruido?

La medicina veterinaria tiene todo que ver con la salud pública, y estamos muy familiarizados con la aplicación de biológicos en poblaciones animales muy grandes, y desde mi visión o experiencia noto algo que no es correcto.

Llevamos casi un año de cuarentena y nuestros adultos mayores son los que más tiempo han estado en aislamiento, la paciencia y seguimiento de las medidas recomendadas han logrado que por estos meses no enfermaran, pero sí es posible que su sistema inmunológico esté afectado ya sea por la falta de sol, el estrés, y en algunos casos por no tener un control adecuado de otras enfermedades ya existentes, y cuando vi las largas filas de abuelitos deseando salvar sus vidas con la aplicación de la vacuna, me dio un escalofrío, al pasar por mi mente lo peligroso que se torna este panorama, al reunir a tantas personas que pasaron casi un año aisladas, que por ende están disminuidas física y emocionalmente, con temperaturas muy bajas y en situación de estrés, mi primera reacción fue de tristeza al pensar en el gran porcentaje de riesgo que este proceso puede desencadenar, todo este tiempo se cuidaron, y en un solo día pueden contraer el bicho, y aún peor, la gran mayoría de biológicos causan inmunodepresión, lo cual se traduce en un alto riesgo para nuestra generación de hierro, pregunto; ¿si hay un padrón en el cual se tiene identificados a los adultos mayores, no sería más seguro como lo han hecho en otros países, visitar colonia por colonia y vacunar al abuelito o abuelita, directo en su domicilio? Así no se expone y de cualquier forma el sector Salud ya está familiarizado con esta técnica de visitas, como se ha realizado con las vacunas anteriores.

Creo que, si el plan es salvar a nuestros adultos mayores, lo ideal sería evitar ponerlos en riesgo, la gran mayoría usaron el transporte público, llegaron muy temprano o de madrugada para hacer su fila, esperaron muchas horas algunos de pie, y los más avispados llevaron su silla de playa, el frío fue otro componente de esta receta de posible enfermedad, ya que por mala suerte el frente polar se desató en esos días de inicio de vacunación, no sé si soy solo yo, o alguien más se sintió estresado al ver este panorama.

Lo planteo desde el punto de vista médico, y usando la lógica y el sentimiento de consideración para estos hombres y mujeres, que forjaron con sus años de trabajo el México el cual habitamos.

“Usar el sentido común y aplicar la lógica no afecta la salud, la ausencia de estos pensamientos puede generar grandes tragedias.”

O ¿usted qué opina?

Regeneración 19.

Estos días son de mucho jaleo, entre la pandemia y las cuestiones de supervivencia diaria de toda la sociedad, pero hay algo que llamó mi atención por el lado médico, lo que está en boca de todos es el importante tema de las vacunas, pero ¿qué fue lo que me hizo ruido?

La medicina veterinaria tiene todo que ver con la salud pública, y estamos muy familiarizados con la aplicación de biológicos en poblaciones animales muy grandes, y desde mi visión o experiencia noto algo que no es correcto.

Llevamos casi un año de cuarentena y nuestros adultos mayores son los que más tiempo han estado en aislamiento, la paciencia y seguimiento de las medidas recomendadas han logrado que por estos meses no enfermaran, pero sí es posible que su sistema inmunológico esté afectado ya sea por la falta de sol, el estrés, y en algunos casos por no tener un control adecuado de otras enfermedades ya existentes, y cuando vi las largas filas de abuelitos deseando salvar sus vidas con la aplicación de la vacuna, me dio un escalofrío, al pasar por mi mente lo peligroso que se torna este panorama, al reunir a tantas personas que pasaron casi un año aisladas, que por ende están disminuidas física y emocionalmente, con temperaturas muy bajas y en situación de estrés, mi primera reacción fue de tristeza al pensar en el gran porcentaje de riesgo que este proceso puede desencadenar, todo este tiempo se cuidaron, y en un solo día pueden contraer el bicho, y aún peor, la gran mayoría de biológicos causan inmunodepresión, lo cual se traduce en un alto riesgo para nuestra generación de hierro, pregunto; ¿si hay un padrón en el cual se tiene identificados a los adultos mayores, no sería más seguro como lo han hecho en otros países, visitar colonia por colonia y vacunar al abuelito o abuelita, directo en su domicilio? Así no se expone y de cualquier forma el sector Salud ya está familiarizado con esta técnica de visitas, como se ha realizado con las vacunas anteriores.

Creo que, si el plan es salvar a nuestros adultos mayores, lo ideal sería evitar ponerlos en riesgo, la gran mayoría usaron el transporte público, llegaron muy temprano o de madrugada para hacer su fila, esperaron muchas horas algunos de pie, y los más avispados llevaron su silla de playa, el frío fue otro componente de esta receta de posible enfermedad, ya que por mala suerte el frente polar se desató en esos días de inicio de vacunación, no sé si soy solo yo, o alguien más se sintió estresado al ver este panorama.

Lo planteo desde el punto de vista médico, y usando la lógica y el sentimiento de consideración para estos hombres y mujeres, que forjaron con sus años de trabajo el México el cual habitamos.

“Usar el sentido común y aplicar la lógica no afecta la salud, la ausencia de estos pensamientos puede generar grandes tragedias.”

O ¿usted qué opina?

Regeneración 19.