Siempre la mano del hombre en la naturaleza genera cambios, los cuales tienen consecuencias serias en los ecosistemas, y después de ser nosotros los causantes del problema, estigmatizamos a las especies que salen de control, y buscamos formas radicales para subsanar nuestro error.
Hay un tema importante en nuestra zona, lo han comentado desde muchos puntos de vista, pero en realidad ¿se está tomando en serio el aumento en la población de saurios en el corazón hídrico de nuestro bello Tampico?, cuántos no hemos disfrutado del paisaje de nuestra laguna, tortugas, iguanas, aves, coyotes, tlacuaches y los imponentes lagartos tomando el sol; según historiadores, ellos llegaron a esta zona porque no encontraron un buen lugar en el zoológico de Tamatán ubicado en nuestra capital, fueron liberados y olvidados de cierta forma, ya que no se pensó en tener un control sobre la evolución de la especie, en realidad la especie Crocodylus moreletii sí existía en el estado más no en el sistema lagunario, la falta de interés ha generado un repunte en la reproducción y distribución de nuestros amigos saurios, en realidad el factor de riesgo que representan es latente, pero los accidentes que se han presentado siempre han sido por negligencia humana, ellos se han adaptado a estar en contacto con nosotros, el nivel de agresión es bajo, ya lo comentaba en 2002 el fallecido Steve Irwin en su visita a Tampico, en lo que sí quiero hacer hincapié es que toda especie requiere de control, y normalmente este control es de forma natural por medio de depredadores, pero los majestuosos saurios no tienen un depredador natural en la zona, y esto en cualquier especie es peligroso, ya que su reproducción no tiene freno, en otras partes del país y del mundo este tipo de fauna es controlada por medio de la industria, ya sea cárnica o peletera la cual se rige por estrictas normas internacionales, o sea que no se trata de solo hacer una masacre indiscriminada, la especie se tiene que controlar y es cuando los gobiernos tienen que afrontar el abandono de tantas décadas.
Y entramos en un terreno pantanoso en lo real, moral y ecológico, los puntos de vista son muy variados y es cuando tenemos que tomar ejemplos como los de Florida en Estados Unidos o países sudamericanos, que con éxito logran mantener el equilibrio en zonas protegidas, pero se tiene que permitir a la iniciativa privada que sea quien impulse estos proyectos, y puedan ser regidos por instituciones a nivel mundial, con formas legales y sanitarias y de índole ecológico, que asegure la sustentabilidad y el respeto a la especie y el ecosistema, quiero dejar en claro que ellos no son los malos, ellos son la consecuencia de nuestras malas decisiones y así como con muchas especies de flora y fauna jugamos a ser los omnipotentes, cuando ellos muestran su fuerza como especie, nos aterrorizamos y la lógica humana es eliminarlos, todos formamos parte del ecosistema, y el respeto para con las demás especies se tiene que demostrar de parte de los racionales, o por lo menos así creo que tiene que ser.
O ¿usted qué opina?
Regeneración 19.
