La magia consiste en aprender a observar lo que pasa en la tierra con esa mística visión que solo tienen los que están en el cielo. Y así, como esperando el principio de un nuevo final, estamos inmersos en la obsolescencia programada de todo lo que nos rodea, le pusieron fecha de caducidad desde algunos años a todo lo que entendemos por vida.
Al momento de escribir estas líneas, a las primeras horas del jueves 30 de septiembre de 2021 me aborda la inminente incertidumbre de un final abrupto, el aire de las ciudades huele a final, y no me refiero a las administraciones públicas municipales que hoy terminan y que seguramente para el sábado que usted lee estas líneas serán parte de la historia de nuestras ciudades, el final al que refiero es uno que ha sido anunciado desde hace poco, pero que en realidad estaba escrito desde hace mucho, me refiero al final del Internet.
Pero… tomemos un momento, no alarmemos sin necesidad el espíritu y a los amigos de Facebook, quiero escribirle amigo lector que este “final de la red” llega hoy, pero solo para ciertos dispositivos, un apagón programado debido a un protocolo de programación que lleva años oculto, latente, en millones de dispositivos.
El 30 de septiembre comenzó ya el "apagón de internet" en varios dispositivos, los cuales no podrán conectarse a la red. Los afectados por este fenómeno serán consolas de videojuegos, computadoras, televisores inteligentes, celulares y toda clase de dispositivos que requieren de internet.
Le explico, primero lo técnico, amigo lector, este apagón sucede debido al vencimiento de un certificado de autentificación necesario para validar la conexión entre el dispositivo y el servidor. Es decir, que los dispositivos que no estén actualizados quedarán obsoletos para la conexión a internet. Let’s Encrypt y los certificados HTTPSIdentTrust DST Root CA X3, la raíz del problema.
El certificado de seguridad en cuestión es el CA de DST Root CA X3 de Let’s Encrypt; éste se encuentra principalmente en dispositivos móviles antiguos, ya sean celulares, consolas de videojuegos, tablets, televisores y otros gadgets con capacidad de conexión, los cuales perderán la posibilidad de conectarse a internet a partir del 30 de septiembre.
Los problemas de conexión a internet de los dispositivos mencionados se presentan a partir del 30 de septiembre, y su única posible solución -no en todos los casos cabe señalar- es que el firmware (programa básico que controla los circuitos electrónicos de cualquier dispositivo) del equipo sea actualizado.
Para poder determinar el ¿Cómo? Y el ¿Dónde? Descargar la actualización del certificado en cuestión para su dispositivo, dependerá mucho del soporte que la empresa que lo fabrica ofrezca a sus usuarios, en el caso de muchas marcas reconocidas, no deberá siquiera preocuparse, pues es casi seguro que su dispositivo ya ha sido actualizado de manera automática desde hace varias semanas, si su dispositivo es una copia de origen chino, pues, nos vemos el 2 de noviembre.
Google y los foros técnicos especializados pueden ser una buena alternativa, solo debe buscar “Nombre de su equipo + firmware” en la red para acceder a soporte -en el caso de existir- descargar un archivo y seguir al pie de la letra sus instrucciones, le comento también lo haga con cautela, implica conectar físicamente el dispositivo a una computadora, ya que, de hacerlo mal, muchas veces el daño podría ser irreparable.
Ahora, le explico un poco de lo mercadológico; para muchas empresas como es de todos conocido lo más importante es obtener más y más dinero -dicho con sarcasmo- en todo caso, cualquier cosa vale, desde promoción intensa de la marca, la innovación.
La mejora del producto (imagíneme riendo a carcajadas) hasta lo más ruin, como dejar dentro de millones de dispositivos un certificado que vencerá en un futuro mediano y disfrazarlo como “planeación de seguridad a largo plazo” con el fin de obligar a muchos de esos usuarios a comprar otro dispositivo de manera inmediata, justo ahora cuando comenzamos el final del año y nos acercamos a las fiestas.
Criterio y burla aparte, el tener el control de los dispositivos que compramos no debería de ser una oportunidad dejada al destino, sino un derecho universal marcado en todas las legislaciones – ojo, nuevos diputados – que garantice a los consumidores el derecho a reparar, actualizar y modificar sus bienes hasta donde los límites fijos le permitan.
No podemos ser esclavos de los abruptos finales, ni llamarnos dueños de nuestro destino, cuando ridículamente no terminamos de ser dueños, ni de las cosas que compramos. ¿No cree?
Facebook:
- www.facebook.com/soylalodelatorre
Twitter:
- @lalodelatorreg
Email:
- tecnologia@lalodelatorre.com
Facebook:
- www.facebook.com/soylalodelatorre
Twitter:
- @lalodelatorreg
Email:
- tecnologia@lalodelatorre.com
"Aquel que ya perdió algo que daba por hecho, al final aprende que nada le pertenece", Paulo Coelho
