/ sábado 6 de junio de 2020

Hablemos de Tecnología | Anonymous

La Revolución es el reflejo más puro de los deseos de libertad de las sociedades. Pero muy distinto a lo que la historia nos puede contar, existen revoluciones sutiles, silenciosas, que nacen y crecen a la sombra del secreto, de los pocos espacios realmente libres, de la masividad, del anonimato, es ahí, donde en 2003, Anonymous, el movimiento “hacktivista” y no la caricatura usando máscaras de plástico, realmente nació, ha estado presente y llegó para quedarse.

En la informática como en los videojuegos existe el término “niño rata” que es una forma burlesca de llamar a aquellos personajes que encuentran dentro de la valentía de su total ignorancia, las actitudes para abordar un tema que desconocen totalmente, así hace apenas unos días en Twitter® un grupo de jóvenes hacían burla del último video del colectivo Anonymous donde de nueva cuenta un actor hacía declaraciones alucinantes detrás de una máscara inspirada en el cómic “V de Vendetta” del extraordinario Alan Moore, y generaban memes argumentando que este grupo había copiado la imagen de la seria española “La Casa de Papel” en la que usan una máscara de Salvador Dalí estilizada.

En realidad, amigo lector, para poder abordar el tema de Anonymous harían falta varias columnas al hilo, pero trataré de resumir, en la medida de mis posibilidades, este interesante fenómeno que se comenzó a generar en el año 2003 como una broma en los tristemente famosos foros del sitio 4chan. De ahí, varios grupos de personas que se presentaban a sí mismos como colectivos hacker, comenzaron a participar y a planear acciones de activismo digital en contra de lo que denominaron el “sistema” o “El Nuevo Orden Mundial”, de ellos pasarían a la posteridad personajes tan famosos como Julián Assange, periodista y programador australiano, fundador del sitio “WikiLeaks” ó Edward Snowden, exconsultor disidente del gobierno de los EEUU quién a través de los años “filtró” mucha información confidencial por Internet. Estos fueron solo la punta de lanza de muchos otros, militantes, simpatizantes, o simplemente curiosos del fenómeno de Anonymous.

Y ello es porque, el término Anonymous no se refiere a un solo grupo de personas, sino a una verdadera cultura de activismo social y político, en donde programadores, matemáticos, ingenieros, políticos e incluso hackers de sombrero negro (bandidos) han encontrado una coyuntura para participar y hacer suyas las causas que consideran dañinas a la sociedad. De ahí que hayan creado el término “hacktivismo” como una fusión entre “hacker” y “activismo”.

Pero debemos tener cuidado, no todo “hacktivismo” es totalmente bueno, o totalmente malo, todo depende como en la vida, a través del cristal que se mire, no debe ser entendido desde un prisma reduccionista como equivalente siempre al desarrollo de actividades subversivas. Existen tendencias y ramificaciones del “hacktivismo” en la liberación de conocimiento (Wikipedia por ejemplo), OpenPhoto y tantos sitios que han surgido en los últimos meses, para ofrecer educación online libre, o en la liberación de información clasificada que se considera debe estar, por definición, a disposición de la sociedad (casos de WikiLeaks o las filtraciones de Snowden sobre las actividades militares y casos de espionaje gubernamentales).

Por añadidura las actividades hacker deben estar enfocadas en la defensa de las libertades y en la búsqueda del conocimiento y educación universal, de carácter libre y gratuito, pero pongamos atención, no siempre al alcance de todos, para acceder a ellas al menos debe contarse con acceso a internet desde algún dispositivo, cosa que en México afortunadamente ya damos como un hecho común, sin embargo, esta no es la misma realidad para muchas personas en otros países, que no pueden siempre costearse ese lujo.

También es importante señalar, que muchas operaciones políticas y sociales malintencionadas se han disfrazado de “hacktivismo”, como la curiosa filtración de correos electrónicos de candidatos en EEUU justo en periodo electoral, (porque no antes). Así como, los movimientos de protesta en diversos países de la comunidad árabe, en Asia o en América Latina que han sido motivados por supuestas campañas de liberación social, pero que han sido cocinadas desde una oficina en Norteamérica.

Internet es un mundo, una gran herramienta, pero también una poderosa arma, en 2009 Anonymous se partió desde adentro, y hoy, 11 años después, la vertiente más peligrosa de ellos, (y no escribo de LuzlSec), se ha reactivado, y no es solo @Youranoncentral en Twitter®, sino una comunidad enorme en el mundo, la Sociedad Digital, mujeres y hombres, que diariamente llevan gran parte de su vida a estos escenarios, y ahora con la pandemia han hecho crecer en enorme medida el tiempo que pasan en la red. Antes para que un hecho trascendiera, tenía que estar presente en los medios tradicionales, hoy bastan unos segundos de Live en Streaming, de frente, o anónimo, usted decide.

Quédate en Casa.

La libertad nunca es dada voluntariamente por el opresor; debe ser demandada por el oprimidoMartin Luther King, Jr


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La Revolución es el reflejo más puro de los deseos de libertad de las sociedades. Pero muy distinto a lo que la historia nos puede contar, existen revoluciones sutiles, silenciosas, que nacen y crecen a la sombra del secreto, de los pocos espacios realmente libres, de la masividad, del anonimato, es ahí, donde en 2003, Anonymous, el movimiento “hacktivista” y no la caricatura usando máscaras de plástico, realmente nació, ha estado presente y llegó para quedarse.

En la informática como en los videojuegos existe el término “niño rata” que es una forma burlesca de llamar a aquellos personajes que encuentran dentro de la valentía de su total ignorancia, las actitudes para abordar un tema que desconocen totalmente, así hace apenas unos días en Twitter® un grupo de jóvenes hacían burla del último video del colectivo Anonymous donde de nueva cuenta un actor hacía declaraciones alucinantes detrás de una máscara inspirada en el cómic “V de Vendetta” del extraordinario Alan Moore, y generaban memes argumentando que este grupo había copiado la imagen de la seria española “La Casa de Papel” en la que usan una máscara de Salvador Dalí estilizada.

En realidad, amigo lector, para poder abordar el tema de Anonymous harían falta varias columnas al hilo, pero trataré de resumir, en la medida de mis posibilidades, este interesante fenómeno que se comenzó a generar en el año 2003 como una broma en los tristemente famosos foros del sitio 4chan. De ahí, varios grupos de personas que se presentaban a sí mismos como colectivos hacker, comenzaron a participar y a planear acciones de activismo digital en contra de lo que denominaron el “sistema” o “El Nuevo Orden Mundial”, de ellos pasarían a la posteridad personajes tan famosos como Julián Assange, periodista y programador australiano, fundador del sitio “WikiLeaks” ó Edward Snowden, exconsultor disidente del gobierno de los EEUU quién a través de los años “filtró” mucha información confidencial por Internet. Estos fueron solo la punta de lanza de muchos otros, militantes, simpatizantes, o simplemente curiosos del fenómeno de Anonymous.

Y ello es porque, el término Anonymous no se refiere a un solo grupo de personas, sino a una verdadera cultura de activismo social y político, en donde programadores, matemáticos, ingenieros, políticos e incluso hackers de sombrero negro (bandidos) han encontrado una coyuntura para participar y hacer suyas las causas que consideran dañinas a la sociedad. De ahí que hayan creado el término “hacktivismo” como una fusión entre “hacker” y “activismo”.

Pero debemos tener cuidado, no todo “hacktivismo” es totalmente bueno, o totalmente malo, todo depende como en la vida, a través del cristal que se mire, no debe ser entendido desde un prisma reduccionista como equivalente siempre al desarrollo de actividades subversivas. Existen tendencias y ramificaciones del “hacktivismo” en la liberación de conocimiento (Wikipedia por ejemplo), OpenPhoto y tantos sitios que han surgido en los últimos meses, para ofrecer educación online libre, o en la liberación de información clasificada que se considera debe estar, por definición, a disposición de la sociedad (casos de WikiLeaks o las filtraciones de Snowden sobre las actividades militares y casos de espionaje gubernamentales).

Por añadidura las actividades hacker deben estar enfocadas en la defensa de las libertades y en la búsqueda del conocimiento y educación universal, de carácter libre y gratuito, pero pongamos atención, no siempre al alcance de todos, para acceder a ellas al menos debe contarse con acceso a internet desde algún dispositivo, cosa que en México afortunadamente ya damos como un hecho común, sin embargo, esta no es la misma realidad para muchas personas en otros países, que no pueden siempre costearse ese lujo.

También es importante señalar, que muchas operaciones políticas y sociales malintencionadas se han disfrazado de “hacktivismo”, como la curiosa filtración de correos electrónicos de candidatos en EEUU justo en periodo electoral, (porque no antes). Así como, los movimientos de protesta en diversos países de la comunidad árabe, en Asia o en América Latina que han sido motivados por supuestas campañas de liberación social, pero que han sido cocinadas desde una oficina en Norteamérica.

Internet es un mundo, una gran herramienta, pero también una poderosa arma, en 2009 Anonymous se partió desde adentro, y hoy, 11 años después, la vertiente más peligrosa de ellos, (y no escribo de LuzlSec), se ha reactivado, y no es solo @Youranoncentral en Twitter®, sino una comunidad enorme en el mundo, la Sociedad Digital, mujeres y hombres, que diariamente llevan gran parte de su vida a estos escenarios, y ahora con la pandemia han hecho crecer en enorme medida el tiempo que pasan en la red. Antes para que un hecho trascendiera, tenía que estar presente en los medios tradicionales, hoy bastan unos segundos de Live en Streaming, de frente, o anónimo, usted decide.

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La libertad nunca es dada voluntariamente por el opresor; debe ser demandada por el oprimidoMartin Luther King, Jr


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