/ sábado 24 de abril de 2021

Hablemos de tecnología | Dictadura digital

Nadie tiene el derecho de ser el dueño de los datos de otra persona, en los tiempos en los en que la información es valor y es poder, resulta que los gobiernos ahora están sumamente interesados en protegernos, y para ello necesitan todos nuestros datos, el control y la manipulación tienen entre sí una frontera muy delgada, casi tan delicada como la de los gobiernos asistencialistas y las dictaduras.

El pasado 17 de abril entró en vigor un decreto de carácter federal para la creación del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, que faculta y obliga a las compañías de Telefonía que prestan servicios en México a colectar de todos sus usuarios -nuevos y activos- información personal completa, que incluye además de lo usual, como nombre, CURP y dirección, datos de carácter biométrico tales como las huellas digitales y los patrones del iris de los usuarios.

Y así comienza la era del control total, le explico amigo lector, “De acuerdo con la nueva legislación aprobada por el Congreso de la Unión, primero en diciembre de 2020 por los diputados y luego en abril del 2021 por los senadores, cada línea nueva en su activación o ya en uso deberá facilitar el número telefónico, la fecha y hora de activación; el nombre completo del usuario o razón social, en caso de ser persona moral”. Y en esta dinámica no quedaría nadie fuera, ni los usuarios de planes telefónicos ni tampoco siquiera los chips que se compran en la calle, cualquier línea para su activación deberá ser registrada.

Estas políticas se suman a las ya existentes y a las recientemente exigidas, como la de geo localizar cada transacción digital que se haga, como transferencias a través de los teléfonos con una exactitud GPS de 3 metros, fecha, hora y lógicamente biometría del usuario que realiza la transacción.

Pero, ¿Por qué tanta seguridad? ¿Por qué ahora?, bueno, problemas añejos como el robo de identidad, la extorsión y el fraude telefónico o males peores como el secuestro, han puesto en foco rojo, no hoy, sino desde hace años, la imperante necesidad de que exista un Padrón de esta naturaleza, lo lamentable; que estas medidas lleguen de la mano de un gobierno que poco o nada ha hecho en materia de seguridad digital en todo lo que va de su sexenio, de hecho; reflexionando, en general en materia digital es muy poco lo que se ha avanzado.

Son muchas las dudas, e incluso las ambigüedades que pueden surgir de este tema, citando de manera textual, nos dice: “El registro del número de una línea telefónica móvil en el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil será obligatorio para el usuario, que deberá proporcionar identificación oficial, comprobante de domicilio y datos biométricos para la activación del servicio de la línea telefónica móvil, en términos de lo establecido en la presente ley y en las disposiciones administrativas de carácter general que al efecto emita el Instituto Federal de Telecomunicaciones”, dice el decreto, tras una reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR).

Sin embargo, me pregunto ¿Qué tan difícil puede ser, para una persona como usted o como yo conseguir estos datos de un tercero en cuestión? Es decir, de ninguna manera estoy en desacuerdo con la creación de dicho instrumento, lo que me llama poderosamente la atención es ¿Quiénes? y ¿Cómo lo manejen?, la metodología para la validación de los datos, pues al ser más de 124 millones de usuarios de teléfonos móviles en México, hacerlo de una manera concreta y correcta me parece una labor titánica, no para éste, sino para cualquier gobierno, quizá de ahí la inquietud de hacerlo a través de las empresas establecidas de telefonía.

Ahora, por otra parte, siempre he sostenido que “El diablo está en los detalles”, que le impediría a un sistema de gobierno el poder utilizar toda esta información como un “Capital Político”, como un instrumento más de control, de promoción y de mensaje focalizado e hiper segmentado, podrían por ejemplo usando BigData® y el poder de las bases de datos referenciales obtener listas de teléfonos celulares de por ejemplo “Mujeres, Profesionistas, Jefas de Familia, que viven en Estado de México” con solo unos cruces, y a diferencia de lo que ofrecen otras herramientas como Facebook® (caso Cambridge Analytica) estas estarían totalmente verificadas.

Como usuarios debemos de estar atentos antes las disposiciones de esta naturaleza y otras que exijan el recopilado de Data de las personas, recientemente circuló en redes un supuesto texto de amparo que los usuarios podrían utilizar para defenderse de tales disposiciones, la realidad es que si bien, la Ley no es retroactiva, si existen no una, sino muchas cuestiones implícitas en la aplicación de este tipo de medidas.

La libertad es un derecho y un tesoro, la seguridad también, el problema se suscita cuando queremos tapar un hoyo, haciendo otro dentro. En fin, la hipocresía.

Facebook: www.facebook.com/soylalodelatorre

Twitter: @lalodelatorreg

Correo: tecnologia@lalodelatorre.com

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La Libertad está en ser dueños de la propia vidaPlatón

Nadie tiene el derecho de ser el dueño de los datos de otra persona, en los tiempos en los en que la información es valor y es poder, resulta que los gobiernos ahora están sumamente interesados en protegernos, y para ello necesitan todos nuestros datos, el control y la manipulación tienen entre sí una frontera muy delgada, casi tan delicada como la de los gobiernos asistencialistas y las dictaduras.

El pasado 17 de abril entró en vigor un decreto de carácter federal para la creación del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil, que faculta y obliga a las compañías de Telefonía que prestan servicios en México a colectar de todos sus usuarios -nuevos y activos- información personal completa, que incluye además de lo usual, como nombre, CURP y dirección, datos de carácter biométrico tales como las huellas digitales y los patrones del iris de los usuarios.

Y así comienza la era del control total, le explico amigo lector, “De acuerdo con la nueva legislación aprobada por el Congreso de la Unión, primero en diciembre de 2020 por los diputados y luego en abril del 2021 por los senadores, cada línea nueva en su activación o ya en uso deberá facilitar el número telefónico, la fecha y hora de activación; el nombre completo del usuario o razón social, en caso de ser persona moral”. Y en esta dinámica no quedaría nadie fuera, ni los usuarios de planes telefónicos ni tampoco siquiera los chips que se compran en la calle, cualquier línea para su activación deberá ser registrada.

Estas políticas se suman a las ya existentes y a las recientemente exigidas, como la de geo localizar cada transacción digital que se haga, como transferencias a través de los teléfonos con una exactitud GPS de 3 metros, fecha, hora y lógicamente biometría del usuario que realiza la transacción.

Pero, ¿Por qué tanta seguridad? ¿Por qué ahora?, bueno, problemas añejos como el robo de identidad, la extorsión y el fraude telefónico o males peores como el secuestro, han puesto en foco rojo, no hoy, sino desde hace años, la imperante necesidad de que exista un Padrón de esta naturaleza, lo lamentable; que estas medidas lleguen de la mano de un gobierno que poco o nada ha hecho en materia de seguridad digital en todo lo que va de su sexenio, de hecho; reflexionando, en general en materia digital es muy poco lo que se ha avanzado.

Son muchas las dudas, e incluso las ambigüedades que pueden surgir de este tema, citando de manera textual, nos dice: “El registro del número de una línea telefónica móvil en el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil será obligatorio para el usuario, que deberá proporcionar identificación oficial, comprobante de domicilio y datos biométricos para la activación del servicio de la línea telefónica móvil, en términos de lo establecido en la presente ley y en las disposiciones administrativas de carácter general que al efecto emita el Instituto Federal de Telecomunicaciones”, dice el decreto, tras una reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR).

Sin embargo, me pregunto ¿Qué tan difícil puede ser, para una persona como usted o como yo conseguir estos datos de un tercero en cuestión? Es decir, de ninguna manera estoy en desacuerdo con la creación de dicho instrumento, lo que me llama poderosamente la atención es ¿Quiénes? y ¿Cómo lo manejen?, la metodología para la validación de los datos, pues al ser más de 124 millones de usuarios de teléfonos móviles en México, hacerlo de una manera concreta y correcta me parece una labor titánica, no para éste, sino para cualquier gobierno, quizá de ahí la inquietud de hacerlo a través de las empresas establecidas de telefonía.

Ahora, por otra parte, siempre he sostenido que “El diablo está en los detalles”, que le impediría a un sistema de gobierno el poder utilizar toda esta información como un “Capital Político”, como un instrumento más de control, de promoción y de mensaje focalizado e hiper segmentado, podrían por ejemplo usando BigData® y el poder de las bases de datos referenciales obtener listas de teléfonos celulares de por ejemplo “Mujeres, Profesionistas, Jefas de Familia, que viven en Estado de México” con solo unos cruces, y a diferencia de lo que ofrecen otras herramientas como Facebook® (caso Cambridge Analytica) estas estarían totalmente verificadas.

Como usuarios debemos de estar atentos antes las disposiciones de esta naturaleza y otras que exijan el recopilado de Data de las personas, recientemente circuló en redes un supuesto texto de amparo que los usuarios podrían utilizar para defenderse de tales disposiciones, la realidad es que si bien, la Ley no es retroactiva, si existen no una, sino muchas cuestiones implícitas en la aplicación de este tipo de medidas.

La libertad es un derecho y un tesoro, la seguridad también, el problema se suscita cuando queremos tapar un hoyo, haciendo otro dentro. En fin, la hipocresía.

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La Libertad está en ser dueños de la propia vidaPlatón