/ sábado 15 de febrero de 2020

Hablemos Legal | ¿Una revolución de leyes?

“Creo que este país tiene éxito cuando todos tienen una oportunidad justa, cuando todos hacen su parte justa, cuando todos juegan con las mismas reglas.” Barack Obama

Nuestro entorno se está llenando de cambios radicales que surgen de los hechos diarios en nuestra sociedad, positivos o negativos; ello ha estado obligando a que se use la voz por numerosos grupos que buscan se legisle a favor de lo que ellos consideran necesario y que los encargados de crear las normas, que regulan nuestra vida en todo lo que realizamos como sujetos de derechos y obligaciones, lo dejen plasmado en una ley.

Recientemente hay una ola de cambios en las leyes, con nuevas instituciones, reformas, etc., lo que es algo muy común en nuevos procesos de liderazgo, más ello no debe implicar que los sujetos gobernados queden doblegados ante lo que pudiera directamente verse como violatorio a los derechos que cada persona tiene. Los cambios en la ley implican una gran responsabilidad y análisis de quien tienen en su poder la decisión para crearlas, modificarlas o abrogarlas, a ellos se les debe exigir la realización adecuada de lo que la sociedad requiere, ya que la sociedad a ellos los puso en ese lugar.

Sabemos que el Derecho tiene varias fuentes, la doctrina, principios generales del derecho, tratados internacionales, la jurisprudencia y la costumbre; y en esta última, yace la gran necesidad de la sociedad para la creación de nuevos ordenamientos que regulen las conductas no establecidas en una norma y puedan entonces estar sujetas a una sanción o no de quienes las realicen, obviamente, hablamos de los hechos generados ante la llegada de tecnologías y nuevas costumbres, hechos donde se vulneran con nuevos actos a los derechos de muchas mujeres que día a día tienen una incansable lucha para que les sean reconocidos más derechos y una equidad real en las áreas laborales, familiares y de cualquier índole donde estén presentes.

El análisis correcto acompañado de un presupuesto adecuado dará como resultado el objetivo que pide nuestra sociedad, siempre que sea en el momento correcto para ello, ya que sabemos que las consecuencias de hacer o no, pueden crear impactos sociales muy grandes de beneficios o perjuicios; como ciudadanos es nuestro deber estar al tanto de estos trabajos que nuestros legisladores realizan. Hay temas importantes que deben dar origen a nuevas disposiciones legales.

La sociedad civil debe estar comprometida en cada rubro de sus funciones o actividades a proponer lo que desde su perspectiva está observando como necesidad y con ello dar a conocer estas para que cumplamos con el deber de exigir a nuestros representantes lleven a cabo su función de creación de leyes que dé un orden a esos nuevos hechos u actos surgidos en nuestra realidad social, todo con las formalidades marcadas ya previamente y con el seguimiento adecuado para que fundados en Derecho no exista excusa de quienes llevamos al cargo público que nos representan.

Hay un sinfín de temas, pero esta ocasión elegiré el feminicidio; no negaremos lo que diariamente vemos publicado en los medios de comunicación masivos, ahí está la verdad de lo que sucede, por ello sería interesante contar con una fiscalía especializada que se encargue de este tema, que es de gran relevancia para todos y en especial para las mujeres; una fiscalía especializada podría venir a subsanar todos aquellos puntos negativos que no han dado los resultados a la exigencia de justicia; sin duda alguna la especialización es una herramienta que mejora infinitamente los resultados buscados, pero debe estar acompañada de un factor relevante como lo es la cultura de prevención, no busquemos sólo solucionar los hechos delictivos contra las mujeres, vayamos mas allá, ¡con la visión de prevenirlos!

“Creo que este país tiene éxito cuando todos tienen una oportunidad justa, cuando todos hacen su parte justa, cuando todos juegan con las mismas reglas.” Barack Obama

Nuestro entorno se está llenando de cambios radicales que surgen de los hechos diarios en nuestra sociedad, positivos o negativos; ello ha estado obligando a que se use la voz por numerosos grupos que buscan se legisle a favor de lo que ellos consideran necesario y que los encargados de crear las normas, que regulan nuestra vida en todo lo que realizamos como sujetos de derechos y obligaciones, lo dejen plasmado en una ley.

Recientemente hay una ola de cambios en las leyes, con nuevas instituciones, reformas, etc., lo que es algo muy común en nuevos procesos de liderazgo, más ello no debe implicar que los sujetos gobernados queden doblegados ante lo que pudiera directamente verse como violatorio a los derechos que cada persona tiene. Los cambios en la ley implican una gran responsabilidad y análisis de quien tienen en su poder la decisión para crearlas, modificarlas o abrogarlas, a ellos se les debe exigir la realización adecuada de lo que la sociedad requiere, ya que la sociedad a ellos los puso en ese lugar.

Sabemos que el Derecho tiene varias fuentes, la doctrina, principios generales del derecho, tratados internacionales, la jurisprudencia y la costumbre; y en esta última, yace la gran necesidad de la sociedad para la creación de nuevos ordenamientos que regulen las conductas no establecidas en una norma y puedan entonces estar sujetas a una sanción o no de quienes las realicen, obviamente, hablamos de los hechos generados ante la llegada de tecnologías y nuevas costumbres, hechos donde se vulneran con nuevos actos a los derechos de muchas mujeres que día a día tienen una incansable lucha para que les sean reconocidos más derechos y una equidad real en las áreas laborales, familiares y de cualquier índole donde estén presentes.

El análisis correcto acompañado de un presupuesto adecuado dará como resultado el objetivo que pide nuestra sociedad, siempre que sea en el momento correcto para ello, ya que sabemos que las consecuencias de hacer o no, pueden crear impactos sociales muy grandes de beneficios o perjuicios; como ciudadanos es nuestro deber estar al tanto de estos trabajos que nuestros legisladores realizan. Hay temas importantes que deben dar origen a nuevas disposiciones legales.

La sociedad civil debe estar comprometida en cada rubro de sus funciones o actividades a proponer lo que desde su perspectiva está observando como necesidad y con ello dar a conocer estas para que cumplamos con el deber de exigir a nuestros representantes lleven a cabo su función de creación de leyes que dé un orden a esos nuevos hechos u actos surgidos en nuestra realidad social, todo con las formalidades marcadas ya previamente y con el seguimiento adecuado para que fundados en Derecho no exista excusa de quienes llevamos al cargo público que nos representan.

Hay un sinfín de temas, pero esta ocasión elegiré el feminicidio; no negaremos lo que diariamente vemos publicado en los medios de comunicación masivos, ahí está la verdad de lo que sucede, por ello sería interesante contar con una fiscalía especializada que se encargue de este tema, que es de gran relevancia para todos y en especial para las mujeres; una fiscalía especializada podría venir a subsanar todos aquellos puntos negativos que no han dado los resultados a la exigencia de justicia; sin duda alguna la especialización es una herramienta que mejora infinitamente los resultados buscados, pero debe estar acompañada de un factor relevante como lo es la cultura de prevención, no busquemos sólo solucionar los hechos delictivos contra las mujeres, vayamos mas allá, ¡con la visión de prevenirlos!