Con los gobiernos puestos a prueba ante las crisis desencadenantes que azotan nuestra salud, nuestros bolsillos, nuestra seguridad y hasta nuestro equilibrio ecológico, es prácticamente imposible hacer pronósticos electorales o saber quiénes tienen qué respuestas a estas crisis, para ser votados en las próximas elecciones.
Es un hecho que todos los gobiernos en sus distintas representaciones han fallado en alguna medida con esta pandemia que ha puesto a prueba su capacidad de respuesta para contener a los miles de muertos por un bicho mortal extraordinariamente contagioso, obligar la clausura de las economías de todos los tamaños, enfrentar a los grupos delincuenciales de todos los colores y de pasadita cuidar lo que queda del medio ambiente.
No hay fórmulas exactas, ni plantillas hechas para atacar esta serie de problemas, incluso sin que se tropiecen las diferentes crisis o como ha ocurrido, una lleve a la otra y agrave a la siguiente.
Nuestros políticos han fallado. Desde el gobierno federal con el mismo discurso de la dichosa curva que se aplana, al gobierno estatal con medidas adicionales y extraordinarias que no todos comparten y muchos de los municipios que tampoco han encontrado la manera de ayudar, al menos a la gente que más lo necesita.
Por ello es debatible que el Movimiento de Regeneración Nacional salga en primer lugar en muchas de las encuestas nacionales para las elecciones del próximo año; por ello resalta la falta de operación política en Acción Nacional no sólo en Tamaulipas, sino en todo el país; por ello se envalentona el Revolucionario Institucional, como si no viera lo que ocurre con el caso Lozoya que pasó de acusado a acusador y ni qué decir de la ausencia de la “chiquillada” como llamaba Diego Fernández de Cevallos a los partidos “chicos”. Los partidos y sus dirigentes simplemente están extraviados, pues a la ausencia de liderazgos contundentes, una crisis que ya sufríamos antes de la pandemia, a la falta de contrapesos para el poder casi absoluto que se cierne sobre Palacio Nacional, se suma la incredulidad y la desconfianza que, de suyo, todos los partidos políticos se han ganado a pulso por parte de la ciudadanía que ya no cree ni en los milagros.
Los políticos deberían estar buscando las soluciones prácticas a las crisis que nos azotan en diferentes frentes, en lugar de estar cuidándose las espaldas, deberían adaptar políticas exitosas en otras naciones, en lugar de ponerse a construir proyectos obsoletos y faraónicos, debieran hacer odiosas pero necesarias comparaciones con otros gobiernos que ya han superado estas crisis en vez de pelearse con personajes del pasado, más aún cuando lo que se necesita son estadistas que vean al futuro con ideas frescas, con innovación tecnológica, con el “chip” de una nueva política fresca, que solucione conflictos, no que se peleen en un -todos contra todos-, aunque para ello deban valerse de nuestro decadente sistema de partidos políticos.
Al final de esta historia alguien ganará las elecciones con el respaldo popular, ojalá que no sea el que se vea mejor y hable más bonito, o el que pelee mejor, sino quien proponga y ofrezca soluciones viables basadas en ejemplos de éxito a fin de salir adelante de esta grave situación.
CHUCHO TRANSFORMA IMAGEN URBANA DE TAMPICO
El presidente municipal de Tampico, Jesús Nader Nasrallah no ha quitado el dedo del renglón y se ha empeñado en transformar la imagen urbana de la ciudad, contra antiquísimos rezagos, viejos vicios y temas a los que ninguna otra administración municipal les entró. Chucho tiene bien fijo el rumbo de una administración que transforme a Tampico en un polo de atracción turística y en una ciudad de la que los tampiqueños puedan estar orgullosos y para muestra basta ver el cambio que han tenido las “bajadas” de las calles que conducen a los mercados, tradicionalmente invadidas de puestos viejos y de muy mala imagen, que hoy están convertidas en hermosos espacios arquitectónicos y artísticos, otro ejemplo es el Parque Fray Andrés de Olmos, que también ha pasado por un proceso de embellecimiento con nuevos andadores, palapas, puentes peatonales, asadores y bancas, para que, una vez que se supere esta contingencia, vuelva a ser muy visitado por propios y extraños. Ni qué decir de los espacios deportivos que también están recibiendo una gran inversión por parte no sólo del municipio, sino también del gobierno estatal, gracias a la buena relación entre el alcalde y el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, que no ha soltado a Tampico. Ya están próximos a iniciar los trabajos de reconfiguración de la Laguna del Carpintero, lo que traerá además de una gran cantidad de empleos, la posibilidad de atraer más turismo y derrama económica en beneficio de todos, más buenas noticias de Chucho para los tampiqueños.
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Antonio Machado
Poeta español
Lo esencial carnavalesco no es ponerse la careta, sino quitarse la cara”
