/ miércoles 13 de febrero de 2019

La admiración no interroga nunca, con admirar comprende

La admiración no interroga nunca, con admirar comprende

Aquel remate con la cabeza solo lo pudo hacer Pelé. Pero solo Gordon Banks para detenerlo.

Gran juego ofrecido por el Porto en Roma, Italia, cuando buscando avanzar en la Champions League tuvo que enfrentar a la Loba, que jamás le había ganado un solo partido en esta categoría. Pero nada dura para siempre, igual que siempre hay una primera vez, y este día sirvió para que eso ocurriera. Si viste el juego, habrás notado que aquello fue un encuentro muy nivelado, en donde no era visible alguna diferencia en favor de uno u otro equipo. Sin embargo, el Porto adolecía de la ausencia de jugadores tan importantes como Vincent Abubakar, titular en el centro del ataque y el segundo centro de ataque, Moussa Marega, que con Jesús Manuel Corona “Tecatito” y Yacine Brahimi conforman el ataque del Porto, el mejor de Portugal, y que en esta ocasión no existió, ya que Abubakar se recupera de una lesión que no le ha permitido jugar en lo que va del año, agreguemos la ausencia de Marega por lesión y la del Tecatito, que cumple un castigo, si a eso le agregamos que en el juego de hoy Yacine Nrahimi tuvo que abandonar víctima de un esguince.

Así y todo, Héctor Herrera organizando y Danilo Pereyra destruyendo, conformaron una complicidad en la que ambos cumplieron su tarea, aportando además al menos 70% en auxilio de su compañero, ya que sabemos bien que Herrera en el Mundial fue contención, mientras que Danilo, destructor incansable y efectivo, tiene igual la facultad de la organización. Así, las debilidades del Porto no eran visibles, y cuando la Roma con su equipo completo se fue al ataque, la figura de Casillas, que siempre aparece en situaciones como esta, se hizo presente parando todo lo que era parable, hasta que en el minuto 70 apareció el joven de 19 años Nicolo Zaniolo, quien tomó un rechace para disparar raso y cruzado, para que el balón se fuera entre un mar de piernas para entrar pegado al poste.

Hasta ese momento, la moneda se encontraba en el aire sin que pudiera inclinar uno hacia algún lado, pero sí que pesó la ausencia de los tres delanteros lusos (para entonces ya no estaba ni Brahimi), así las cosas, un fuerte disparo de Zeco se fue a estrellar contra el poste, para salir directo a la ubicación de Zaniolo, quien repitió la suerte enviando el balón al fondo de las redes para ampliar el marcador. Más o menos por ese tiempo, había entrado Adrián López en sustitución de Brahimi que no podía ni caminar, y López fue tan afortunado, que un fuerte disparo de Danilo contactó con un defensor, saliendo un globo que se introdujo al área, para que López, golpeando el balón a la segura, con toda la parte interior del pie, rematara de forma contundente dejando al portero como estatua. Después el árbitro concedió cinco minutos, en los que Héctor Herrera, echándose el equipo al hombro, realizó una gran jugada culminada desde afuera del área con un verdadero bombazo que apenas salvó el poste en lo que pensamos sería el gol del empate. Y ya no hubo más, ahora a esperar el juego de ida, con el beneficio para el Porto del gol anotado como visitante.

Cuando los que tenemos ya bastante tiempo disfrutando del futbol, decimos que Pelé es inigualable, es porque lo vimos hacer lo que en ningún otro hemos visto, imaginen ustedes en dónde pondremos a Gordon Banks, que detuvo en forma nada ortodoxa el remate con la cabeza que no le hemos visto a ningún otro jugador, haciéndolo estirarse cuan largo era, para justo en la raya de meta golpear el balón con el puño desde quince centímetros del suelo, para que en línea recta vertical rebasara el travesaño para posarse en la parte superior de las redes. Si ustedes ven las repeticiones de esta jugada, se darán cuenta de que todo el público que se encontraba atrás de la portería de Banks saltaron jubilosos festejando el gol, que más adelante, aun con las pruebas materiales, se negaban a creer lo que había ocurrido.

Gordon Banks jugaba en Guadalajara su segundo Campeonato Mundial, pues ya lo había hecho en Inglaterra 66, en donde se coronó al lado de Keith Newton, Bobby Moore, Jaky Charlton, Tommy Wraigth, Nobby Stiles, Alan Ball, Bobby Charlton, Francis Lee, Geoffrey Hurst y Martin Peters. Equipo con el que Gordon Banks se coronó campeón mundial, siendo considerado el mejor portero del torneo. Tiempo después, Gordon perdió uno de sus ojos en un accidente automovilístico. En esa ocasión, Inglaterra perdió uno a cero en el mejor juego, técnica y tácticamente hablando, que mis ojos hayan visto y ninguno de los dos merecía perder, pero Brasil contaba con Pelé. Brasil jugó con: Félix, Carlos Alberto, Brito, Wilson Piazza, Everaldo, Clodoaldo, Gerson, Tostao, Rivelino, Jairzinho, Pelé... Hoy, Gordon Banks, extraordinario portero, ejecutante de la llamada “Parada del Siglo”, dejó de existir a los 81 años de edad. Con este Mundial aparecieron las tarjetas de los árbitros, con la color ámbar, ya en desuso. Igual, este fue el campeonato en el que se presentó un balón hecho de material sintético, a eso se debió el asombro del público, cuando Pelé sorprendió a Ivo Viktor, portero de Checoslovaquia, con un tiro desde el círculo de medio campo que no fue gol, algo que nadie antes intentó con el balón de cuero.

Hasta pronto amigo.

La admiración no interroga nunca, con admirar comprende

Aquel remate con la cabeza solo lo pudo hacer Pelé. Pero solo Gordon Banks para detenerlo.

Gran juego ofrecido por el Porto en Roma, Italia, cuando buscando avanzar en la Champions League tuvo que enfrentar a la Loba, que jamás le había ganado un solo partido en esta categoría. Pero nada dura para siempre, igual que siempre hay una primera vez, y este día sirvió para que eso ocurriera. Si viste el juego, habrás notado que aquello fue un encuentro muy nivelado, en donde no era visible alguna diferencia en favor de uno u otro equipo. Sin embargo, el Porto adolecía de la ausencia de jugadores tan importantes como Vincent Abubakar, titular en el centro del ataque y el segundo centro de ataque, Moussa Marega, que con Jesús Manuel Corona “Tecatito” y Yacine Brahimi conforman el ataque del Porto, el mejor de Portugal, y que en esta ocasión no existió, ya que Abubakar se recupera de una lesión que no le ha permitido jugar en lo que va del año, agreguemos la ausencia de Marega por lesión y la del Tecatito, que cumple un castigo, si a eso le agregamos que en el juego de hoy Yacine Nrahimi tuvo que abandonar víctima de un esguince.

Así y todo, Héctor Herrera organizando y Danilo Pereyra destruyendo, conformaron una complicidad en la que ambos cumplieron su tarea, aportando además al menos 70% en auxilio de su compañero, ya que sabemos bien que Herrera en el Mundial fue contención, mientras que Danilo, destructor incansable y efectivo, tiene igual la facultad de la organización. Así, las debilidades del Porto no eran visibles, y cuando la Roma con su equipo completo se fue al ataque, la figura de Casillas, que siempre aparece en situaciones como esta, se hizo presente parando todo lo que era parable, hasta que en el minuto 70 apareció el joven de 19 años Nicolo Zaniolo, quien tomó un rechace para disparar raso y cruzado, para que el balón se fuera entre un mar de piernas para entrar pegado al poste.

Hasta ese momento, la moneda se encontraba en el aire sin que pudiera inclinar uno hacia algún lado, pero sí que pesó la ausencia de los tres delanteros lusos (para entonces ya no estaba ni Brahimi), así las cosas, un fuerte disparo de Zeco se fue a estrellar contra el poste, para salir directo a la ubicación de Zaniolo, quien repitió la suerte enviando el balón al fondo de las redes para ampliar el marcador. Más o menos por ese tiempo, había entrado Adrián López en sustitución de Brahimi que no podía ni caminar, y López fue tan afortunado, que un fuerte disparo de Danilo contactó con un defensor, saliendo un globo que se introdujo al área, para que López, golpeando el balón a la segura, con toda la parte interior del pie, rematara de forma contundente dejando al portero como estatua. Después el árbitro concedió cinco minutos, en los que Héctor Herrera, echándose el equipo al hombro, realizó una gran jugada culminada desde afuera del área con un verdadero bombazo que apenas salvó el poste en lo que pensamos sería el gol del empate. Y ya no hubo más, ahora a esperar el juego de ida, con el beneficio para el Porto del gol anotado como visitante.

Cuando los que tenemos ya bastante tiempo disfrutando del futbol, decimos que Pelé es inigualable, es porque lo vimos hacer lo que en ningún otro hemos visto, imaginen ustedes en dónde pondremos a Gordon Banks, que detuvo en forma nada ortodoxa el remate con la cabeza que no le hemos visto a ningún otro jugador, haciéndolo estirarse cuan largo era, para justo en la raya de meta golpear el balón con el puño desde quince centímetros del suelo, para que en línea recta vertical rebasara el travesaño para posarse en la parte superior de las redes. Si ustedes ven las repeticiones de esta jugada, se darán cuenta de que todo el público que se encontraba atrás de la portería de Banks saltaron jubilosos festejando el gol, que más adelante, aun con las pruebas materiales, se negaban a creer lo que había ocurrido.

Gordon Banks jugaba en Guadalajara su segundo Campeonato Mundial, pues ya lo había hecho en Inglaterra 66, en donde se coronó al lado de Keith Newton, Bobby Moore, Jaky Charlton, Tommy Wraigth, Nobby Stiles, Alan Ball, Bobby Charlton, Francis Lee, Geoffrey Hurst y Martin Peters. Equipo con el que Gordon Banks se coronó campeón mundial, siendo considerado el mejor portero del torneo. Tiempo después, Gordon perdió uno de sus ojos en un accidente automovilístico. En esa ocasión, Inglaterra perdió uno a cero en el mejor juego, técnica y tácticamente hablando, que mis ojos hayan visto y ninguno de los dos merecía perder, pero Brasil contaba con Pelé. Brasil jugó con: Félix, Carlos Alberto, Brito, Wilson Piazza, Everaldo, Clodoaldo, Gerson, Tostao, Rivelino, Jairzinho, Pelé... Hoy, Gordon Banks, extraordinario portero, ejecutante de la llamada “Parada del Siglo”, dejó de existir a los 81 años de edad. Con este Mundial aparecieron las tarjetas de los árbitros, con la color ámbar, ya en desuso. Igual, este fue el campeonato en el que se presentó un balón hecho de material sintético, a eso se debió el asombro del público, cuando Pelé sorprendió a Ivo Viktor, portero de Checoslovaquia, con un tiro desde el círculo de medio campo que no fue gol, algo que nadie antes intentó con el balón de cuero.

Hasta pronto amigo.