/ martes 7 de mayo de 2019

La alegría está en el esfuerzo y en la lucha, no en la victoria misma

Cuando en la primera jornada, Tigres empató a dos con el León en León, aquello no sorprendió a nadie, pues la fiera nos tenía acostumbrados a la irregularidad de su juego, más identificado con la medianía que con la aristocrácia y, cuando en la segunda jornada, el otro equipo regiomontano, los Rayados repitieron el marcador a dos, fue como la confirmación de lo que habíamos pensado, pero el colmo se presentó en el tercer juego, cuando el humilde Xolos de Tijuana se presentó en el Estadio León, para vencer a la fiera un gol a cero. ¿Quien en ese momento iba a suponer lo que ocurriría con el León?

Fue hasta la cuarta jornada que el León despertó, el Querétaro en su propio estadio “La Corregidora” sufrió la terrible reacción de la fiera, que molesto por haber sido despertado de un sueño de león, que es lo que más le entusiasma al rey de las bestias y cuatro zarpazos fueron suficientes para apagar el canto del gallo. En la quinta jornada fue la máquina la que no pitó, siendo desviada de su ruta 2 a 0 y, la victoria más ruidosa se presentó en la fecha 6, cuando en pleno estadio Azteca, igual que a Rosita Alvirez, al América, el León nomas tres tiros le dio. Tres ceros consecutivos dan al rugido del León un sonido espantoso que pone a temblar al mismísimo diablo, que igual que las águilas, cae de tres goles a cero.

Ahora el León se las verá con su primo menor, el León de Montaña, como es conocido el Puma, que cayó igual que los otros, sólo que dándole un zarpazo al rey, rompiendo la racha de cuatro partidos sin recibir gol. Pero este León no cree ni en águilas, ni en gallos, ni en pumas, ni en diablos, pero tampoco en las fuerzas celestiales y, repite la rosca del 3-0 ahora sobre Santos Laguna. Como dijera el filósofo de Güemez, si dos perros persiguen a una liebre, si el de alante no la alcanza, cuantimenos el de atrás, pos ahí tienen a los Lobos queriendo hacer lo que no pudieron ni tigres ni pumas, pero estos al menos ofrecieron mayor resistencia cayendo 0-1.

Fecha 11 y ahora son los tiburones los que pretenden asustar al rey, jiar, jiar, 2-0. La fecha 12 depara a la fiera un rival que no gana, pero suele dar dolores de cabeza, el Monarcas Morelia, que llega a tenerlos en la lona dos a cero, peeeero... El turno es de los rayos, que se carcterizan por darle toques a cualquiera y logran un decoroso 1-2. En la jornada 14, en el estadio Cuauhtémoc, los discípulos del Cheliz se llevan otro 3-0. El turno ahora es para uno de los cheques al portador del futbol mexicano, el Atlas, el otro es el Veracruz y los rojinegros se van con un 5-2... Y quién lo dijera, cuando se esperaba una suculenta birria para el León, la chiva pegó un reparo y, se acabó la racha de juegos ganados consecutivamente cuando sólo quedan los Tuzos, que en la fecha 17, se llevan un 2-1 ante un León condescendiente que seguramente no aparecerá en las finales. Más juegos ganados, más goles anotados, menos goles recibidos y 41 puntos logrados nos señalan quiénes son los favoritos, peeeeero, los juegos hay que jugarlos.

Indiscutiblemente, el Tigre es el mayor de todos los felinos, siendo el Tigre siberiano el mayor de todos, 100 kgs. Más que un León, pero la ferocidad de este último está por encima de la de todas las fieras, por eso se le conoce como el rey. Y este Tigre nuestro, el universitario, se encuentra en el estado más peligroso para enfrentarlo, pues ha sido herido por su enemigo más odiado y, no quiere ver quién se la hjizo, sino quien se la paga.

Tigre es el equipo que mejor domina su estilo de juego. Con una estrategia fría, basada en el control del juego, por medio de la posesión de la pelota, suele brindar funciones anodinas que a su director técnico le importa un bledo, jugando exclusivamente para su público, que le pide victorias aunque sean feas. Si checamos los números del León, encontramos a un equipo apabullante en todos los aspectos del juego cotidiano que para ellos se ha vuelto de rutina, pero para el León, su estilo aburrido pero perfectramente dominado por sus jugadores y, con el tigre mayor Andre Gignac que con cuatro meses sin gol, que es su alimento favorito, le ha dado no para la rutina cotidiana, sino para la acumulación de titulos, lo que los ha convertido en el equipo más exitoso de la década.

Pero independientemente del León, hoy como en ningún otro torneo, la competencia ha sido mayor, quedándose fuera equipos cuyos problemas son más de vestidor unos y de escritorio otros, que en el campo han mostrado hechuras para mucho más de lo que en este torneo exhibieron, Toluca, Puebla, Monarcas y Santos, estarán pensando ya en el próximo torneo, en el que seguramenteveremos una gran cantidad de movimientos que ya desde ahora, se está empezando a especular.

Hasta pronto amigo.

Cuando en la primera jornada, Tigres empató a dos con el León en León, aquello no sorprendió a nadie, pues la fiera nos tenía acostumbrados a la irregularidad de su juego, más identificado con la medianía que con la aristocrácia y, cuando en la segunda jornada, el otro equipo regiomontano, los Rayados repitieron el marcador a dos, fue como la confirmación de lo que habíamos pensado, pero el colmo se presentó en el tercer juego, cuando el humilde Xolos de Tijuana se presentó en el Estadio León, para vencer a la fiera un gol a cero. ¿Quien en ese momento iba a suponer lo que ocurriría con el León?

Fue hasta la cuarta jornada que el León despertó, el Querétaro en su propio estadio “La Corregidora” sufrió la terrible reacción de la fiera, que molesto por haber sido despertado de un sueño de león, que es lo que más le entusiasma al rey de las bestias y cuatro zarpazos fueron suficientes para apagar el canto del gallo. En la quinta jornada fue la máquina la que no pitó, siendo desviada de su ruta 2 a 0 y, la victoria más ruidosa se presentó en la fecha 6, cuando en pleno estadio Azteca, igual que a Rosita Alvirez, al América, el León nomas tres tiros le dio. Tres ceros consecutivos dan al rugido del León un sonido espantoso que pone a temblar al mismísimo diablo, que igual que las águilas, cae de tres goles a cero.

Ahora el León se las verá con su primo menor, el León de Montaña, como es conocido el Puma, que cayó igual que los otros, sólo que dándole un zarpazo al rey, rompiendo la racha de cuatro partidos sin recibir gol. Pero este León no cree ni en águilas, ni en gallos, ni en pumas, ni en diablos, pero tampoco en las fuerzas celestiales y, repite la rosca del 3-0 ahora sobre Santos Laguna. Como dijera el filósofo de Güemez, si dos perros persiguen a una liebre, si el de alante no la alcanza, cuantimenos el de atrás, pos ahí tienen a los Lobos queriendo hacer lo que no pudieron ni tigres ni pumas, pero estos al menos ofrecieron mayor resistencia cayendo 0-1.

Fecha 11 y ahora son los tiburones los que pretenden asustar al rey, jiar, jiar, 2-0. La fecha 12 depara a la fiera un rival que no gana, pero suele dar dolores de cabeza, el Monarcas Morelia, que llega a tenerlos en la lona dos a cero, peeeero... El turno es de los rayos, que se carcterizan por darle toques a cualquiera y logran un decoroso 1-2. En la jornada 14, en el estadio Cuauhtémoc, los discípulos del Cheliz se llevan otro 3-0. El turno ahora es para uno de los cheques al portador del futbol mexicano, el Atlas, el otro es el Veracruz y los rojinegros se van con un 5-2... Y quién lo dijera, cuando se esperaba una suculenta birria para el León, la chiva pegó un reparo y, se acabó la racha de juegos ganados consecutivamente cuando sólo quedan los Tuzos, que en la fecha 17, se llevan un 2-1 ante un León condescendiente que seguramente no aparecerá en las finales. Más juegos ganados, más goles anotados, menos goles recibidos y 41 puntos logrados nos señalan quiénes son los favoritos, peeeeero, los juegos hay que jugarlos.

Indiscutiblemente, el Tigre es el mayor de todos los felinos, siendo el Tigre siberiano el mayor de todos, 100 kgs. Más que un León, pero la ferocidad de este último está por encima de la de todas las fieras, por eso se le conoce como el rey. Y este Tigre nuestro, el universitario, se encuentra en el estado más peligroso para enfrentarlo, pues ha sido herido por su enemigo más odiado y, no quiere ver quién se la hjizo, sino quien se la paga.

Tigre es el equipo que mejor domina su estilo de juego. Con una estrategia fría, basada en el control del juego, por medio de la posesión de la pelota, suele brindar funciones anodinas que a su director técnico le importa un bledo, jugando exclusivamente para su público, que le pide victorias aunque sean feas. Si checamos los números del León, encontramos a un equipo apabullante en todos los aspectos del juego cotidiano que para ellos se ha vuelto de rutina, pero para el León, su estilo aburrido pero perfectramente dominado por sus jugadores y, con el tigre mayor Andre Gignac que con cuatro meses sin gol, que es su alimento favorito, le ha dado no para la rutina cotidiana, sino para la acumulación de titulos, lo que los ha convertido en el equipo más exitoso de la década.

Pero independientemente del León, hoy como en ningún otro torneo, la competencia ha sido mayor, quedándose fuera equipos cuyos problemas son más de vestidor unos y de escritorio otros, que en el campo han mostrado hechuras para mucho más de lo que en este torneo exhibieron, Toluca, Puebla, Monarcas y Santos, estarán pensando ya en el próximo torneo, en el que seguramenteveremos una gran cantidad de movimientos que ya desde ahora, se está empezando a especular.

Hasta pronto amigo.