/ lunes 18 de octubre de 2021

La madriguera del lobo | Del limbo a la pasarela

Estamos pasando de un periodo de Limbo, en donde lo que más llamaba la atención era una especie de vacío en el tema de los próximos protagonistas, ahora resulta que muchos ya están definidos como bien se sabe, con eventos de reciente cierre, situación que con respecto a otras corrientes políticas, ya había sucedido como también se sabe, en donde por cierto hay una efervescencia de distintos nombres, acorde a un tiempo al que ahora le podremos llamar pasarela tamaulipeca. Comienza una parte interesante.

Tamaulipas se gana, como suele ser en cualquier elección, con los puntos estratégicos electorales, en cuanto a gobernador se refiere, básicamente con las tres cabeceras que definirán el triunfo.

Empezando con el NORTE en donde estaría Matamoros y Reynosa, este último municipio con la aportación más grande en cuanto a padrón electoral se refiere, en ese mismo punto, es muy relevante Nuevo Laredo, lo que en conjunto con otros municipios sería la frontera chica, que dicho sea de paso es un gigante en cuanto a votos se refiere.

Otro punto estratégico para una elección seria el CENTRO, digamos que, con cabecera en Ciudad Victoria, zona que incluiría a Ciudad Mante, Xico y otras poblaciones más cercanas, desde luego importantes pero que políticamente tienen una influencia de lo denominado como centro.

Vale la pena destacar que en cuanto a elecciones se refiere la tendencia de esta zona, específicamente Ciudad Victoria, tiene una tendencia gobiernista, es decir por su actividad, movilidad social y económica tienden a votar por el partido que gobierna el estado, como ocurrió en 2016. Ese es otro dato interesante a considerar.

Como otra última cabecera generadora de votos, se debe considerar al SUR, es decir, Tampico, Ciudad Madero y Altamira, en los cuales por cierto se han dado cambios importantes electoralmente hablando en cuanto a tendencia política se refiere, considerando las últimas elecciones municipales, la zona conurbada con casi un millón de habitantes además de otros factores constituyen en suma lo que podría definir una elección, tomando en cuenta municipios como Ciudad Madero por ejemplo, en donde la participación de votantes es muy alta en cuanto a porcentaje, con casi el 60% de su padrón electoral.

Considerando lo anterior, podría hacerse un análisis previo de como están los candidatos o postulantes en su etapa digamos ahora de pasarela, que ya más abiertos empiezan con giras, declaraciones, eventos y desde luego por la banda de los saludos y sonrisas, para irse cotizando.

Sin embargo, es muy interesante que con la información básica anterior, se pueda hacer un análisis, de lo que va a representar realmente un tema de retos y de capitalización, dependiendo de la línea del partido que sea el candidato, pero sin duda nada está escrito, todo va a depender de su capacidad de alianzas y manejo de sus proyectos.

A partir de este punto, también se puede considerar cualquier candidato que gane la elección a gobernador requiere al menos de 650,000 votos tomando en cuenta la participación electoral en la última elección, por lo que quien tenga la intención deberá tomar en cuenta lo que le aporta cada zona y desde luego cada municipio

En este período desde luego de pasarela, seguirán surgiendo nombres de apuntados, aspirantes o suspirantes, pero en realidad debemos tomar en cuenta por cultura política, aunque no necesariamente ética, que las decisiones tienen dos oficinas de donde serán tomadas, es cuestión de tiempo para que ocurra, eso no ha cambiado en nuestro país, tema que dejaremos pendiente para otra editorial en donde daremos el punto de vista lo que significa en este momento ganar una contienda a gobernador en nuestro estado.

Hasta pronto.

Estamos pasando de un periodo de Limbo, en donde lo que más llamaba la atención era una especie de vacío en el tema de los próximos protagonistas, ahora resulta que muchos ya están definidos como bien se sabe, con eventos de reciente cierre, situación que con respecto a otras corrientes políticas, ya había sucedido como también se sabe, en donde por cierto hay una efervescencia de distintos nombres, acorde a un tiempo al que ahora le podremos llamar pasarela tamaulipeca. Comienza una parte interesante.

Tamaulipas se gana, como suele ser en cualquier elección, con los puntos estratégicos electorales, en cuanto a gobernador se refiere, básicamente con las tres cabeceras que definirán el triunfo.

Empezando con el NORTE en donde estaría Matamoros y Reynosa, este último municipio con la aportación más grande en cuanto a padrón electoral se refiere, en ese mismo punto, es muy relevante Nuevo Laredo, lo que en conjunto con otros municipios sería la frontera chica, que dicho sea de paso es un gigante en cuanto a votos se refiere.

Otro punto estratégico para una elección seria el CENTRO, digamos que, con cabecera en Ciudad Victoria, zona que incluiría a Ciudad Mante, Xico y otras poblaciones más cercanas, desde luego importantes pero que políticamente tienen una influencia de lo denominado como centro.

Vale la pena destacar que en cuanto a elecciones se refiere la tendencia de esta zona, específicamente Ciudad Victoria, tiene una tendencia gobiernista, es decir por su actividad, movilidad social y económica tienden a votar por el partido que gobierna el estado, como ocurrió en 2016. Ese es otro dato interesante a considerar.

Como otra última cabecera generadora de votos, se debe considerar al SUR, es decir, Tampico, Ciudad Madero y Altamira, en los cuales por cierto se han dado cambios importantes electoralmente hablando en cuanto a tendencia política se refiere, considerando las últimas elecciones municipales, la zona conurbada con casi un millón de habitantes además de otros factores constituyen en suma lo que podría definir una elección, tomando en cuenta municipios como Ciudad Madero por ejemplo, en donde la participación de votantes es muy alta en cuanto a porcentaje, con casi el 60% de su padrón electoral.

Considerando lo anterior, podría hacerse un análisis previo de como están los candidatos o postulantes en su etapa digamos ahora de pasarela, que ya más abiertos empiezan con giras, declaraciones, eventos y desde luego por la banda de los saludos y sonrisas, para irse cotizando.

Sin embargo, es muy interesante que con la información básica anterior, se pueda hacer un análisis, de lo que va a representar realmente un tema de retos y de capitalización, dependiendo de la línea del partido que sea el candidato, pero sin duda nada está escrito, todo va a depender de su capacidad de alianzas y manejo de sus proyectos.

A partir de este punto, también se puede considerar cualquier candidato que gane la elección a gobernador requiere al menos de 650,000 votos tomando en cuenta la participación electoral en la última elección, por lo que quien tenga la intención deberá tomar en cuenta lo que le aporta cada zona y desde luego cada municipio

En este período desde luego de pasarela, seguirán surgiendo nombres de apuntados, aspirantes o suspirantes, pero en realidad debemos tomar en cuenta por cultura política, aunque no necesariamente ética, que las decisiones tienen dos oficinas de donde serán tomadas, es cuestión de tiempo para que ocurra, eso no ha cambiado en nuestro país, tema que dejaremos pendiente para otra editorial en donde daremos el punto de vista lo que significa en este momento ganar una contienda a gobernador en nuestro estado.

Hasta pronto.