Como cada administración nacional, y a su vez, estatal y local, hay propuestas para reducir la pobreza en México. Pero ¿qué es la pobreza multidimensional y cómo se mide?
El Consejo Nacional de Evaluación de las Políticas de Desarrollo Social (CONEVAL) es un organismo público autónomo, que a su vez es descentralizado de la Administración Pública Federal. Nace con la aprobación de la Ley General de Desarrollo Social (LGDS), promulgada el 20 de enero de 2004, ésta cuenta con la capacidad técnica para elaborar información acerca de la situación de las políticas sociales y la medición de pobreza en México, para con ello, se permita optimizar la toma de decisiones en torno a ella.
Por su parte, el CONEVAL cuenta con dos principales funciones, las cuales son el regular y coordinar la evaluación de la Política Nacional de Desarrollo Social, así como las políticas, programas y acciones que realicen las instituciones públicas; también establece los lineamientos y criterios para la definición, tipificación y medición de la pobreza a través de la transparencia, rectitud y rigidez técnica.
Mundialmente, la medición de la pobreza ha sido desarrollada mayoritariamente desde un aspecto unidimensional, es decir, solamente se toma en cuenta al ingreso como un acercamiento al bienestar económico de las personas. Por ejemplo, la principal medición de pobreza utilizada para la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Unión Europea es la línea de pobreza definida a partir de un nivel de ingreso fijado a 50 por ciento del ingreso medio por hogar; mientras que en Estados Unidos, se basa la medición oficial definida en el costo en dólares de un determinado plan de alimentos; a su vez, el Banco Mundial define la pobreza extrema como vivir con menos de 1.25 dólares estadounidenses al día. En México, se solía establecer una línea de pobreza que está representada por el ingreso mínimo necesario para adquirir una canasta de productos considerados indispensables.
A pesar de la utilidad y del amplio reconocimiento en el mundo de las mediciones unidimensionales, se argumenta que una de las principales limitaciones es que la conceptualización de la pobreza comprende diversas dimensiones, es decir, se trata de un fenómeno de naturaleza multidimensional que no puede ser definido únicamente por la adquisición de bienes y servicios. Asimismo, la pobreza no solamente está relacionada al ingreso de la población, sino también está asociada al impedimento de disfrutar ciertos satisfactores básicos y fundamentales, los cuales, muchos son suministrados por el Estado, o que son considerados por formar parte de los derechos humanos, económicos, sociales y culturales, tales como el acceso a la alimentación, el acceso a los servicios de salud, la calidad y el espacio de la vivienda, el rezago educativo y los servicios básicos de la vivienda.
