Excelente día para todos nuestros amables lectores, tenistas, aficionados al tenis y público en general, siempre es un placer saludarlos, ahora en este tercer sábado del mes de septiembre. Deseamos que si han festejado el mes patrio o lo siguen festejando, lo hagan observando la seguridad sanitaria, usando los protocolos que ya conocen, siguiéndolos por su propia seguridad.
Queremos darle las gracias al Sr. Juan Castro por darnos de su valioso tiempo para escribirnos y expresar sus importantes comentarios sobre el deporte que nos atañe, así como su opinión sobre esta columna. Igualmente a la señorita Eva de la Teja, quien nos compartió su opinión y sentir vía Facebook sobre uno de los temas tratados en la columna anterior.
Después de la controversia armada por la expulsión (bien ganada) del número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, el US Open terminó trayéndonos a un campeón que llega a esta instancia por primera vez, enfrentando a otro jugador que también estaba en una final de Grand Slam por primera ocasión.
Así fue, el austriaco Dominic Thiem derrotó al alemán Alexander Zverev en 5 sets, después de haber perdido los dos primeros parciales. Sin duda que Zverev lo tuvo en sus manos y lo perdió. Lo que nuevamente prueba que en el deporte nada se puede dar por hecho antes de que el partido termine.
Por cómo iba el partido y cómo se veía el dominio del alemán, todo indicaba que el alemán lograría llevarse su primer Grand Slam, y no resultó así. Por otra parte, un dato curioso e interesante al mismo tiempo es que en los cuartos de final de este Abierto estadounidense estuvieron tres jugadoras que son mamás, por lo que en semifinal se enfrentaron dos, la bielorrusa Azarenka y la norteamericana Serena Williams. Situación que marca un precedente que nunca se había dado en un torneo profesional, y menos de esta importancia.
Como sabemos, la final de mujeres fue ganada por la japonesa Osaka, a pesar de la “lesión” que no le permitió jugar la final de Cincinnati, al menos esa fue la razón que dio, para un par de días después arrancar jugando el US Open sin problemas y lograr su segundo torneo en este país.
Comenzó sin problemas el Masters 1000 de Roma, torneo que se juega en arcilla y en esta ocasión, previo a otro Grand Slam, que es el Abierto de Francia, el llamado Roland Garros. Quizá lo más relevante es el regreso del español Rafael Nadal, que en su presentación aplastó a su compatriota Pablo Carreño Busta que, como recordamos, fue quien dejó fuera a Nole en el Abierto de Estados Unidos por aquella controversial situación del golpe a la jueza de línea. Suponíamos que Carreño iba a mostrar mucho más ritmo que Nadal, dada la ausencia del número dos del mundo en competencias, pero no fue así, Rafa dejó bien claro quién es el enemigo a vencer en arcilla, además de que pareció en todo momento que no había dejado de jugar en alta competencia, considerando que a este nivel los partidos de práctica se quedan muy lejos de un partido de torneo, tomando en cuenta todos los factores que rodean esto.
Al cierre de esta columna, el serbio Novak Djokovic, el español Nadal, el canadiense Shapovalov, el búlgaro Dimitrov y el argentino Diego Schwartzman, latino más destacado en la actualidad, ya están instalados en los cuartos de final de este torneo en Roma. En cuanto a las damas, la rumana Halep, la española Muguruza, la bielorrusa Azarenka y la checa así como la belga Mertens igualmente ya están en los cuartos de final del torneo.
En esta ocasión queremos saludar cordialmente a un tremendo jugador de tenis de esta ciudad, Alejandro Sobera, quien ha sido un deportista exitoso. Ha jugado desde niveles infantiles, juveniles, estudiantiles y torneos abiertos con adultos, en donde ha logrado campeonatos en cada categoría en donde participó. Cabe mencionar que su éxito se ha extendido hasta el terreno del futbol americano, deporte en el que también es un excelente jugador.
Nuestra reflexión de hoy…
Establece tus metas, que sean reales y alcanzables
Comentarios y sugerencias…
max_1607@hotmail.com
@ÁlamosArmamos
Punto para partido
