/ jueves 16 de mayo de 2019

Novelas fantásticas

Desde que el talentoso Gutenberg inventó la imprenta de tipos móviles para beneficio de la humanidad, el libro ha sido considerado un transmisor de cultura; durante la Edad Media los monjes dominicos, (llamados pendolistas), copiaban a mano los libros y la posesión de un ejemplar era considerado un tesoro apreciadísimo.

Entre 1450 y 1500 en Europa, que tenía entonces 100 millones de habitantes, la mayor parte de ellos analfabetos, se produjeron 20 millones de libros, según las investigaciones de Lisandro Otero (un destacadísimo intelectual cubano que en varias décadas representó el talento universal de los escritores y editores culturales que comprendieron el gobierno de Fidel Castro; durante un lustro colaboró en este importante periódico, después de haber desempeñado tareas diplomáticas en Europa). El libro no era un medio popular, las primeras ediciones no pasaban de los 200 ejemplares.

Resultó entonces en su momento muy desconcertante que se haya dado uno de los acontecimientos más sensacionales en materia de publicación de libros con la edición exitosísima de la serie de novelas escritas por J.K Rowling donde le da vida a Harry Potter, un jovencito que tiene una extraordinaria habilidad para dominar el arte milenario de la magia y enfrentarse al simbólico personaje que en las novelas, llevadas todas al cinematógrafo, representa el mal. El primer éxito de esta serie de Harry Potter que circuló en todo el mundo fue la llamada “Harry Potter y la piedra filosofal”.

En un principio las ediciones de Harry Potter que circularon en México fueron en inglés y no obstante este impedimento para los que no dominan este idioma, fue un éxito de librería. En tres días se vendieron 10 mil libros de esta saga. Cuando la mayor venta que se ha hecho de una novela en español en México, en ese tiempo, es de tres mil ejemplares.

Otro aspecto del fenómeno Harry Potter en su momento es que proyectó la realidad de que en el país se lee en lengua extranjera, lo cual indica que el idioma anglosajón en la medida que el tiempo transcurre sustituirá al español en ciertas clases sociales que se distinguen por una poderosa condición socioeconómica que contrasta dramáticamente con la desigualdad social que se refleja en el país y que señala un obstáculo que está deteniendo el proceso de alfabetización que caracterizó por mucho tiempo a los gobiernos de la Revolución Mexicana.

Este fenómeno editorial convirtió a su autora J.K. Rowling en una de las mujeres más ricas del mundo, quien por cierto empezó a escribir (dicen sus biógrafos) esta novela, en servilletas y ahora tiene a su disposición una fortuna económica mayor que la de la reina Isa-bel II.

Las historias de Harry Potter son muy divertidas, en esta obra, la escritora inglesa desarrolla magistralmente la antiquísima fórmula de la lucha del bien contra el mal. El bien lo representa el poderoso mago Albus Percival Dumblendore, protector de Harry Potter, y el mal está representado por el maestro de las artes ocultas Lord Voldemort.

Lo que llama poderosamente la atención de este fenómeno literario que ha representado la aparición de Harry Potter, es que es una obra que gustó y sigue gustando (al menos a mí me gustan) mucho a los adultos.

Acabo de leer que en una reunión celebrada en la universidad de Harvard, había un panel en el que se discutió sobre la política literaria de Harry Potter. ¿Y qué cree usted? Fue el panel más concurrido por el mundo académico que asistió a este evento universitario.

Esto sin duda debilita la literatura científica que es "el pan nuestro de cada día" de todos los que habitan ese mundo propio del "Topos Uranos" que es la característica -sine qua non- para orbitar en Harvard.

El asunto de que Harry Potter sigue gustando a los adultos es un fenómeno de tal dimensión que en su tiempo periódicos de la importancia del "New York Times" elaboraron interesantes reportajes para encontrar la causa de por qué los adultos disfrutan este tipo de literatura, que fue escrita de una forma preponderante para el mundo infantil.

Esto explicó la avalancha de quejas por parte de lectores adultos a la escritora -autora de la serie-, cuando decidió no seguir con la trama de Harry Potter, para poder recuperar la vida privada que la fama le había robado.

Lo que sucede es que a los adultos nos resulta fascinante que de vez en cuando, merced a un libro escrito con inteligencia e imaginación, se recupere una parte de la infancia perdida. Incluso la lectura de estos libros tiene el valor agregado de que permite a los adultos pertenecer por medio de la imaginación a una cofradía, como a la que pertenece Potter.

Uno de los libros más populares en la historia de la humanidad fue sin duda "Las fábulas" que escribió De la Fontaine, entre 1816 y 1850 se hicieron 240 ediciones, según nos ilustra Martyn Lyons, en la "Historia de la literatura en el mundo occidental".

Madame Bovary, escrita por Flaubert, fue también una obra muy leída en su tiempo, pero el escritor francés solamente recibió 3 mil 300 francos que no lo sacaron del atolladero en que siempre vivió, y que no se comparan con la enorme cantidad en dólares superiores al millón que recibió en este tiempo Mario Vargas Llosa al ser nominado Premio Nobel de Literatura 2010 y que se caracterizó este escritor peruano nacionalizado español como uno de los especialistas más importantes que hayan realizado estudios a nivel de ciencia sobre la literatura que inspiró Madame Bovary.

Sin duda que Víctor Hugo ha sido el más popular y el escritor más vendido en el siglo XIX, pues cuando murió dejó a sus dolientes una herencia considerable en más de cuatro millones de francos. Pero todo esto es un pálido reflejo de la inmensa fortuna que la escritora J.K. Rowling ha ganado con su obra sobre la vida y las peripecias de Harry Potter, que obviamente son de menor calidad literaria comparada con la producción del inmenso Víctor Hugo y del erótico Gustavo Flaubert.

No obstante y para sobrellevar los pesares que nos provoca toda esta realidad terca y brutal que vivimos en donde en la televisión y en la radio repiten la fantasía de que los gobernadores que terminan su mandato se despiden de sus gobernados supuestamente por haber cumplido su trabajo.

Vuélvala a leer, si no la ha leído búsquela y disfrútela, encontrará en "Las Reliquias de la Muerte" la eterna lucha entre el bien y el mal, que ha sido la constante de nuestra existencia y de las sociedades enteras que no pierden la oportunidad de imaginar un mejor mundo futuro para las generaciones por venir.

Correo: notario177@msn.com

Desde que el talentoso Gutenberg inventó la imprenta de tipos móviles para beneficio de la humanidad, el libro ha sido considerado un transmisor de cultura; durante la Edad Media los monjes dominicos, (llamados pendolistas), copiaban a mano los libros y la posesión de un ejemplar era considerado un tesoro apreciadísimo.

Entre 1450 y 1500 en Europa, que tenía entonces 100 millones de habitantes, la mayor parte de ellos analfabetos, se produjeron 20 millones de libros, según las investigaciones de Lisandro Otero (un destacadísimo intelectual cubano que en varias décadas representó el talento universal de los escritores y editores culturales que comprendieron el gobierno de Fidel Castro; durante un lustro colaboró en este importante periódico, después de haber desempeñado tareas diplomáticas en Europa). El libro no era un medio popular, las primeras ediciones no pasaban de los 200 ejemplares.

Resultó entonces en su momento muy desconcertante que se haya dado uno de los acontecimientos más sensacionales en materia de publicación de libros con la edición exitosísima de la serie de novelas escritas por J.K Rowling donde le da vida a Harry Potter, un jovencito que tiene una extraordinaria habilidad para dominar el arte milenario de la magia y enfrentarse al simbólico personaje que en las novelas, llevadas todas al cinematógrafo, representa el mal. El primer éxito de esta serie de Harry Potter que circuló en todo el mundo fue la llamada “Harry Potter y la piedra filosofal”.

En un principio las ediciones de Harry Potter que circularon en México fueron en inglés y no obstante este impedimento para los que no dominan este idioma, fue un éxito de librería. En tres días se vendieron 10 mil libros de esta saga. Cuando la mayor venta que se ha hecho de una novela en español en México, en ese tiempo, es de tres mil ejemplares.

Otro aspecto del fenómeno Harry Potter en su momento es que proyectó la realidad de que en el país se lee en lengua extranjera, lo cual indica que el idioma anglosajón en la medida que el tiempo transcurre sustituirá al español en ciertas clases sociales que se distinguen por una poderosa condición socioeconómica que contrasta dramáticamente con la desigualdad social que se refleja en el país y que señala un obstáculo que está deteniendo el proceso de alfabetización que caracterizó por mucho tiempo a los gobiernos de la Revolución Mexicana.

Este fenómeno editorial convirtió a su autora J.K. Rowling en una de las mujeres más ricas del mundo, quien por cierto empezó a escribir (dicen sus biógrafos) esta novela, en servilletas y ahora tiene a su disposición una fortuna económica mayor que la de la reina Isa-bel II.

Las historias de Harry Potter son muy divertidas, en esta obra, la escritora inglesa desarrolla magistralmente la antiquísima fórmula de la lucha del bien contra el mal. El bien lo representa el poderoso mago Albus Percival Dumblendore, protector de Harry Potter, y el mal está representado por el maestro de las artes ocultas Lord Voldemort.

Lo que llama poderosamente la atención de este fenómeno literario que ha representado la aparición de Harry Potter, es que es una obra que gustó y sigue gustando (al menos a mí me gustan) mucho a los adultos.

Acabo de leer que en una reunión celebrada en la universidad de Harvard, había un panel en el que se discutió sobre la política literaria de Harry Potter. ¿Y qué cree usted? Fue el panel más concurrido por el mundo académico que asistió a este evento universitario.

Esto sin duda debilita la literatura científica que es "el pan nuestro de cada día" de todos los que habitan ese mundo propio del "Topos Uranos" que es la característica -sine qua non- para orbitar en Harvard.

El asunto de que Harry Potter sigue gustando a los adultos es un fenómeno de tal dimensión que en su tiempo periódicos de la importancia del "New York Times" elaboraron interesantes reportajes para encontrar la causa de por qué los adultos disfrutan este tipo de literatura, que fue escrita de una forma preponderante para el mundo infantil.

Esto explicó la avalancha de quejas por parte de lectores adultos a la escritora -autora de la serie-, cuando decidió no seguir con la trama de Harry Potter, para poder recuperar la vida privada que la fama le había robado.

Lo que sucede es que a los adultos nos resulta fascinante que de vez en cuando, merced a un libro escrito con inteligencia e imaginación, se recupere una parte de la infancia perdida. Incluso la lectura de estos libros tiene el valor agregado de que permite a los adultos pertenecer por medio de la imaginación a una cofradía, como a la que pertenece Potter.

Uno de los libros más populares en la historia de la humanidad fue sin duda "Las fábulas" que escribió De la Fontaine, entre 1816 y 1850 se hicieron 240 ediciones, según nos ilustra Martyn Lyons, en la "Historia de la literatura en el mundo occidental".

Madame Bovary, escrita por Flaubert, fue también una obra muy leída en su tiempo, pero el escritor francés solamente recibió 3 mil 300 francos que no lo sacaron del atolladero en que siempre vivió, y que no se comparan con la enorme cantidad en dólares superiores al millón que recibió en este tiempo Mario Vargas Llosa al ser nominado Premio Nobel de Literatura 2010 y que se caracterizó este escritor peruano nacionalizado español como uno de los especialistas más importantes que hayan realizado estudios a nivel de ciencia sobre la literatura que inspiró Madame Bovary.

Sin duda que Víctor Hugo ha sido el más popular y el escritor más vendido en el siglo XIX, pues cuando murió dejó a sus dolientes una herencia considerable en más de cuatro millones de francos. Pero todo esto es un pálido reflejo de la inmensa fortuna que la escritora J.K. Rowling ha ganado con su obra sobre la vida y las peripecias de Harry Potter, que obviamente son de menor calidad literaria comparada con la producción del inmenso Víctor Hugo y del erótico Gustavo Flaubert.

No obstante y para sobrellevar los pesares que nos provoca toda esta realidad terca y brutal que vivimos en donde en la televisión y en la radio repiten la fantasía de que los gobernadores que terminan su mandato se despiden de sus gobernados supuestamente por haber cumplido su trabajo.

Vuélvala a leer, si no la ha leído búsquela y disfrútela, encontrará en "Las Reliquias de la Muerte" la eterna lucha entre el bien y el mal, que ha sido la constante de nuestra existencia y de las sociedades enteras que no pierden la oportunidad de imaginar un mejor mundo futuro para las generaciones por venir.

Correo: notario177@msn.com