/ miércoles 27 de mayo de 2020

Ocurrencias del futbol | Alfredo Di Stéfano ya tenía un arreglo con el Barcelona, Peeeeero....

El gran Alfredo Di Stéfano; ganador del Súper Balón de Oro; fue piedra angular del equipo del siglo para la FIFA, el Real Madrid, con el que ganó todo lo imaginable.

En España, Di Stéfano ganó el Pichichi en 1953 y le siguieron cuatro honores más de 1956 a 1959 y ayudó al Real Madrid a conseguir el título de campeón tres ocasiones más en esa década, en 1955, 1957 y 1958.

EL REAL MADRID

Di Stéfano formó parte del Real Madrid de 1958 que estaba plagado de leyendas del futbol mundial: Domínguez, Santamaría, Carniglia, Zárraga, Kopa, Rial, Di Stéfano, Puskas y Gento, nombres que provocaban miedo a cualquier rival. En la primera competición de la que hoy conocemos como Champions League, 1955-1956 participaron 16 equipos, el Real Madrid venció 7-0 global al Servette F. C. suizo en la primera ronda, al Partizan de Belgrado por 4-3 y al Milán por 5-4 para avanzar a la gran final, El Stade de Reims lo esperaba en el Parque de los Príncipes en París, el monarca francés de Liga, tenía en sus filas a Michel Hidalgo y a Raymond Kopa y a los diez minutos de juego, ya ganaban por 2-0, pero el Real Madrid no iba a ser frenado en el torneo que su presidente había ayudado a crear.

VINIERON DE ATRÁS

En uno de los juegos más intensos de la historia, los merengues se levantaron de dos desventajas, para terminar en el minuto 79 con un gol de Rial, su segundo del juego, finalmente terminaron 4-3, marcador que dio la vuelta a Europa, mientras que los merengues se elevaban a la estatura de gigantes. Ahora el equipo de Chamartin demostraba su gran calidad en la plataforma continental, en el que a la postre se convertiría el torneo más prestigioso de todo el mundo. El año siguiente no sería distinto, aunque sí los actores. Santiago Bernabéu llevó al Madrid a Raymond Kopa, después de la final que recién habían disputado, José Villalonga, técnico del Madrid, repetiría la hazaña de ganarlo todo.

TRIUNFO SOBRE LA FIORENTINA

Para esa campaña, la Copa de Campeones había crecido a 22 equipos. En octavos de final, el Real Madrid tuvo que llegar a un tercer partido eliminatorio contra el Rapid de Viena, pero en el resto de la competencia avanzaron sin problemas dejando atrás al Niza y al Manchester United. La final celebrada en el recién nombrado estadio Santiago Bernabéu vio a 124 mil personas colmar las gradas por el festejo del triunfo de su equipo por 2-0 sobre la Fiorentina. aunque tardaron 70 minutos en lograrlo, los dos referentes blancos, DiStéfano y Gento lograron los goles de la segunda Copa de Europa.

UN TÍTULO MÁS

Para 1958, ya sin Villalonga, pero con el equipo intacto, el argentino Luis Carniglia sería el encargado de conquistar un título más. Las víctimas en esta ocasión fueron el Antwerp belga, al que los merengues propinaron un contundente 8-1 global , el Sevilla en cuartos, al que destrozaron con un escandaloso 10-2 y el Vasas de Hungría, al son de 4-2 total. En la final disputada en el estadio Heysel en Bruselas, el Milán se paró en la cancha con la firme intención de detener la máquina merengue, lográndolo durante gran parte del partido. Schafino dio la ventaja a los italianos, la cual fue acortada por Di Stéfano cinco minutos después, pero Grillo dio nueva vida a los Rossoneros, que sentían cerca el título.

DEMASIADO EQUiPO

Sin embargo, el Madrid era demasiado equipo. Al 79 Rial empató y en tiempo extra Gento puso el gol definitivo en la pizarra y colocó el trofeo de campeones nuevamente en las manos del Real Madrid. Parecía que cada final que jugaban los merengues era mejor que la anterior, pero la gloria aún no terminaba.

Colmado por jugadores excepcionales, el Real Madrid conformó un equipo multinacional como no se había visto en Europa. Con Alfredo Di Stéfano a la cabeza, los merengues se hicieron de uno de los delanteros más efectivos, el mejor jugador húngaro de la historia, Ferenc Puskas que llegó a Madrid en 1958. Y el hombre gol enseguida causó un gran impacto en la capital española, con racimos de goles en cuanta cancha se paraba.

A LA FINAL DE EUROPA

Sus actuaciones levantaron al Real Madrid para llevarlo a una nueva final de Copa Europea. Ochenta mil personas presenciaron en el Neckarstadion de Stuttgart la revancha entre el Real Madrid y el Stade de Reims, justo como en aquella primera final continental. El equipo de Fontaine y de Piantoni volvía a medirse al mejor equipo del mundo y el resultado fue similar, aún con Puskas fuera por lesión, Kopa, Di Stéfano Rial y Gento probaron una vez más ser superiores. Según se sabe, el Barcelona tenía ya un acuerdo con Di Stéfano, mismo que fue truncado por el gobierno para que firmara para el club favorito de la dirigencia... Eduardo Galeano, en su libro "Futbol a sol y sombra" dice que el Real Madrid era el club modelo de la España de Franco, el que andaba por todas partes dejando a la gente con la boca abierta... La dictadura había encontrado una insuperable embajada... De ahí la rivalidad con el Barça.

El gran Alfredo Di Stéfano; ganador del Súper Balón de Oro; fue piedra angular del equipo del siglo para la FIFA, el Real Madrid, con el que ganó todo lo imaginable.

En España, Di Stéfano ganó el Pichichi en 1953 y le siguieron cuatro honores más de 1956 a 1959 y ayudó al Real Madrid a conseguir el título de campeón tres ocasiones más en esa década, en 1955, 1957 y 1958.

EL REAL MADRID

Di Stéfano formó parte del Real Madrid de 1958 que estaba plagado de leyendas del futbol mundial: Domínguez, Santamaría, Carniglia, Zárraga, Kopa, Rial, Di Stéfano, Puskas y Gento, nombres que provocaban miedo a cualquier rival. En la primera competición de la que hoy conocemos como Champions League, 1955-1956 participaron 16 equipos, el Real Madrid venció 7-0 global al Servette F. C. suizo en la primera ronda, al Partizan de Belgrado por 4-3 y al Milán por 5-4 para avanzar a la gran final, El Stade de Reims lo esperaba en el Parque de los Príncipes en París, el monarca francés de Liga, tenía en sus filas a Michel Hidalgo y a Raymond Kopa y a los diez minutos de juego, ya ganaban por 2-0, pero el Real Madrid no iba a ser frenado en el torneo que su presidente había ayudado a crear.

VINIERON DE ATRÁS

En uno de los juegos más intensos de la historia, los merengues se levantaron de dos desventajas, para terminar en el minuto 79 con un gol de Rial, su segundo del juego, finalmente terminaron 4-3, marcador que dio la vuelta a Europa, mientras que los merengues se elevaban a la estatura de gigantes. Ahora el equipo de Chamartin demostraba su gran calidad en la plataforma continental, en el que a la postre se convertiría el torneo más prestigioso de todo el mundo. El año siguiente no sería distinto, aunque sí los actores. Santiago Bernabéu llevó al Madrid a Raymond Kopa, después de la final que recién habían disputado, José Villalonga, técnico del Madrid, repetiría la hazaña de ganarlo todo.

TRIUNFO SOBRE LA FIORENTINA

Para esa campaña, la Copa de Campeones había crecido a 22 equipos. En octavos de final, el Real Madrid tuvo que llegar a un tercer partido eliminatorio contra el Rapid de Viena, pero en el resto de la competencia avanzaron sin problemas dejando atrás al Niza y al Manchester United. La final celebrada en el recién nombrado estadio Santiago Bernabéu vio a 124 mil personas colmar las gradas por el festejo del triunfo de su equipo por 2-0 sobre la Fiorentina. aunque tardaron 70 minutos en lograrlo, los dos referentes blancos, DiStéfano y Gento lograron los goles de la segunda Copa de Europa.

UN TÍTULO MÁS

Para 1958, ya sin Villalonga, pero con el equipo intacto, el argentino Luis Carniglia sería el encargado de conquistar un título más. Las víctimas en esta ocasión fueron el Antwerp belga, al que los merengues propinaron un contundente 8-1 global , el Sevilla en cuartos, al que destrozaron con un escandaloso 10-2 y el Vasas de Hungría, al son de 4-2 total. En la final disputada en el estadio Heysel en Bruselas, el Milán se paró en la cancha con la firme intención de detener la máquina merengue, lográndolo durante gran parte del partido. Schafino dio la ventaja a los italianos, la cual fue acortada por Di Stéfano cinco minutos después, pero Grillo dio nueva vida a los Rossoneros, que sentían cerca el título.

DEMASIADO EQUiPO

Sin embargo, el Madrid era demasiado equipo. Al 79 Rial empató y en tiempo extra Gento puso el gol definitivo en la pizarra y colocó el trofeo de campeones nuevamente en las manos del Real Madrid. Parecía que cada final que jugaban los merengues era mejor que la anterior, pero la gloria aún no terminaba.

Colmado por jugadores excepcionales, el Real Madrid conformó un equipo multinacional como no se había visto en Europa. Con Alfredo Di Stéfano a la cabeza, los merengues se hicieron de uno de los delanteros más efectivos, el mejor jugador húngaro de la historia, Ferenc Puskas que llegó a Madrid en 1958. Y el hombre gol enseguida causó un gran impacto en la capital española, con racimos de goles en cuanta cancha se paraba.

A LA FINAL DE EUROPA

Sus actuaciones levantaron al Real Madrid para llevarlo a una nueva final de Copa Europea. Ochenta mil personas presenciaron en el Neckarstadion de Stuttgart la revancha entre el Real Madrid y el Stade de Reims, justo como en aquella primera final continental. El equipo de Fontaine y de Piantoni volvía a medirse al mejor equipo del mundo y el resultado fue similar, aún con Puskas fuera por lesión, Kopa, Di Stéfano Rial y Gento probaron una vez más ser superiores. Según se sabe, el Barcelona tenía ya un acuerdo con Di Stéfano, mismo que fue truncado por el gobierno para que firmara para el club favorito de la dirigencia... Eduardo Galeano, en su libro "Futbol a sol y sombra" dice que el Real Madrid era el club modelo de la España de Franco, el que andaba por todas partes dejando a la gente con la boca abierta... La dictadura había encontrado una insuperable embajada... De ahí la rivalidad con el Barça.