/ sábado 22 de febrero de 2020

Ocurrencias del Futbol | Cómo pasar del futbol al beisbol, sin morir en el intento

Puedo asegurar que los beisbolistas recuerdan bien al "Chito" García, pero los futbolistas no.

Allá por los sesentas, los gigantes de la crónica deportiva en Tampico eran Carlos Aguiar y Martín Aguilar, tal era la influencia de su propuesta periodística, que el buen amigo Lic. Miguel Oropeza, defensa lateral izquierdo de los Celestes Jaibos del Tampico FC. puso de moda esta frase: "Aguiar me puso, Aguiar me quitó". Triste tarea la de un periodista honesto, quien con su objetividad, da la bienvenida al joven deportista, informando al público sobre el buen oficio de los nuevos prospectos, logrando que su nota influya sobre el criterio de cuerpo técnico y directivos de un equipo, para que les concedan la atención necesa-ria que bien aprovechada se traducirá en la contratación del joven deportista. Pero, atención, ese mismo periodista estará presente atento a señalar el declive del deportista que durante tanto tiempo fuera el protagonista de la crónica. ¿Quienes son Carlos Aguiar y Martín Aguilar? ¡Son el tiempo!

Sí, el mismo tiempo que otrora iluminara el camino de Javier Hernández, de quien solo se leían preces y glorias y, que ahora, esas mismas plumas antes tan pródigas en elogios, se dediquen a analizar el discurso del "Chicharito", antes razonable y acertado, ahora sobrado, inadecuado, insustancial y narcisista, que lesiona terriblemente a la figura de aquel adorado "Chicharito" del Manchester United, consentido del público europeo. En qué poco valoramos al escaso tesoro deportivo que poseemos y, en qué nos afecta que él mismo se incluya entre las leyendas, si en México las únicas leyendas que perduran son las de la Llorona, El Tigre de Santa Julia y Chucho el roto, porque hasta la nuestra, del "Jimy" el Capitán Fantasma, se ha quedado en el olvido.

En el mismo Puerto de Veracruz he preguntado por Julián Durán "El Pachuco", un verdadero hombre de leyenda, que junto con su esposa formaban una pareja tan original que bien podría realizarse un filme cinematográfico exitoso, "El Pachuco" Durán, para don Ignacio Trelles, el mejor jugador mexicano. Nadie ha tratado de mantener viva la imagen de Horacio Casarín y si la de Luis de la Fuente y Hoyos permanece aún vigente es porque en su nombre se ha construido un hermoso estadio llamado Luis "Pirata" Fuente, ahora condenado al abandono.

Vean ustedes la diferencia de la afición de un deporte a la de otro. En ese gran equipo de leyendas "Tiburones Rojos" del Veracruz alineaba en la media cancha Luis "Chito" García. Enrique Palomini, entrenador de los Tiburones, dijo de él, es un jugador inmaduro que pierde fácilmente la cabeza, pero es indispensable en mi alineación. Ocurrió que jugando contra el ADO se lio a golpes con un contrario al que fracturó la quijada, por lo que fue expulsado, tuvo acalorada discusión con el árbitro y encaró a la policía, por lo que fue apresado. La directiva le castigó por seis meses sin goce de sueldo, pero el "Chito", con más dignidad que los recientemente desaparecidos tiburoncitos que jugaban sin cobrar, decidió que seis meses era mucho tiempo inactivo, por lo que se contrató con los Cafeteros de Córdoba, equipo de beisbol, alcanzando después ya como mánager, 1000 triunfos, único deportista mexicano en destacarse en dos deportes profesionalmente.

Aquí mismo, en Tampico, todos los aficionados hablan de Messi y de Cristiano, pero pocos saben quién fue Raúl "Tarzán" Landeros, Salvador "Médico" Ayala, Benito Ayán, Rafael Díaz Estrada, Elpidio Padilla, Enrique Carretero García, Jorge Danilo López, Rufino Leca, Sergio Mata, Carlos Septién, Grimaldo González, Julio Ayllón Aparicio, Roberto "Chango" Zárate, Ernesto Candia, Nicolás "Pipo" Téllez, Gregorio Franco, Joaquín Bernal, Raúl Molina, Francisco Banda, Javier Contreras. A todos los conocí y, créanme, todos ellos fueron actores en situaciones épicas que los elevan a la altura de las leyendas, solo que somos presa fácil del conformismo y, bastante más narcisistas que lo que ahora ven los críticos en el "Chicharito", pues para las actuales generaciones solo entran en la excelencia los jugadores actuales, Messi y CR7, jamás Toño Carvajal, el "Tubo" Gómez, Héctor Hernández, Toño Jasso, "Negro" del Águila, Jaime Belmonte, Salvador Reyes, etc... Así que tranquilo "Chícharo", tú estás en la larga lista de muchos que como yo, apreciamos el buen futbol que nos regalaron tantos como tú, a quienes veremos por siempre como a una Leyenda.

En el estadio Jalisco, el Atlas continuó con su racha descendente al perder contra el Pachuca, en un juego en el que solamente un equipo jugó. La verdad es que por más que busco a un jugador rojinegro al cual liberar su culpa, no lo encuentro, son incapaces de concretar un avance, pues siempre fallan el último pase. A los 54 minutos, Franco Jara remató un centro de Chávez para el 1-0. Después, al 61, el mismo Jara cobrando un penal sentenció el juego. Abella fue expulsado empeorando la situación. Después, nada, nada, nada.

Hasta pronto amigo.

Puedo asegurar que los beisbolistas recuerdan bien al "Chito" García, pero los futbolistas no.

Allá por los sesentas, los gigantes de la crónica deportiva en Tampico eran Carlos Aguiar y Martín Aguilar, tal era la influencia de su propuesta periodística, que el buen amigo Lic. Miguel Oropeza, defensa lateral izquierdo de los Celestes Jaibos del Tampico FC. puso de moda esta frase: "Aguiar me puso, Aguiar me quitó". Triste tarea la de un periodista honesto, quien con su objetividad, da la bienvenida al joven deportista, informando al público sobre el buen oficio de los nuevos prospectos, logrando que su nota influya sobre el criterio de cuerpo técnico y directivos de un equipo, para que les concedan la atención necesa-ria que bien aprovechada se traducirá en la contratación del joven deportista. Pero, atención, ese mismo periodista estará presente atento a señalar el declive del deportista que durante tanto tiempo fuera el protagonista de la crónica. ¿Quienes son Carlos Aguiar y Martín Aguilar? ¡Son el tiempo!

Sí, el mismo tiempo que otrora iluminara el camino de Javier Hernández, de quien solo se leían preces y glorias y, que ahora, esas mismas plumas antes tan pródigas en elogios, se dediquen a analizar el discurso del "Chicharito", antes razonable y acertado, ahora sobrado, inadecuado, insustancial y narcisista, que lesiona terriblemente a la figura de aquel adorado "Chicharito" del Manchester United, consentido del público europeo. En qué poco valoramos al escaso tesoro deportivo que poseemos y, en qué nos afecta que él mismo se incluya entre las leyendas, si en México las únicas leyendas que perduran son las de la Llorona, El Tigre de Santa Julia y Chucho el roto, porque hasta la nuestra, del "Jimy" el Capitán Fantasma, se ha quedado en el olvido.

En el mismo Puerto de Veracruz he preguntado por Julián Durán "El Pachuco", un verdadero hombre de leyenda, que junto con su esposa formaban una pareja tan original que bien podría realizarse un filme cinematográfico exitoso, "El Pachuco" Durán, para don Ignacio Trelles, el mejor jugador mexicano. Nadie ha tratado de mantener viva la imagen de Horacio Casarín y si la de Luis de la Fuente y Hoyos permanece aún vigente es porque en su nombre se ha construido un hermoso estadio llamado Luis "Pirata" Fuente, ahora condenado al abandono.

Vean ustedes la diferencia de la afición de un deporte a la de otro. En ese gran equipo de leyendas "Tiburones Rojos" del Veracruz alineaba en la media cancha Luis "Chito" García. Enrique Palomini, entrenador de los Tiburones, dijo de él, es un jugador inmaduro que pierde fácilmente la cabeza, pero es indispensable en mi alineación. Ocurrió que jugando contra el ADO se lio a golpes con un contrario al que fracturó la quijada, por lo que fue expulsado, tuvo acalorada discusión con el árbitro y encaró a la policía, por lo que fue apresado. La directiva le castigó por seis meses sin goce de sueldo, pero el "Chito", con más dignidad que los recientemente desaparecidos tiburoncitos que jugaban sin cobrar, decidió que seis meses era mucho tiempo inactivo, por lo que se contrató con los Cafeteros de Córdoba, equipo de beisbol, alcanzando después ya como mánager, 1000 triunfos, único deportista mexicano en destacarse en dos deportes profesionalmente.

Aquí mismo, en Tampico, todos los aficionados hablan de Messi y de Cristiano, pero pocos saben quién fue Raúl "Tarzán" Landeros, Salvador "Médico" Ayala, Benito Ayán, Rafael Díaz Estrada, Elpidio Padilla, Enrique Carretero García, Jorge Danilo López, Rufino Leca, Sergio Mata, Carlos Septién, Grimaldo González, Julio Ayllón Aparicio, Roberto "Chango" Zárate, Ernesto Candia, Nicolás "Pipo" Téllez, Gregorio Franco, Joaquín Bernal, Raúl Molina, Francisco Banda, Javier Contreras. A todos los conocí y, créanme, todos ellos fueron actores en situaciones épicas que los elevan a la altura de las leyendas, solo que somos presa fácil del conformismo y, bastante más narcisistas que lo que ahora ven los críticos en el "Chicharito", pues para las actuales generaciones solo entran en la excelencia los jugadores actuales, Messi y CR7, jamás Toño Carvajal, el "Tubo" Gómez, Héctor Hernández, Toño Jasso, "Negro" del Águila, Jaime Belmonte, Salvador Reyes, etc... Así que tranquilo "Chícharo", tú estás en la larga lista de muchos que como yo, apreciamos el buen futbol que nos regalaron tantos como tú, a quienes veremos por siempre como a una Leyenda.

En el estadio Jalisco, el Atlas continuó con su racha descendente al perder contra el Pachuca, en un juego en el que solamente un equipo jugó. La verdad es que por más que busco a un jugador rojinegro al cual liberar su culpa, no lo encuentro, son incapaces de concretar un avance, pues siempre fallan el último pase. A los 54 minutos, Franco Jara remató un centro de Chávez para el 1-0. Después, al 61, el mismo Jara cobrando un penal sentenció el juego. Abella fue expulsado empeorando la situación. Después, nada, nada, nada.

Hasta pronto amigo.