/ domingo 1 de agosto de 2021

Ocurrencias del futbol | El vaso conservará por largo tiempo el aroma de la primera sustancia que contuvo

Cierto, esta selección Sub-23 que nos está representando en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 luce superior a aquella dirigida por Luis Fernando Tena que ganó la medalla de oro, algo que la actual aún no logra. Pero es de justicia reconocer que también los rivales son superiores a los que enfrentamos en aquella ocasión.

Hoy, contrario al Mundial Rusia 2018, en donde iniciamos venciendo a Alemania, elevando tanto a nuestro espíritu que la caída desde esa altura nos sigue afectando. Ahora, igual que entonces, iniciamos venciendo a un gigante como Francia, para caer enseguida con los anfitriones, lo que nos hizo pensar en que la historia volvía a repetirse, pero hoy, nuestros muchachos se han levantado para acabar con la historia rusa, derrotando por fin a quienes se habían convertido en nuestro azote, Corea del Sur, haciéndolo de manera contundente.

Y miren ustedes, ni el grupo que nos representa en la Copa Oro, ni la Sub-23, son nuestra Selección "A", la cual se compone de una mezcla de los jugadores de ambas. Este día, nuestro representativo olímpico me hizo recordar a la Naranja Mecánica de los años 70, que despreocupados por los goles que recibían se aseguraban de ser ellos quienes anotaran más. Lo que nos lleva a valorar la peligrosidad de nuestro rival en turno, que nos anotó tres goles de muy buena factura, con lo que se eleva el reconocimiento a lo hecho por los nuestros, que dobló la producción de sus rivales.

Por más que nuestros sabios habladores del micrófono quieran demeritar la actuación de aquellos que siendo del equipo odioso al que no pueden ver, al final se han tenido que tragar su veneno, al no quedarles más que reconocer el buen trabajo de los jaspeados, los Rayados, los jaspeados y los cuadrados, pues lo único que logramos ver fue a 16 jugadores que unidos fueron capaces de formar equipo. México inició con Guillermo Ochoa, Vladimir Loroña, Johan Vázquez, César Montes, Jorge Sánchez, Sebastián Córdova, José Joaquín Esquivel, Luis Romo, Alexis Vega, Henry Martín y Uriel Antuna... Entraron en la segunda parte Jesús Angulo, Fernando Beltrán, Eduardo Aguirre y Diego Lainez.

Lo único preocupante para mí, que no soy el entrenador del Tri, es la tardanza que ha estado manejando Jaime Lozano para realizar algunos cambios, como es el caso de Henry Martín, que jugó con un tobillo que lucía como cebolla morada, siento que por su seguridad y por lo importante que se ha convertido su presencia en el campo, debió haber sido retirado posteriormente de haber cumplido anotando dos goles, después de todo no se ha notado diferencia cuando entra el "Mudo" Aguirre. En fin, repito, yo no soy el entrenador y Lozano seguramente sabe lo que hace y por qué lo hace.

Hoy hemos tenido la suerte de disfrutar algunas obras de arte, primero, aquella larguísima asistencia de Alexis Vega, a la que Luis Romo controló como lo haría el mismo Zinedine Zidane, para definir de la misma forma que lo hace el gran francés y, qué me dicen del tanto anotado por Sebastián Córdova, llegó a la media luna, levantó la vista, ubicó al portero y ahí en donde todos vimos que fijó su mirada, ahí puso el balón, golazo. Ahora la asistencia de Diego Lainez, después de hacer una trenza con los defensores coreanos para servir en bandeja de plata el gol con que Aguirre cerró la cuenta. Y claro, también los coreanos hicieron su parte con dos goles semejantes a los de Córdova y Romo. Ahora, a olvidar lo que hoy ocurrió para concentrarse en Brasil.

Unas horas antes de este juego disfrutamos las actuaciones de Mazatlán 2-1 Pachuca, en donde Pezzolano vuelve a tardar en hacer cambios, haciéndolos cuando ya es demasiado tarde. Mientras tanto, en Puebla, las Chivas que sorprendieron dejando en la banca a jugadores importantes, creando un dinamismo que hacía tiempo no les veíamos, superaron al equipo de la franja por un contundente marcador de 2-0, siendo su cambio más notorio, la exhibición de una mejor disciplina táctica, especialmente en su defensa, realizando un achique en el medio campo, a diferencia de como lo venía haciendo en juegos pasados, donde esperaban pasivos en su área, ahora las Chivas fueron distintas y salieron a buscar al enemigo, abortando su juego desde el medio campo.

Y para aumentar el entusiasmo del buen sabor de boca que nos dejó los buenos resultados del Tri, recibimos la noticia de que Raúl Jiménez volvió a anotar para el Wolverhampton, haciéndonos pensar en un reencuentro con sus largas rachas goleadoras a las que nos tenía acostumbrados. Pienso que la alegría que como mexicanos sentimos ante estos visos de una real recuperación, no supera a la que debe estar sintiendo el "Tata" Martino, quien no encontraba con quién llenar ese gran hueco, productor de las prolongadas ausencias de gol en nuestra afortunada selección, que ahora cuenta con dos efectivos goleadores en la selección mayor, que son Rogelio Funes Mori y Raúl Jiménez y otros dos en la Sub-23 que son Henry Martín y Eduardo Aguirre.

Recuerdo bien aquello que allá por los años cincuenta le oí decir a don Fernando Marcos, "Cultura es lo que se nos queda, después que olvidamos todo lo que aprendimos"... Así, en ese vaso que es Raúl Jiménez, continúa presente la fragancia del hermoso y extenso contenido del futbol, como son, los principios de la técnica y los principios de la táctica, la defensa y el ataque, siendo esto último el aroma que aún permanece en el vaso que hoy me sirve para ejemplo. Raúl conserva lo que más le gusta de lo que aprendió.

Hasta pronto amigo.

Cierto, esta selección Sub-23 que nos está representando en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 luce superior a aquella dirigida por Luis Fernando Tena que ganó la medalla de oro, algo que la actual aún no logra. Pero es de justicia reconocer que también los rivales son superiores a los que enfrentamos en aquella ocasión.

Hoy, contrario al Mundial Rusia 2018, en donde iniciamos venciendo a Alemania, elevando tanto a nuestro espíritu que la caída desde esa altura nos sigue afectando. Ahora, igual que entonces, iniciamos venciendo a un gigante como Francia, para caer enseguida con los anfitriones, lo que nos hizo pensar en que la historia volvía a repetirse, pero hoy, nuestros muchachos se han levantado para acabar con la historia rusa, derrotando por fin a quienes se habían convertido en nuestro azote, Corea del Sur, haciéndolo de manera contundente.

Y miren ustedes, ni el grupo que nos representa en la Copa Oro, ni la Sub-23, son nuestra Selección "A", la cual se compone de una mezcla de los jugadores de ambas. Este día, nuestro representativo olímpico me hizo recordar a la Naranja Mecánica de los años 70, que despreocupados por los goles que recibían se aseguraban de ser ellos quienes anotaran más. Lo que nos lleva a valorar la peligrosidad de nuestro rival en turno, que nos anotó tres goles de muy buena factura, con lo que se eleva el reconocimiento a lo hecho por los nuestros, que dobló la producción de sus rivales.

Por más que nuestros sabios habladores del micrófono quieran demeritar la actuación de aquellos que siendo del equipo odioso al que no pueden ver, al final se han tenido que tragar su veneno, al no quedarles más que reconocer el buen trabajo de los jaspeados, los Rayados, los jaspeados y los cuadrados, pues lo único que logramos ver fue a 16 jugadores que unidos fueron capaces de formar equipo. México inició con Guillermo Ochoa, Vladimir Loroña, Johan Vázquez, César Montes, Jorge Sánchez, Sebastián Córdova, José Joaquín Esquivel, Luis Romo, Alexis Vega, Henry Martín y Uriel Antuna... Entraron en la segunda parte Jesús Angulo, Fernando Beltrán, Eduardo Aguirre y Diego Lainez.

Lo único preocupante para mí, que no soy el entrenador del Tri, es la tardanza que ha estado manejando Jaime Lozano para realizar algunos cambios, como es el caso de Henry Martín, que jugó con un tobillo que lucía como cebolla morada, siento que por su seguridad y por lo importante que se ha convertido su presencia en el campo, debió haber sido retirado posteriormente de haber cumplido anotando dos goles, después de todo no se ha notado diferencia cuando entra el "Mudo" Aguirre. En fin, repito, yo no soy el entrenador y Lozano seguramente sabe lo que hace y por qué lo hace.

Hoy hemos tenido la suerte de disfrutar algunas obras de arte, primero, aquella larguísima asistencia de Alexis Vega, a la que Luis Romo controló como lo haría el mismo Zinedine Zidane, para definir de la misma forma que lo hace el gran francés y, qué me dicen del tanto anotado por Sebastián Córdova, llegó a la media luna, levantó la vista, ubicó al portero y ahí en donde todos vimos que fijó su mirada, ahí puso el balón, golazo. Ahora la asistencia de Diego Lainez, después de hacer una trenza con los defensores coreanos para servir en bandeja de plata el gol con que Aguirre cerró la cuenta. Y claro, también los coreanos hicieron su parte con dos goles semejantes a los de Córdova y Romo. Ahora, a olvidar lo que hoy ocurrió para concentrarse en Brasil.

Unas horas antes de este juego disfrutamos las actuaciones de Mazatlán 2-1 Pachuca, en donde Pezzolano vuelve a tardar en hacer cambios, haciéndolos cuando ya es demasiado tarde. Mientras tanto, en Puebla, las Chivas que sorprendieron dejando en la banca a jugadores importantes, creando un dinamismo que hacía tiempo no les veíamos, superaron al equipo de la franja por un contundente marcador de 2-0, siendo su cambio más notorio, la exhibición de una mejor disciplina táctica, especialmente en su defensa, realizando un achique en el medio campo, a diferencia de como lo venía haciendo en juegos pasados, donde esperaban pasivos en su área, ahora las Chivas fueron distintas y salieron a buscar al enemigo, abortando su juego desde el medio campo.

Y para aumentar el entusiasmo del buen sabor de boca que nos dejó los buenos resultados del Tri, recibimos la noticia de que Raúl Jiménez volvió a anotar para el Wolverhampton, haciéndonos pensar en un reencuentro con sus largas rachas goleadoras a las que nos tenía acostumbrados. Pienso que la alegría que como mexicanos sentimos ante estos visos de una real recuperación, no supera a la que debe estar sintiendo el "Tata" Martino, quien no encontraba con quién llenar ese gran hueco, productor de las prolongadas ausencias de gol en nuestra afortunada selección, que ahora cuenta con dos efectivos goleadores en la selección mayor, que son Rogelio Funes Mori y Raúl Jiménez y otros dos en la Sub-23 que son Henry Martín y Eduardo Aguirre.

Recuerdo bien aquello que allá por los años cincuenta le oí decir a don Fernando Marcos, "Cultura es lo que se nos queda, después que olvidamos todo lo que aprendimos"... Así, en ese vaso que es Raúl Jiménez, continúa presente la fragancia del hermoso y extenso contenido del futbol, como son, los principios de la técnica y los principios de la táctica, la defensa y el ataque, siendo esto último el aroma que aún permanece en el vaso que hoy me sirve para ejemplo. Raúl conserva lo que más le gusta de lo que aprendió.

Hasta pronto amigo.