/ jueves 23 de enero de 2020

Ocurrencias del Futbol | En un campeonato, el orden de los factores sí puede alterar el producto


En el futbol, nunca el dos será más que el uno.

Qué rápido he encontrado ejemplos para explicar lo ocurrido en Argentina 78, cuando José Antonio Roca, equivocadamente puso a sus muchachos a jugar un partido justo tres días antes de la inauguración del Argentina 78, contra un equipo de estudiantes argentinos que como buenos argentinos no querían perder, así el ganar no tuviera mérito alguno. Aquello terminó en bronca, con algunos de nuestros jugadores lastimados. Igual, hoy hemos visto en el torneo de Copa que un equipo de la Liga de ascenso, Dorados de Culiacán, no quisieron perder la oportunidad de apuntarse un triunfo sobre el equipo más popular de México. Y ahí lo tienen, una victoria a domicilio sobre las Chivas Rayadas de Guadalajara, pasa a formar parte del currículum de los Dorados.

Pero no solamente en México se cuecen habas, los dos gigantes de España, el Real Madrid y el Barcelona, han salido de Salamanca y de Ibiza respectivamente, muy mal librados pero con vida. No se cuál haya sido la temperatura a la que se jugó en Ibiza, pero la de Salamanca se estableció en cuatro grados centígrados, en un estadio pequeño para cuatro mil personas, mientras que donde jugó Barcelona era para cinco mil, pero el de Salamanca tenía la característica de que solo había agua caliente para quince minutos.

Los narradores del juego se han ido formando una idea de la extraña personalidad de Gareth Bale, observando que en distintas ocasiones, al ser retirado del juego, se marcha del campo antes de que el partido termine, lo que es una falta de respeto para sus compañeros, en fin, ¿qué se puede esperar de una persona que se niega a aprender el idioma que hablan sus compañeros de trabajo? y, que no manifiesta reacción alguna cuando su equipo anota un gol ni gusta de recibir felicitaciones cuando es él el que anota. El caso es que ayer pidió su cambio antes del fin del encuentro por ahí del minuto 70, suponiendo los narradores que lo hizo para alcanzar a bañarse con agua caliente.

Barcelona encontró fiera oposición por parte del Ibiza Eiviassa, quienes incluso anotaron primero dominando el marcador todo el primer tiempo, siendo ya avanzada la segunda parte cuando los blaugrana anotaron su primero y segundo gol para sacar una ajustada y sufrida victoria, mientras que el Real Madrid, cuya plantilla está conformada por jugadores de mayor experiencia que los culés, observándose que en realidad, ambos equipos utilizan la Copa para hacer jugar a sus bancas, pero por ejemplo, si James Rodríguez es el conductor de juego suplente de Isco, en el Barça Riqui Puig va por Messi, lo que marca una gran diferencia.

Así, el Real Madrid, con esa diferencia, logró sacar un marcador más amplio que el Barcelona, pero de niguna manera más fácil. Gareth Bale abrió el marcador, que se amplió cuando un defensa de Ibiza quiso evitar que un remate flojo de Benzemá entrara en su portería, con tan mala suerte que terminó ayudándolo a irse al fondo para un claro autogol y ya sobre el tiempo, una brillante jugada individual de Brahimi, fue culminada con el tercer gol de los merengues.

Hoy, el primer equipo pequeño, el Ibiza Eiviassa de la tercer división, entró al juego con un entusiasmo nutrido por la oportunidad que representa el encuen tro con uno de los equipos más grandes de Europa y, si a eso le agregamos que en su entusiasmo, al llegarle temprano la opción clara de gol, la aprovecha, agregando al entusiasmo con que iniciaron, el 30% del siguiente gol que significa la obtención del primero, nos encontramos con un grupo de jóvenes dopados a consecuencia de la endorfina acumulada en su torrente sanguíneo, que los hace insensibles al cansancio y, que multiplica sus deseos de engrandecer su prestigio al ganarle nada menos que al Barcelona... Igual ocurrió con el Unionistas de Salamanca, que estuvieron frente a la oportunidad de vencer al mejor equipo del mundo en el siglo pasado, a los que lograron alcanzar después de que les habían anotado el primer gol.

Igual ocurrió con los jovencitos argentinos, que ante la oportunidad única de lucirse ante una selección de profesionales, defendieron su postura, aún incurriendo en los límites de la violencia en una situación en la que los únicos perjudicados eran los jugadores mexicanos. Y lo mismo acaba de suceder con el Guadalajara, que seguramente más interesados en una buena participación en la Liga que en la Copa, han de jugar con todas las precauciones, ante unos Dorados ansiosos por participar en la Primera División, algo que les pareciera ser más difícil ganar (el ascenso) que competir en un torneo de Copa, que finalmente será un equipo de la Primera División quien la gane... O ¿han visto ustedes que alguna vez haya ganado la Copa un equipo de la División de Ascenso? La sorpresa grande es que los Dorados se hayan impuesto a las Chivas. Pero, ya verán como nada pasará, nadie se sorprenderá si las Chivas remontan el marcador en el juego de ida y, eliminan a los Dorados, porque eso es lo normal, nunca el dos se encuentra antes que el uno.

Hasta pronto amigo.


En el futbol, nunca el dos será más que el uno.

Qué rápido he encontrado ejemplos para explicar lo ocurrido en Argentina 78, cuando José Antonio Roca, equivocadamente puso a sus muchachos a jugar un partido justo tres días antes de la inauguración del Argentina 78, contra un equipo de estudiantes argentinos que como buenos argentinos no querían perder, así el ganar no tuviera mérito alguno. Aquello terminó en bronca, con algunos de nuestros jugadores lastimados. Igual, hoy hemos visto en el torneo de Copa que un equipo de la Liga de ascenso, Dorados de Culiacán, no quisieron perder la oportunidad de apuntarse un triunfo sobre el equipo más popular de México. Y ahí lo tienen, una victoria a domicilio sobre las Chivas Rayadas de Guadalajara, pasa a formar parte del currículum de los Dorados.

Pero no solamente en México se cuecen habas, los dos gigantes de España, el Real Madrid y el Barcelona, han salido de Salamanca y de Ibiza respectivamente, muy mal librados pero con vida. No se cuál haya sido la temperatura a la que se jugó en Ibiza, pero la de Salamanca se estableció en cuatro grados centígrados, en un estadio pequeño para cuatro mil personas, mientras que donde jugó Barcelona era para cinco mil, pero el de Salamanca tenía la característica de que solo había agua caliente para quince minutos.

Los narradores del juego se han ido formando una idea de la extraña personalidad de Gareth Bale, observando que en distintas ocasiones, al ser retirado del juego, se marcha del campo antes de que el partido termine, lo que es una falta de respeto para sus compañeros, en fin, ¿qué se puede esperar de una persona que se niega a aprender el idioma que hablan sus compañeros de trabajo? y, que no manifiesta reacción alguna cuando su equipo anota un gol ni gusta de recibir felicitaciones cuando es él el que anota. El caso es que ayer pidió su cambio antes del fin del encuentro por ahí del minuto 70, suponiendo los narradores que lo hizo para alcanzar a bañarse con agua caliente.

Barcelona encontró fiera oposición por parte del Ibiza Eiviassa, quienes incluso anotaron primero dominando el marcador todo el primer tiempo, siendo ya avanzada la segunda parte cuando los blaugrana anotaron su primero y segundo gol para sacar una ajustada y sufrida victoria, mientras que el Real Madrid, cuya plantilla está conformada por jugadores de mayor experiencia que los culés, observándose que en realidad, ambos equipos utilizan la Copa para hacer jugar a sus bancas, pero por ejemplo, si James Rodríguez es el conductor de juego suplente de Isco, en el Barça Riqui Puig va por Messi, lo que marca una gran diferencia.

Así, el Real Madrid, con esa diferencia, logró sacar un marcador más amplio que el Barcelona, pero de niguna manera más fácil. Gareth Bale abrió el marcador, que se amplió cuando un defensa de Ibiza quiso evitar que un remate flojo de Benzemá entrara en su portería, con tan mala suerte que terminó ayudándolo a irse al fondo para un claro autogol y ya sobre el tiempo, una brillante jugada individual de Brahimi, fue culminada con el tercer gol de los merengues.

Hoy, el primer equipo pequeño, el Ibiza Eiviassa de la tercer división, entró al juego con un entusiasmo nutrido por la oportunidad que representa el encuen tro con uno de los equipos más grandes de Europa y, si a eso le agregamos que en su entusiasmo, al llegarle temprano la opción clara de gol, la aprovecha, agregando al entusiasmo con que iniciaron, el 30% del siguiente gol que significa la obtención del primero, nos encontramos con un grupo de jóvenes dopados a consecuencia de la endorfina acumulada en su torrente sanguíneo, que los hace insensibles al cansancio y, que multiplica sus deseos de engrandecer su prestigio al ganarle nada menos que al Barcelona... Igual ocurrió con el Unionistas de Salamanca, que estuvieron frente a la oportunidad de vencer al mejor equipo del mundo en el siglo pasado, a los que lograron alcanzar después de que les habían anotado el primer gol.

Igual ocurrió con los jovencitos argentinos, que ante la oportunidad única de lucirse ante una selección de profesionales, defendieron su postura, aún incurriendo en los límites de la violencia en una situación en la que los únicos perjudicados eran los jugadores mexicanos. Y lo mismo acaba de suceder con el Guadalajara, que seguramente más interesados en una buena participación en la Liga que en la Copa, han de jugar con todas las precauciones, ante unos Dorados ansiosos por participar en la Primera División, algo que les pareciera ser más difícil ganar (el ascenso) que competir en un torneo de Copa, que finalmente será un equipo de la Primera División quien la gane... O ¿han visto ustedes que alguna vez haya ganado la Copa un equipo de la División de Ascenso? La sorpresa grande es que los Dorados se hayan impuesto a las Chivas. Pero, ya verán como nada pasará, nadie se sorprenderá si las Chivas remontan el marcador en el juego de ida y, eliminan a los Dorados, porque eso es lo normal, nunca el dos se encuentra antes que el uno.

Hasta pronto amigo.