/ domingo 21 de febrero de 2021

Ocurrencias del futbol | Envejecer es la única forma de vivir por mucho tiempo

Pero algunos envejecemos más pronto que otros... ¿Por qué?

Pareciera que existe un acuerdo entre todos los equipos del futbol mexicano, en el que se prohíbe terminantemente ganar por más de un gol. De esta forma, no acabamos de descifrar el trabajo de los directores técnicos que se estrenaron en este torneo. El ejemplo más claro lo encuentro con el Monterrey, con el que los comentaristas están siendo bastante enérgicos con su director técnico, Javier Aguirre, señalando que los Rayados se encuentran exactamente igual que cuando Antonio Mohamed los dirigía.

Curiosamente esto es cierto, pero ocurre que al "Turco" lo salvaban los jugadores, que salvo dos o tres excepciones, son los mismos, sólo que ahora, con Aguirre, lejos de ser sus salvadores, son los que lo están hundiendo. Recién contra el Necaxa acabamos de ver un primer tiempo en el que los Rayados fueron dominadores absolutos del partido, dominio que no se refleja en el marcador, pues esos costosos jugadores que fueran la salvación para Mohamed, ahora, como boxeadores finos, buscan ganar por decisión unánime, dominando a su rival con una estéril y absurda posesión de balón que no tiene por meta el gol.

Avilés Hurtado, encargado de darle al Monterrey el ritmo de juego que le es característico, ya con 34 años de edad, parece no cumplir con tan importante tarea, sus acostumbradas chilenas que, otrora le significaran valiosos y hermosos goles, ahora se han convertido en una amenaza para los contrincantes, que estando cerca de la jugada se exponen a perder la cabeza, pues el colombiano difícilmente le acierta al balon. Su gambeta no engaña ni a un niño y su contundencia desapareció.

Simplemente en su último juego contra el Necaxa, en un contragolpe de cuatro Rayados contra dos Rayos, el conductor decidió ceder el balón a Avilés Hurtado, quien solo ante el portero echó el balón por un lado. Como reza la conocida sentencia, gol errado, gol aceptado, al regalo de Hurtado, los Rayos respondieron con su gol, el de la igualada. Pero no solamente el colombiano cometió errores frente a gol. Maxi Meza, que se ha convertido en el arma más importante de Rayados, creó varias opciones de gol, desperdiciadas por sus compañeros y, Dorlan Pabón, de la misma edad que Avilés Hurtado, ha perdido la velocidad que le permitía llegar por la banda derecha, a la zona ideal para enviar el centro, que era muy eficazmente cazado por Funes Mori, bajando a partir de esto, la importante producción del mellizo.

La aportación del "Vasco" ya es visible, el control del balón y del partido con un aire distinto al del resto de los equipos, es el aporte de Aguirre; la inefectividad, la nula contundencia corresponde a los jugadores que tendrán que soportar la reacción del "Vasco", que conociéndolo, será muy parecida a la del "Tuca" Ferreti, entonces veremos si los colombianos Dorlan Pabón y Avilés Hurtado son capaces a su edad, de reaccionar como es debido, de lo contrario, será necesario volver a echar mano de la chequera para suplir a esas dos piezas, ya que de momento, la cantera solo ha producido jugadores defensivos.

Hay jugadores que a los 33 años continúan siendo fuertes, habilidosos y contundentes, tales como Pablo Barrera, Jesús Molina, Rubens Sambueza, Luis Montes, Pablo Aguilar, Andre Pier Gignac, Jesús Corona y tantos otros que con esa edad, aún no manifiestan señales de vejez prematura. El tiempo tiene sus estaciones: Primavera, verano, otoño e invierno. Sin estas cuatro estaciones, eslabones milagrosos de la vida, no habría vida en nuestro planeta. Es cierto que la vejez es el invierno de nuestra existencia. ¿Pero acaso no queremos vivir mucho tiempo? ¿Y cómo vivir largo tiempo sin que por nuestra vida hayan transcurrido las cuatro estaciones. Envejecer es el único medio de vivir mucho tiempo. Así, cuando a muchos se nos ha llegado el tiempo, no nos quejemos. Hay una frase muy conocida que dice, "el que puede, que haga y el que no puede, que enseñe".

Y corresponde a uno elegir entre las opciones de vida, así como no hay quién sirva para todo, tampoco hay quien no sirva para nada. El futbol es sinónimo de vida, todo lo inherente a ella se encuentra en el futbol. Zinedine Zidane supo que no podría eternizarse en la acción y no pudiendo ejercer, enseñó y, lo ha hecho muy bien. Beckenvauer fue campeón del mundo jugando, lo fue como director técnico, lo fue como directivo y lo es como empresario. Pelé fue campeón del mundo como jugador, fue ministro de Deportes en su país y es un buen empresario.

¿Por que la idea de eternizarse cuando el cuerpo ya no responde? Dicen que les entró la vejez más rápido de lo que pensaban. En primer lugar ¿quién los obligó a engañarse? ¿qué más tolerable les parecería a estos la vejez si hubiesen llegado a los ochocientos años que a los ochenta? Porque aunque hubiera sido larga, de ningún consuelo podría servir a un viejo de poco entendimiento.

Debemos prepararnos para una vejez sensata. Los que ya estén en esta etapa, pueden esforzarse en repasar su vida y reflexionar en sus grandes errores y aciertos para formarse un juicio más certero. Vivir en la vejez es una oportunidad, una nueva estación que la vida ofrece a los que han vivido mucho tiempo, a fin de ser excelentes consejeros y seguir disfrutando de las bellezas que la vida les ofrece hasta el último momento.

Hasta pronto amigo.

Pero algunos envejecemos más pronto que otros... ¿Por qué?

Pareciera que existe un acuerdo entre todos los equipos del futbol mexicano, en el que se prohíbe terminantemente ganar por más de un gol. De esta forma, no acabamos de descifrar el trabajo de los directores técnicos que se estrenaron en este torneo. El ejemplo más claro lo encuentro con el Monterrey, con el que los comentaristas están siendo bastante enérgicos con su director técnico, Javier Aguirre, señalando que los Rayados se encuentran exactamente igual que cuando Antonio Mohamed los dirigía.

Curiosamente esto es cierto, pero ocurre que al "Turco" lo salvaban los jugadores, que salvo dos o tres excepciones, son los mismos, sólo que ahora, con Aguirre, lejos de ser sus salvadores, son los que lo están hundiendo. Recién contra el Necaxa acabamos de ver un primer tiempo en el que los Rayados fueron dominadores absolutos del partido, dominio que no se refleja en el marcador, pues esos costosos jugadores que fueran la salvación para Mohamed, ahora, como boxeadores finos, buscan ganar por decisión unánime, dominando a su rival con una estéril y absurda posesión de balón que no tiene por meta el gol.

Avilés Hurtado, encargado de darle al Monterrey el ritmo de juego que le es característico, ya con 34 años de edad, parece no cumplir con tan importante tarea, sus acostumbradas chilenas que, otrora le significaran valiosos y hermosos goles, ahora se han convertido en una amenaza para los contrincantes, que estando cerca de la jugada se exponen a perder la cabeza, pues el colombiano difícilmente le acierta al balon. Su gambeta no engaña ni a un niño y su contundencia desapareció.

Simplemente en su último juego contra el Necaxa, en un contragolpe de cuatro Rayados contra dos Rayos, el conductor decidió ceder el balón a Avilés Hurtado, quien solo ante el portero echó el balón por un lado. Como reza la conocida sentencia, gol errado, gol aceptado, al regalo de Hurtado, los Rayos respondieron con su gol, el de la igualada. Pero no solamente el colombiano cometió errores frente a gol. Maxi Meza, que se ha convertido en el arma más importante de Rayados, creó varias opciones de gol, desperdiciadas por sus compañeros y, Dorlan Pabón, de la misma edad que Avilés Hurtado, ha perdido la velocidad que le permitía llegar por la banda derecha, a la zona ideal para enviar el centro, que era muy eficazmente cazado por Funes Mori, bajando a partir de esto, la importante producción del mellizo.

La aportación del "Vasco" ya es visible, el control del balón y del partido con un aire distinto al del resto de los equipos, es el aporte de Aguirre; la inefectividad, la nula contundencia corresponde a los jugadores que tendrán que soportar la reacción del "Vasco", que conociéndolo, será muy parecida a la del "Tuca" Ferreti, entonces veremos si los colombianos Dorlan Pabón y Avilés Hurtado son capaces a su edad, de reaccionar como es debido, de lo contrario, será necesario volver a echar mano de la chequera para suplir a esas dos piezas, ya que de momento, la cantera solo ha producido jugadores defensivos.

Hay jugadores que a los 33 años continúan siendo fuertes, habilidosos y contundentes, tales como Pablo Barrera, Jesús Molina, Rubens Sambueza, Luis Montes, Pablo Aguilar, Andre Pier Gignac, Jesús Corona y tantos otros que con esa edad, aún no manifiestan señales de vejez prematura. El tiempo tiene sus estaciones: Primavera, verano, otoño e invierno. Sin estas cuatro estaciones, eslabones milagrosos de la vida, no habría vida en nuestro planeta. Es cierto que la vejez es el invierno de nuestra existencia. ¿Pero acaso no queremos vivir mucho tiempo? ¿Y cómo vivir largo tiempo sin que por nuestra vida hayan transcurrido las cuatro estaciones. Envejecer es el único medio de vivir mucho tiempo. Así, cuando a muchos se nos ha llegado el tiempo, no nos quejemos. Hay una frase muy conocida que dice, "el que puede, que haga y el que no puede, que enseñe".

Y corresponde a uno elegir entre las opciones de vida, así como no hay quién sirva para todo, tampoco hay quien no sirva para nada. El futbol es sinónimo de vida, todo lo inherente a ella se encuentra en el futbol. Zinedine Zidane supo que no podría eternizarse en la acción y no pudiendo ejercer, enseñó y, lo ha hecho muy bien. Beckenvauer fue campeón del mundo jugando, lo fue como director técnico, lo fue como directivo y lo es como empresario. Pelé fue campeón del mundo como jugador, fue ministro de Deportes en su país y es un buen empresario.

¿Por que la idea de eternizarse cuando el cuerpo ya no responde? Dicen que les entró la vejez más rápido de lo que pensaban. En primer lugar ¿quién los obligó a engañarse? ¿qué más tolerable les parecería a estos la vejez si hubiesen llegado a los ochocientos años que a los ochenta? Porque aunque hubiera sido larga, de ningún consuelo podría servir a un viejo de poco entendimiento.

Debemos prepararnos para una vejez sensata. Los que ya estén en esta etapa, pueden esforzarse en repasar su vida y reflexionar en sus grandes errores y aciertos para formarse un juicio más certero. Vivir en la vejez es una oportunidad, una nueva estación que la vida ofrece a los que han vivido mucho tiempo, a fin de ser excelentes consejeros y seguir disfrutando de las bellezas que la vida les ofrece hasta el último momento.

Hasta pronto amigo.