/ jueves 28 de mayo de 2020

Ocurrencias del futbol | Garrincha, alegría del pueblo, el ángel que cambió Brasil

Alegría del pueblo, Ala blanca y Un sueño brasileño, películas en las que incluso participó.

Garrincha explotó sus habilidades en el regate para llevar a su selección a los dos primeros títulos mundiales. Recordado como uno de los jugadores más espectaculares de todos los tiempos, Mané Garrincha se formó como multicampeón en el Botafogo e irrumpió en el firmamento del balompié gracias a la conquista de dos Copas del Mundo con Brasil.

No obstante, Manuel Francisco dos Santos, quien nació con un pie zambo y la pierna izquierda seis centímetros más corta que la derecha, pasó su infancia trabajando en una fábrica textil, sin tomarse el futbol en serio, situación que terminó por convertirlo en entretenimiento puro en el campo.

REGATE Y SINGULAR FÍSICO

Sello único, su habilidad en el regate y su singular físico le proporcionó una fuerza explosiva con la pelota en los pies que le permitía anular a sus marcadores.

Poseedor de una habilidad envidiable, Garrincha fue un espectáculo. Desfachatado, atrevido, rápido, resbaladizo por la banda derecha, el ángel de las piernas torcidas, se encargó de sacudir a todo un pueblo con el Botafogo y con la Canarinha, al ganar tres campeonatos cariocas, entre una infinidad de diferentes títulos a nivel de clubes; además de los Mundiales de Suecia 58 y Chile 62 donde se bordaron las dos primeras estrellas del actual pentacampeón, llamó la atención por encima de figuras como Pelé, Didí, Vavá y Mario Lobo Zagallo.

De hecho, Garrincha, llamado así por su parecido con el pájaro selvático y por su trepidante regate, es considerado el artífice de la segunda Copa conquistada por Brasil ante Checoslovaquia y con una elegante actuación le bastó para ser elegido el mejor jugador del orbe en aquel tiempo.

Garrincha se encargó de regar su talento por todo el mundo, con el genuino juego bonito como bandera. Lejos de los elogios y cerca del carnaval, Garrincha tuvo rivales que nunca pudo librar: fama, mujeres, alcohol y tabaco.

Sin embargo, fue el primero en enseñar a reír a la afición, pues jugaba para el deleite de la tribuna.

Su vida fue llevada al cine... La espectacular vida del "Chaplin del futbol" fue llevada a la pantalla grande en varias ocaciones, siendo la película estrenada en 2003. "Estrella solitaria" la más popular de ellas. Esta producción estaba basada a su vez en el libro que llevaba el mismo nombre, escrito por el reconocido periodista brasileño, Ruy Castro... "Alegría del pueblo", "Ala blanca" y "Un sueño brasileño", son otras cintas en donde incluso el futbolista participó como actor invitado... Respuestas a algunas entrevistas que le hicieron: "La diferencia que existió con respecto de Pelé, es que yo apenas pude driblar todos los problemas con los pies"... "Yo nunca leo las páginas deportivas de los periódicos, ni oigo lo que dicen de mí en la radio, me volvería totalmente loco"... "¿Para qué debería molestarme? soy un hombre completamente feliz. Yo vivo la vida, la vida no me vive a mí...

REBELDÍA TOTAL

Garrincha fue una especie de reflejo deforme de Pelé. Rebeldía contra ejemplaridad, humildad contra elegancia, locura frente a sobriedad... Nunca fueron amigos y, pese a sus características diametralmente opuestas, Edson siempre acaparó los reflectores. Muestra de ello es la primera vez que se vieron las caras, en 1956, cuando el Santos de Pelé, le ganó al Botafogo de Garrincha en 1956, con cuatro anotaciones de Pelé que tenía entonces 16 años.

Antes de partir para Suecia en 1958, el Dr. Gosling advirtió a Vicente Feola, entrenador de la selección, que no aprobaba la estancia en la selección, ni de Edson Arantes do Nacimento "Pelé" por ser un niño enclenque que se asustaría con la tala de los gigantes suecos y rusos y, tampoco daba aprobación a Manuel Francisco dos Santos "Garrincha", porque era una piltrafa deforme, inútil para cualquier tipo de actividad física, que tenía los pies 80°girados hacia adentro y, su pierna derecha era seis centímetros más grande que la izquierda y por si fuera poco, tenía la columna vertebral torcida... A lo que Feola contestó... Mire, doctor, usted sabrá mucho de medicina, pero aquí, el que sabe de futbol soy yo y, el niño y la piltrafa subieron al avión y fueron la sensación del torneo.

TODO SE DERRUMBÓ

Es triste ver que como sucede a muchos de los genios de este deporte, que habiendo iniciado una exitosa carrera, después con malas costumbres, lejos de los terrenos de juego, lo echan todo a perder. Garrincha era adicto al tabaco desde los 10 años y sus problemas con el alcohol le c ostaron la vida... Ya lo decía el mismo al final, "Yo no vivo la vida, la vida me vive a mí".

Eduardo Galeno dijo de él... Alguno de sus hermanos le bautizó como Garrincha, que es un pájaro inútil y feo... Los médicos le hicieron la cruz, dijeron este anormal nunca será deportista. Este pobre resto del hombre y la poliomielitis, burro, cojo, con cerebro de niño, una columna hecha "S" y piernas torcidas para el mismo lado... Pero nunca hubo un puntero derecho como él.

En Suecia fue el mejor en su puesto y en Chile 62 fue el mejor de todos. Pero a lo largo de sus años, Garrincha fue mucho más que eso. Garrincha fue el hombre que dio más alegrías en toda la historia del futbol.

Hasta pronto amigo.

Alegría del pueblo, Ala blanca y Un sueño brasileño, películas en las que incluso participó.

Garrincha explotó sus habilidades en el regate para llevar a su selección a los dos primeros títulos mundiales. Recordado como uno de los jugadores más espectaculares de todos los tiempos, Mané Garrincha se formó como multicampeón en el Botafogo e irrumpió en el firmamento del balompié gracias a la conquista de dos Copas del Mundo con Brasil.

No obstante, Manuel Francisco dos Santos, quien nació con un pie zambo y la pierna izquierda seis centímetros más corta que la derecha, pasó su infancia trabajando en una fábrica textil, sin tomarse el futbol en serio, situación que terminó por convertirlo en entretenimiento puro en el campo.

REGATE Y SINGULAR FÍSICO

Sello único, su habilidad en el regate y su singular físico le proporcionó una fuerza explosiva con la pelota en los pies que le permitía anular a sus marcadores.

Poseedor de una habilidad envidiable, Garrincha fue un espectáculo. Desfachatado, atrevido, rápido, resbaladizo por la banda derecha, el ángel de las piernas torcidas, se encargó de sacudir a todo un pueblo con el Botafogo y con la Canarinha, al ganar tres campeonatos cariocas, entre una infinidad de diferentes títulos a nivel de clubes; además de los Mundiales de Suecia 58 y Chile 62 donde se bordaron las dos primeras estrellas del actual pentacampeón, llamó la atención por encima de figuras como Pelé, Didí, Vavá y Mario Lobo Zagallo.

De hecho, Garrincha, llamado así por su parecido con el pájaro selvático y por su trepidante regate, es considerado el artífice de la segunda Copa conquistada por Brasil ante Checoslovaquia y con una elegante actuación le bastó para ser elegido el mejor jugador del orbe en aquel tiempo.

Garrincha se encargó de regar su talento por todo el mundo, con el genuino juego bonito como bandera. Lejos de los elogios y cerca del carnaval, Garrincha tuvo rivales que nunca pudo librar: fama, mujeres, alcohol y tabaco.

Sin embargo, fue el primero en enseñar a reír a la afición, pues jugaba para el deleite de la tribuna.

Su vida fue llevada al cine... La espectacular vida del "Chaplin del futbol" fue llevada a la pantalla grande en varias ocaciones, siendo la película estrenada en 2003. "Estrella solitaria" la más popular de ellas. Esta producción estaba basada a su vez en el libro que llevaba el mismo nombre, escrito por el reconocido periodista brasileño, Ruy Castro... "Alegría del pueblo", "Ala blanca" y "Un sueño brasileño", son otras cintas en donde incluso el futbolista participó como actor invitado... Respuestas a algunas entrevistas que le hicieron: "La diferencia que existió con respecto de Pelé, es que yo apenas pude driblar todos los problemas con los pies"... "Yo nunca leo las páginas deportivas de los periódicos, ni oigo lo que dicen de mí en la radio, me volvería totalmente loco"... "¿Para qué debería molestarme? soy un hombre completamente feliz. Yo vivo la vida, la vida no me vive a mí...

REBELDÍA TOTAL

Garrincha fue una especie de reflejo deforme de Pelé. Rebeldía contra ejemplaridad, humildad contra elegancia, locura frente a sobriedad... Nunca fueron amigos y, pese a sus características diametralmente opuestas, Edson siempre acaparó los reflectores. Muestra de ello es la primera vez que se vieron las caras, en 1956, cuando el Santos de Pelé, le ganó al Botafogo de Garrincha en 1956, con cuatro anotaciones de Pelé que tenía entonces 16 años.

Antes de partir para Suecia en 1958, el Dr. Gosling advirtió a Vicente Feola, entrenador de la selección, que no aprobaba la estancia en la selección, ni de Edson Arantes do Nacimento "Pelé" por ser un niño enclenque que se asustaría con la tala de los gigantes suecos y rusos y, tampoco daba aprobación a Manuel Francisco dos Santos "Garrincha", porque era una piltrafa deforme, inútil para cualquier tipo de actividad física, que tenía los pies 80°girados hacia adentro y, su pierna derecha era seis centímetros más grande que la izquierda y por si fuera poco, tenía la columna vertebral torcida... A lo que Feola contestó... Mire, doctor, usted sabrá mucho de medicina, pero aquí, el que sabe de futbol soy yo y, el niño y la piltrafa subieron al avión y fueron la sensación del torneo.

TODO SE DERRUMBÓ

Es triste ver que como sucede a muchos de los genios de este deporte, que habiendo iniciado una exitosa carrera, después con malas costumbres, lejos de los terrenos de juego, lo echan todo a perder. Garrincha era adicto al tabaco desde los 10 años y sus problemas con el alcohol le c ostaron la vida... Ya lo decía el mismo al final, "Yo no vivo la vida, la vida me vive a mí".

Eduardo Galeno dijo de él... Alguno de sus hermanos le bautizó como Garrincha, que es un pájaro inútil y feo... Los médicos le hicieron la cruz, dijeron este anormal nunca será deportista. Este pobre resto del hombre y la poliomielitis, burro, cojo, con cerebro de niño, una columna hecha "S" y piernas torcidas para el mismo lado... Pero nunca hubo un puntero derecho como él.

En Suecia fue el mejor en su puesto y en Chile 62 fue el mejor de todos. Pero a lo largo de sus años, Garrincha fue mucho más que eso. Garrincha fue el hombre que dio más alegrías en toda la historia del futbol.

Hasta pronto amigo.