/ lunes 25 de mayo de 2020

Ocurrencias del futbol | Grandes de todos los tiempos

Bobby Charlton, Eusebio, Cruyff, Beckenbauer, Garrincha, DiStéfano, Puz-kas, "El Charro" Moreno, etc.

Hay algunas características que son comunes a los grandes del deporte y de la vida: integridad, sentido de la caballerosidad, espíritu indomable frente a la adversidad y, por sobre todo, un ansia inquebrantable de superación. En un capítulo anterior expresé mi opinión acerca de los mejores jugadores de todos los tiempos: Alfredo DiStéfano, Pelé, Diego Armando Maradona, Lionel Messi. Digo una vez más que creerse en la obligación de elegir a uno solo puede privarnos de la posibilidad de disfrutar de todos los grandes artistas del futbol, lo que se acerca mucho a un gesto mezquino.

Más alla de su nacionalidad y de la casaca que hayan vestido, hubo jugadores que dejaron su impronta en la historia del futbol, marcaron una época y ahora son referentes ineludibles a la hora de tomar ejemplos de lo que se debe hacer dentro del campo de juego.

LOS MUNDIALISTAS

Por lo general, a los que más recordamos son aquellos que tuvieron la suerte de jugar en uno o más mundiales, o se destacaron en competencias internacionales. El futbol, así como todos los deportes colectivos, es construido fecha tras fecha por hombres y mujeres que transpiran la camiseta. No todos ganan grandes salarios ni pueden entrenar en condiciones óptimas pero ahí están. En la cumbre sobresalen algunos, por un motivo u otro, pero si no fuera por el esfuerzo cotidiano de esos héroes anónimos no habría pirámide alguna.

GENTO Y CHARLTON

Francisco Gento y Bobby Charlton, jugadores con gran presencia dentro del campo de juego y con una peculiar característica que habla de su condición humana: jamás los he visto fuera de los campos sin la compañía de sus respectivas esposas. Paco Gento perteneció a aquel Real Madrid que ganara cinco "Orejonas" (Champions League) de manera consecutiva, convirtiéndose así en el único futbolista que ha ganado seis orejonas; he de recordarles que aquel equipo merengue, tan pronto ganó las cinco orejonas, ganó cinco Ligas también de forma consecutiva. Paco era una total contradicción, de cuerpo rechoncho (con sobrepeso), pero se caracterizaba por sus veloces carreras por la banda izquierda.

Bobby Charlton, nadie como este gran futbolista para caracterizar la imagen del sólido jugador de mentalidad inglesa, ese hombre era sin duda alguna Bobby Charlton. Fue la esperanza del futbol inglés en la década de los sesenta, un wing izquierdo convertido en centro delantero retrasado, capaz de manejar a un equipo con mucho juego de ida y vuelta por todo el campo. Su dinámica arrolladora terminaba por demoler a los adversarios. Con total naturalidad, Charlton se convirtió en un jugador todoterreno, el pequeño genio.

FIELES A UN CLUB

Muchos grandes jugadores del pasado desarrollaron toda su carrera en un solo club. No sé si esto tendrá una relación con la imagen de éxito sólido que nos dejaron; eran otros tiempos, la feria y fiebre de pases era incipiente. Pero seguramente dice mucho de la forma en que el club trata al jugador.

¡Cuántos jugadores en la historia no llegaron a brillar como merecían por culpa de la conducción desaprensiva de dirigentes que solo pensaron en su lucimiento personal y no tuvieron en cuenta que al futbol lo hacen los jugadores! Tratar bien a un futbolista y proveerle las condiciones necesarias para que despliegue su talento, hará que este desarrolle aún más. Bobby Charlton ganó notoriedad en el Manchester United, a donde llegó tras ser descubierto por Joe Armstrong. El mánager Matt Busby lo llevó a la primera división en la temporada 56-57.

LA CATÁSTROFE DE MÚNICH

Otra curiosidad es que algunos grandes jugadores lograron superar momentos de mucha dificultad. Cuando recieén empezaba a brillar, el destino asaltó a Charlton con un hecho trágico, conocido como la "Catástrofe de Múnich", el 6 de febrero de 1958, el Manchester United hizo escala en la ciudad alemana de regreso a Inglaterra después de haber jugado en Belgrado contra el Estrella Roja, en un partido por los cuartos de final de la Copa de Europa.

La acumulación de hielo en las alas del avión hizo que en su despegue no ganara altura y se estrellase contra las copas de unos árboles cerca de la pista. Fallecieron 23 personas, entre ellas 8 jugadores y 2 directivos, además varios periodistas. Entre los sobrevivientes se encontraban el jovencito Bobby Charlton y el entrenador Matt Busby, que más tarde, con Bobby como conductor del juego, conquistaran la Copa de Europa, venciendo al Benfica de Eusebio con dos goles de Bobby Charlton.

EL GRAN MILAGRO

De aquella trágica y amarga experiencia, Bobby fue sujeto de un extraordinario suceso. Entre las ruinas de aquel avión no apareció el cuerpo de Bobby. Con el tremendo impacto del avión, el asiento que ocupaba el jugador fue arrancado de su lugar, apareciendo a veinticinco metros de distancia, con el jugador aún sujeto por el cinturón de seguridad. Bobby se encontraba descalzo y sus zapatos no aparecieron por ningún lado... 8 años después, en 1966, Bobby se coronó con la selección de Inglaterra como Campeón del Mundo.

Bobby Charlton, Eusebio, Cruyff, Beckenbauer, Garrincha, DiStéfano, Puz-kas, "El Charro" Moreno, etc.

Hay algunas características que son comunes a los grandes del deporte y de la vida: integridad, sentido de la caballerosidad, espíritu indomable frente a la adversidad y, por sobre todo, un ansia inquebrantable de superación. En un capítulo anterior expresé mi opinión acerca de los mejores jugadores de todos los tiempos: Alfredo DiStéfano, Pelé, Diego Armando Maradona, Lionel Messi. Digo una vez más que creerse en la obligación de elegir a uno solo puede privarnos de la posibilidad de disfrutar de todos los grandes artistas del futbol, lo que se acerca mucho a un gesto mezquino.

Más alla de su nacionalidad y de la casaca que hayan vestido, hubo jugadores que dejaron su impronta en la historia del futbol, marcaron una época y ahora son referentes ineludibles a la hora de tomar ejemplos de lo que se debe hacer dentro del campo de juego.

LOS MUNDIALISTAS

Por lo general, a los que más recordamos son aquellos que tuvieron la suerte de jugar en uno o más mundiales, o se destacaron en competencias internacionales. El futbol, así como todos los deportes colectivos, es construido fecha tras fecha por hombres y mujeres que transpiran la camiseta. No todos ganan grandes salarios ni pueden entrenar en condiciones óptimas pero ahí están. En la cumbre sobresalen algunos, por un motivo u otro, pero si no fuera por el esfuerzo cotidiano de esos héroes anónimos no habría pirámide alguna.

GENTO Y CHARLTON

Francisco Gento y Bobby Charlton, jugadores con gran presencia dentro del campo de juego y con una peculiar característica que habla de su condición humana: jamás los he visto fuera de los campos sin la compañía de sus respectivas esposas. Paco Gento perteneció a aquel Real Madrid que ganara cinco "Orejonas" (Champions League) de manera consecutiva, convirtiéndose así en el único futbolista que ha ganado seis orejonas; he de recordarles que aquel equipo merengue, tan pronto ganó las cinco orejonas, ganó cinco Ligas también de forma consecutiva. Paco era una total contradicción, de cuerpo rechoncho (con sobrepeso), pero se caracterizaba por sus veloces carreras por la banda izquierda.

Bobby Charlton, nadie como este gran futbolista para caracterizar la imagen del sólido jugador de mentalidad inglesa, ese hombre era sin duda alguna Bobby Charlton. Fue la esperanza del futbol inglés en la década de los sesenta, un wing izquierdo convertido en centro delantero retrasado, capaz de manejar a un equipo con mucho juego de ida y vuelta por todo el campo. Su dinámica arrolladora terminaba por demoler a los adversarios. Con total naturalidad, Charlton se convirtió en un jugador todoterreno, el pequeño genio.

FIELES A UN CLUB

Muchos grandes jugadores del pasado desarrollaron toda su carrera en un solo club. No sé si esto tendrá una relación con la imagen de éxito sólido que nos dejaron; eran otros tiempos, la feria y fiebre de pases era incipiente. Pero seguramente dice mucho de la forma en que el club trata al jugador.

¡Cuántos jugadores en la historia no llegaron a brillar como merecían por culpa de la conducción desaprensiva de dirigentes que solo pensaron en su lucimiento personal y no tuvieron en cuenta que al futbol lo hacen los jugadores! Tratar bien a un futbolista y proveerle las condiciones necesarias para que despliegue su talento, hará que este desarrolle aún más. Bobby Charlton ganó notoriedad en el Manchester United, a donde llegó tras ser descubierto por Joe Armstrong. El mánager Matt Busby lo llevó a la primera división en la temporada 56-57.

LA CATÁSTROFE DE MÚNICH

Otra curiosidad es que algunos grandes jugadores lograron superar momentos de mucha dificultad. Cuando recieén empezaba a brillar, el destino asaltó a Charlton con un hecho trágico, conocido como la "Catástrofe de Múnich", el 6 de febrero de 1958, el Manchester United hizo escala en la ciudad alemana de regreso a Inglaterra después de haber jugado en Belgrado contra el Estrella Roja, en un partido por los cuartos de final de la Copa de Europa.

La acumulación de hielo en las alas del avión hizo que en su despegue no ganara altura y se estrellase contra las copas de unos árboles cerca de la pista. Fallecieron 23 personas, entre ellas 8 jugadores y 2 directivos, además varios periodistas. Entre los sobrevivientes se encontraban el jovencito Bobby Charlton y el entrenador Matt Busby, que más tarde, con Bobby como conductor del juego, conquistaran la Copa de Europa, venciendo al Benfica de Eusebio con dos goles de Bobby Charlton.

EL GRAN MILAGRO

De aquella trágica y amarga experiencia, Bobby fue sujeto de un extraordinario suceso. Entre las ruinas de aquel avión no apareció el cuerpo de Bobby. Con el tremendo impacto del avión, el asiento que ocupaba el jugador fue arrancado de su lugar, apareciendo a veinticinco metros de distancia, con el jugador aún sujeto por el cinturón de seguridad. Bobby se encontraba descalzo y sus zapatos no aparecieron por ningún lado... 8 años después, en 1966, Bobby se coronó con la selección de Inglaterra como Campeón del Mundo.