/ sábado 14 de noviembre de 2020

Ocurrencias del futbol | La calidad no es un accidente, siempre es el resultado de un esfuerzo de la inteligencia

La columna vertebral: Tan importante como es la espina dorsal para nuestro cuerpo, lo es también para el buen funcionamiento y equilibrio de un equipo de futbol e igual que nuestra columna vertebral, que inicia en la base de nuestro cráneo, hasta el coxis, la de nuestra alineación inicia con el portero, pasando por la defensa central, después el centro medio y adelante el centro delantero.

El sentido del equilibrio es fundamental en el futbol, desde el punto de vista del jugador como del conjunto. En este último aspecto se dice que un equipo está equilibrado cuando tiene los jugadores capacitados para cada uno de los puestos. Pero para alcanzar ese equilibrio, previamente hay que consolidar el armazón, hay que definir la columna vertebral.

Y esta no es más que la línea que une la portería propia con la punta del ataque, pasando por la defensa y el centro del campo. Son cuatro puntos de apoyo, cuatro ejes, sobre los que giran todas las evoluciones del equipo y, en consecuencia, se hace fundamental poseer en cada uno de ellos los elementos adecuados. En otras palabras, el equipo que logre cubrir con garantías la portería, el eje de la cobertura, el centro de la medular y la punta del ataque, lo tiene casi todo ganado.

Si Brasil reunió en México uno de los mejores ataques de todos los tiempos, Alemania contó en la Eurocopa de 1972 con la mejor columna vertebral y, esto es lo que hace a los germanos, ejemplo a la hora de dirigirnos a nuestros alumnos, cuando les hablamos de futbol. En aquel tiempo, Alemania alineaba con Sepp Maier en la puerta, seguro, dominador, casi infranqueable. En el eje de la cobertura estaba Franz Bekenbauer, uno de los grandes jugadores de todos los tiempos. En el centro del campo Günter Netzer, uno de los mejores organizadores del momento. Y arriba con el gatillo siempre a punto, Gerd Müller. Una columna vertebral que mandó en el futbol europeo y mundial, tanto a nivel club como de selección.

Si comparamos a esta columna vertebral alemana de los años 70, notaremos que la idea ha prevalecido, hoy el equilibrio del futbol germano se establece en Manuel Neuer, por largo tiempo considerado el mejor portero del mundo. En la defensa central Robin Koch, con Leon Goretzka en el centro del campo y Marco Reus como ariete. Como pueden ver, solamente cambian los nombres y, aunque las estrategias sean diferentes, la función de la columna vertebral siempre es la misma.

El Juego sin balón: Dentro del juego sin balón hay que diferenciar, en principio, entre la actitud en defensa y la actitud en ataque. El primer caso, como es lógico, el oponente controla el balón. Por tanto se trata de cerrarle el paso para que no pueda evolucionar y quedar a la espera de arrebatárselo. Es una labor de marcaje a los elementos del adversario, que se puede llevar a cabo por zonas o individualmente. En el marcaje por zonas cada jugador se mantiene en su demarcación teórica y vigila al adversario que entra en su parcela, sea quien sea.

Para defenderse así la coordinación debe ser milimétrica y el esfuerzo común absoluto, puesto que un mínimo descuido crea un espacio libre para la penetración del oponente. Este sistema obliga al jugador a multiplicarse constantemente y a no entrar de golpe al adversario que tiene controlado el balón, pues corre el riesgo de ser sorteado. Se trata en suma, de ir cerrando espacios para obligar al contario a que pase el balón ante la imposibilidad de intentar la penetración individual y así, en un momento dado, tratar de interceptarlo.

El marcaje por zonas de hecho, es el mejor sistema defensivo para un rápido despliegue ofensivo cuando se ha conseguido hacerse con el control de la pelota. Sin embargo, para su perfecta realización es imprescindible poseer una notable técnica. Porque no se entra de golpe al contrario, salvo en situaciones desesperadas o muy claras, sino que se juega a molestarle a distancia, forzándole a intentar por el terreno que más nos conviene, procurando adivinarle la intención, rodearlo y robarle el balón.

Para esto nos valemos del principio de la táctica de la defensa. Retardar, que consiste en enfrentar al contrario, no para quitarle el balón, sino para evitar que avance o que pase hacia adelante. el segundo movimiento es integrarse. Cuan do se realizó la retardación, esperamos el auxilio de algún compañero o sea, integrarse. Se establece el dos contra uno y entonces se procede a quitar el balón. Mañana les hablaré del marcaje personal.

Finalmente se llegó la fecha para que entre en acción nuestro TRI, del que nos han adelantado la posible alineación, que es: Guillermo Ochoa, Luis Rodríguez, Carlos Salcedo, Héctor Moreno, Jesús Gallardo, Charli Rodríguez, Edson Álvarez, Héctor Herrera o Sebastian Córdova, Jesús Manuel Corona, Raúl Jiménez, Hirving Lozano. Hay una duda en la alineación de Héctor Herrera, que viene de una lesión no grave, pero hasta hoy decidirán si puede jugar.

Hasta pronto amigo.

La columna vertebral: Tan importante como es la espina dorsal para nuestro cuerpo, lo es también para el buen funcionamiento y equilibrio de un equipo de futbol e igual que nuestra columna vertebral, que inicia en la base de nuestro cráneo, hasta el coxis, la de nuestra alineación inicia con el portero, pasando por la defensa central, después el centro medio y adelante el centro delantero.

El sentido del equilibrio es fundamental en el futbol, desde el punto de vista del jugador como del conjunto. En este último aspecto se dice que un equipo está equilibrado cuando tiene los jugadores capacitados para cada uno de los puestos. Pero para alcanzar ese equilibrio, previamente hay que consolidar el armazón, hay que definir la columna vertebral.

Y esta no es más que la línea que une la portería propia con la punta del ataque, pasando por la defensa y el centro del campo. Son cuatro puntos de apoyo, cuatro ejes, sobre los que giran todas las evoluciones del equipo y, en consecuencia, se hace fundamental poseer en cada uno de ellos los elementos adecuados. En otras palabras, el equipo que logre cubrir con garantías la portería, el eje de la cobertura, el centro de la medular y la punta del ataque, lo tiene casi todo ganado.

Si Brasil reunió en México uno de los mejores ataques de todos los tiempos, Alemania contó en la Eurocopa de 1972 con la mejor columna vertebral y, esto es lo que hace a los germanos, ejemplo a la hora de dirigirnos a nuestros alumnos, cuando les hablamos de futbol. En aquel tiempo, Alemania alineaba con Sepp Maier en la puerta, seguro, dominador, casi infranqueable. En el eje de la cobertura estaba Franz Bekenbauer, uno de los grandes jugadores de todos los tiempos. En el centro del campo Günter Netzer, uno de los mejores organizadores del momento. Y arriba con el gatillo siempre a punto, Gerd Müller. Una columna vertebral que mandó en el futbol europeo y mundial, tanto a nivel club como de selección.

Si comparamos a esta columna vertebral alemana de los años 70, notaremos que la idea ha prevalecido, hoy el equilibrio del futbol germano se establece en Manuel Neuer, por largo tiempo considerado el mejor portero del mundo. En la defensa central Robin Koch, con Leon Goretzka en el centro del campo y Marco Reus como ariete. Como pueden ver, solamente cambian los nombres y, aunque las estrategias sean diferentes, la función de la columna vertebral siempre es la misma.

El Juego sin balón: Dentro del juego sin balón hay que diferenciar, en principio, entre la actitud en defensa y la actitud en ataque. El primer caso, como es lógico, el oponente controla el balón. Por tanto se trata de cerrarle el paso para que no pueda evolucionar y quedar a la espera de arrebatárselo. Es una labor de marcaje a los elementos del adversario, que se puede llevar a cabo por zonas o individualmente. En el marcaje por zonas cada jugador se mantiene en su demarcación teórica y vigila al adversario que entra en su parcela, sea quien sea.

Para defenderse así la coordinación debe ser milimétrica y el esfuerzo común absoluto, puesto que un mínimo descuido crea un espacio libre para la penetración del oponente. Este sistema obliga al jugador a multiplicarse constantemente y a no entrar de golpe al adversario que tiene controlado el balón, pues corre el riesgo de ser sorteado. Se trata en suma, de ir cerrando espacios para obligar al contario a que pase el balón ante la imposibilidad de intentar la penetración individual y así, en un momento dado, tratar de interceptarlo.

El marcaje por zonas de hecho, es el mejor sistema defensivo para un rápido despliegue ofensivo cuando se ha conseguido hacerse con el control de la pelota. Sin embargo, para su perfecta realización es imprescindible poseer una notable técnica. Porque no se entra de golpe al contrario, salvo en situaciones desesperadas o muy claras, sino que se juega a molestarle a distancia, forzándole a intentar por el terreno que más nos conviene, procurando adivinarle la intención, rodearlo y robarle el balón.

Para esto nos valemos del principio de la táctica de la defensa. Retardar, que consiste en enfrentar al contrario, no para quitarle el balón, sino para evitar que avance o que pase hacia adelante. el segundo movimiento es integrarse. Cuan do se realizó la retardación, esperamos el auxilio de algún compañero o sea, integrarse. Se establece el dos contra uno y entonces se procede a quitar el balón. Mañana les hablaré del marcaje personal.

Finalmente se llegó la fecha para que entre en acción nuestro TRI, del que nos han adelantado la posible alineación, que es: Guillermo Ochoa, Luis Rodríguez, Carlos Salcedo, Héctor Moreno, Jesús Gallardo, Charli Rodríguez, Edson Álvarez, Héctor Herrera o Sebastian Córdova, Jesús Manuel Corona, Raúl Jiménez, Hirving Lozano. Hay una duda en la alineación de Héctor Herrera, que viene de una lesión no grave, pero hasta hoy decidirán si puede jugar.

Hasta pronto amigo.