El aprendizaje es un proceso que lleva toda la vida. Los maestros que saben guiar el talento y la vocación marcan la conducta en todas las etapas.
Controlar el temperamento, tener claras las metas, jugar con y para el equipo, auspician los mejores resultados. Pelé relata acerca de su historia, "No es por azar que decidí empezar mi libro contando el valor íntimo que tuvo para mí el título que obtuve con la selección de Brasil en 1958. En el mismo momento que nacía la leyenda pública de Pelé, mis pensamientos se dirigían a Dondinho. Y en los años que siguieron, cuando la reputación del Rey iba creciendo, las enseñanzas de mi padre se quedaron conmigo.
Infinidad de veces me han preguntado: Pelé, ¿cuál fue la figura más decisiva en tu carrera?, quienes conoce mi historia piensan automáticamente en Waldemar de Brito, mi descubridor, ya hablaré de la importancia de Waldemar. Pero si tengo que elegir una figura, una sola, esa persona es mi padre. Se llamaba Joao Ramos do Nacimiento, era jugador profesional, todos lo conocían como Dondinho. Aquella vocación era su bendición, pero también era motivo de constantes discusiones con mi madre,
Por aquellos días dedicarse al futbol profesional, sobre todo en un equipo chico como el de Tres Corazones, no proporcionaba precisamente comodidad económica. Dondinho lo sabía y mamá se encargaba de recordárselo a cada rato. El sueldo era ínfimo y no existían premios ni primas para aumentar los ingresos. Así y todo, el futbol era la pasión de Dondinho y, a él se entregó de lleno. Nunca debe subestimarse el poder de una pasión. En mi padre este consejo resultaba visible.
Tanto quiere el diablo a su hijo, que acaba haciéndole daño. ¿Cuántos padres no hemos soñado a nuestros hijos cumpliendo el sueño que en nuestra vida no fue posible?. Su primer partido con el Atlético Mineiro fue contra Sao Cristovao de Río de Janeiro, en una jugada desafortunada Dondinho chocó violentamente contra Augusto, el mismo que luego jugaría con el Vasco da Gama y la Selección de 1950. Dondinho quedó tendido retorciéndose de dolor. En el vestuario recibió el peor de los diagnósticos, rotura de ligamentos de la rodilla derecha. Ya no tuvo un segundo partido.
Volvió rendido y rengueando a Tres Corazones. Aquello era de por sí un infierno y encima mi madre no ayudaba con sus reproches, podía más su disgusto que su comprensión -¿Qué va a ser de nosotros ahora?- Protestaba doña Celeste- Si cuando podías jugar no ganabas para comer, ahora... Olvídate de esa locura del futbol y busca un empleo como la gente.
Sin embargo, el duro golpe no apaciguó el poder de la pasión y mi padre siguió. Yo era muy pequeño y mis recuerdos son difusos. Por algún tiempo anduvimos de acá para allá siguiendo los avatares de la carrera de Dondinho, hasta que recalamos en Baurú.
Un club le ofrecía un puesto y a la vez un empleo en el hospital público para incrementar sus ingresos. Mi madre no quería saber nada conque jugara en el equipo, pero en cuanto oyó lo del empleo reinó la paz. Era lo que siempre había esperado desde su casamiento. Mi padre también estaba contento, podría cultivar su pasión y al mismo tiempo sostener a su familia. La lesión truncó su sueño de crack, pero no acabó con su carrera profesional".
¿Cuántos padres no hemos pasado por la misma situación de Dondinho?. Recuerdo cómo tres amigos, entre los que se encontraba Chema del Olmo, que para que nuestros hijos viajaran a donde la selección fuera era requisito de nuestras esposas que nosotros los acompañáramos y como no era posible que nosotros fuéramos en el mismo autobús, nos íbamos en mi carro a la ciudad en donde jugarían. De tres uno. No está mal, desde aquel tiempo, Joaquín del Olmo estaba seguro de que sería un crack e incluía en sus supuestas alineaciones a sus hermanos Pepe y Chema, que también eran grandes jugadores, pero que no tuvieron la convicción de Joaquín.
El futbol es sinónimo de vida, la vida es caprichosa y lo único que podemos hacer es aceptarla. Pelé nunca soñó ser lo que ha sido, pero al ver a su padre destrozado en la derrota de Brasil ante Paraguay en 1950, con una reacción pueril consoló a su padre prometiéndole que cuando fuera jugador iba a ganar la Copa del Mundo para que él fuera feliz y la vida quiso que ganara tres. Esta es la única interpretación que podemos dar a lo bueno y a lo malo que nos ocurre.
Hagas lo que hagas, feliz o triste, a la vida no le conmueve nada y todo será como ella lo decida, por eso, como reza la filosofía de lo "Absurdo" de Albert Camus, la vida solo sirve para vivirla, Dondinho no fue un Crack, pero Pelé su hijo lo fue por los dos, por qué derrumbarse por una derrota, si te levantas tendrás otra oportunidad para triunfar y si vuelves a caer, te vuelves levantar, recuerda, "Canta y no llores".
Continúa el futbol en la MX, vamos a disfrutarlo y para que lo gocen más no lo anden comparando, ya lograremos algún día igualarnos a los europeos y los suramericanos, soñemos con eso, pensemos en eso, tengan presente que las leyes de la atracción nos convierten en un imán que atrae lo que estamos pensando, así que pensemos positivamente.
Hasta pronto amigo.
