/ miércoles 12 de agosto de 2020

Ocurrencias del Futbol | La maquinaria de un jugador de fama. Jiménez ahora tendrá que decidir

Como diría Cantinflas, ¡pero qué precipitosos son estos directivos mexica-nos!... Sobre todo, los más mexicanos de México, los dogmáticos Chivas de Guadalajara, de quienes está prohibido hablar mal, so pena de anatema... ¿Por qué son buenos las Chivas?... pues porque lo digo yo.¿Y?... Apenas encendí la TV y hasta Hugo Gatell con su informe diario sobre la pandemia pasó a segundo término, la noticia importante era la salida del flaco Luis Fernando Tena, quien no supo dirigir a la maravilla de jugadores que, aunque son mucho más caros (costaron 50 millones de dólares), y según ellos mismos ganarían la Champions League caminando. Los canteranos maravillosos, Sepúlveda, Beltrán, Ángulo y la Chofisiban a acabar con el cuadro y el guepardo Antuna, semejante Ruffo Coyote iba a quemar el pasto con su velocidad, pero que llega Tena, que lo más que ha ganado es una medalla de oro olímpica, para que en tres larguísimos partidos no haya podido hacer nada con estas joyas del futbol.

Y para mala suerte, mira nada más, el Covid-19 no solo le descompuso a algunos de sus jugadores, sino que hasta le tocó a él mismo y, en el colmo, aún de los tres cochinitos le ha afectado que los lobos del micrófono le digan que no corre porque está gordito, lo que lo ha puesto muy triste, con-solándose con cuatro tortas ahogadas... Y ahora, ¿quién podrá defenderlos?... ¡Víctor Manuel Vucetich!, que a peores casas les ha tapado las goteras, allanado las paredes y aplanado las baldo-sas... Ojalá, ojalá... Ya lo hemos visto con toda clase de equipos y en todos ha dejado complacida ala afición, peeeeero... ¿Qué hará con Peláez? Recordemos que al que quiere Peladez es a Diego Alonso y que no sabemos si los jugadores contratados por Peláez son del gusto de Vuce.

Interesado por lo que ocurre con Raúl Jiménez, me he saltado hasta Sevilla para ver las acciones entre los sevillanos y el Wolverhampton. No siempre se muere un burro del mismo color, frase muy campirana de los mexicanos, Jiménez que había cobrado cinco tiros de penal consecutivos sin errar uno solo, hoy ha realizado la finta correctamente, pero su golpeo ha quedado más cerca del arquero que del poste, lo que le ha permitido detenerlo. Lástima, apenas iban 9 minutos jugados y el gol hubiera sido el táctico que les hu-biera permitido manejar el partido.

Sin embargo, el planteamiento defensivo de Nuno Spirito Santo ha complicado mucho el accionar ofensivo sevillano, al grado de completarlos primeros 45 minutos sin que los lobos sufrieran de algún agobio. El problema de estos ingleseses que sus contrarios tienen bien claro que sola-mente han de preocuparse por dos atacantes, Adama Traoré por el lado derecho y Raúl Jiménez por toda la zona de riesgo, y hoy el equipo español ha sabido cortar esa conexión.

Para la segunda parte, prevaleció la misma tónica, cada nuevo avance de cualquiera de los dos equipos era una calca de la jugada anterior, todas las acciones eran calculadas al máximo y no podemos culpar de ello a los directores técnicos, simplemente es la reacción al condicionamiento de la competencia, el juego es a un solo partido, sise pierde este ya no hay otro, de ahí que nadie quiera equivocarse pues ya no habrá otra oportunidad.

El Sevilla, claramente superior al Wol-verhampton, solo basta con comparar las plantillas de ambos equipos, para notar de inmediato la diferencia. Basa su futbol en un juego colectivo de pases cortos y al pie, en el que participan los once jugadores, mientras que el Wolverhampton tiene en punta a Adama Traore y a Raúl Jiménez, el primero realizando frecuentes carreras largas y luchando siempre contra las cerradas marcaciones de las que es objeto por parte de sus rivales, debido a su formidable fuerza de carrera, generando un muy elevado porcentaje de finalizaciones, siendo su único receptor Raúl Jiménez.

La otra punta del ataque es Raúl Jiménez, generalmente solitario y de espaldas a la portería, que no solamente realiza la tarea de buscar los balones, controlarlos o rematarlos, sino que, como ninguno de sus compañeros lo hace, baja has-ta su zona de riesgo para realizar cobertura, sien-do el que más balones despeja en los tiros de es-quina sobre su portería. El gran mérito del trabajo de Traoré y de Raúl es el alto porcentaje de culminación de jugadas, a pesar de que los contrarios saben que esa es la única llave del Wolverhamp-ton que hay que desconectar. Generalmente,Nuno Spirito Santo acostumbra cambiar en las segundas partes a Traoré, ya que como es sabido, no se puede ser veloz y resistente al mismo tiempo, así cuando el español se cansa, lo cambia por Diogo Jota, jugador portugués de condiciones totalmente distintas a las del español, pero que no impiden que comunique bien con Raúl, que no so-lo es un buen rematador, sino también virtuoso del juego corto y al pie, que es lo que ofrece Diogo.


De esa forma, hoy, Raúl no encontró apoyo efectivo ni con sus compañeros, que fueron bien marcados, ni consigo mismo cuando erró el tiro penal, que extrañamente hoy tiró muy suave y cerca del alcance del portero. Ahora, ya eliminados, lo bueno para Raúl es que ya puede libremente atender su cambio de equipo. Los mismos comentaristas ingleses y españoles le aconsejan que lo ideal es permanecer en Inglaterra, ya sea con el Man-U o con el Arsenal, que son los equipos que se han interesado por él.Pensar en Italia (Juventus), es volver a iniciar en un futbol distinto.

Hasta pronto amigo.


Como diría Cantinflas, ¡pero qué precipitosos son estos directivos mexica-nos!... Sobre todo, los más mexicanos de México, los dogmáticos Chivas de Guadalajara, de quienes está prohibido hablar mal, so pena de anatema... ¿Por qué son buenos las Chivas?... pues porque lo digo yo.¿Y?... Apenas encendí la TV y hasta Hugo Gatell con su informe diario sobre la pandemia pasó a segundo término, la noticia importante era la salida del flaco Luis Fernando Tena, quien no supo dirigir a la maravilla de jugadores que, aunque son mucho más caros (costaron 50 millones de dólares), y según ellos mismos ganarían la Champions League caminando. Los canteranos maravillosos, Sepúlveda, Beltrán, Ángulo y la Chofisiban a acabar con el cuadro y el guepardo Antuna, semejante Ruffo Coyote iba a quemar el pasto con su velocidad, pero que llega Tena, que lo más que ha ganado es una medalla de oro olímpica, para que en tres larguísimos partidos no haya podido hacer nada con estas joyas del futbol.

Y para mala suerte, mira nada más, el Covid-19 no solo le descompuso a algunos de sus jugadores, sino que hasta le tocó a él mismo y, en el colmo, aún de los tres cochinitos le ha afectado que los lobos del micrófono le digan que no corre porque está gordito, lo que lo ha puesto muy triste, con-solándose con cuatro tortas ahogadas... Y ahora, ¿quién podrá defenderlos?... ¡Víctor Manuel Vucetich!, que a peores casas les ha tapado las goteras, allanado las paredes y aplanado las baldo-sas... Ojalá, ojalá... Ya lo hemos visto con toda clase de equipos y en todos ha dejado complacida ala afición, peeeeero... ¿Qué hará con Peláez? Recordemos que al que quiere Peladez es a Diego Alonso y que no sabemos si los jugadores contratados por Peláez son del gusto de Vuce.

Interesado por lo que ocurre con Raúl Jiménez, me he saltado hasta Sevilla para ver las acciones entre los sevillanos y el Wolverhampton. No siempre se muere un burro del mismo color, frase muy campirana de los mexicanos, Jiménez que había cobrado cinco tiros de penal consecutivos sin errar uno solo, hoy ha realizado la finta correctamente, pero su golpeo ha quedado más cerca del arquero que del poste, lo que le ha permitido detenerlo. Lástima, apenas iban 9 minutos jugados y el gol hubiera sido el táctico que les hu-biera permitido manejar el partido.

Sin embargo, el planteamiento defensivo de Nuno Spirito Santo ha complicado mucho el accionar ofensivo sevillano, al grado de completarlos primeros 45 minutos sin que los lobos sufrieran de algún agobio. El problema de estos ingleseses que sus contrarios tienen bien claro que sola-mente han de preocuparse por dos atacantes, Adama Traoré por el lado derecho y Raúl Jiménez por toda la zona de riesgo, y hoy el equipo español ha sabido cortar esa conexión.

Para la segunda parte, prevaleció la misma tónica, cada nuevo avance de cualquiera de los dos equipos era una calca de la jugada anterior, todas las acciones eran calculadas al máximo y no podemos culpar de ello a los directores técnicos, simplemente es la reacción al condicionamiento de la competencia, el juego es a un solo partido, sise pierde este ya no hay otro, de ahí que nadie quiera equivocarse pues ya no habrá otra oportunidad.

El Sevilla, claramente superior al Wol-verhampton, solo basta con comparar las plantillas de ambos equipos, para notar de inmediato la diferencia. Basa su futbol en un juego colectivo de pases cortos y al pie, en el que participan los once jugadores, mientras que el Wolverhampton tiene en punta a Adama Traore y a Raúl Jiménez, el primero realizando frecuentes carreras largas y luchando siempre contra las cerradas marcaciones de las que es objeto por parte de sus rivales, debido a su formidable fuerza de carrera, generando un muy elevado porcentaje de finalizaciones, siendo su único receptor Raúl Jiménez.

La otra punta del ataque es Raúl Jiménez, generalmente solitario y de espaldas a la portería, que no solamente realiza la tarea de buscar los balones, controlarlos o rematarlos, sino que, como ninguno de sus compañeros lo hace, baja has-ta su zona de riesgo para realizar cobertura, sien-do el que más balones despeja en los tiros de es-quina sobre su portería. El gran mérito del trabajo de Traoré y de Raúl es el alto porcentaje de culminación de jugadas, a pesar de que los contrarios saben que esa es la única llave del Wolverhamp-ton que hay que desconectar. Generalmente,Nuno Spirito Santo acostumbra cambiar en las segundas partes a Traoré, ya que como es sabido, no se puede ser veloz y resistente al mismo tiempo, así cuando el español se cansa, lo cambia por Diogo Jota, jugador portugués de condiciones totalmente distintas a las del español, pero que no impiden que comunique bien con Raúl, que no so-lo es un buen rematador, sino también virtuoso del juego corto y al pie, que es lo que ofrece Diogo.


De esa forma, hoy, Raúl no encontró apoyo efectivo ni con sus compañeros, que fueron bien marcados, ni consigo mismo cuando erró el tiro penal, que extrañamente hoy tiró muy suave y cerca del alcance del portero. Ahora, ya eliminados, lo bueno para Raúl es que ya puede libremente atender su cambio de equipo. Los mismos comentaristas ingleses y españoles le aconsejan que lo ideal es permanecer en Inglaterra, ya sea con el Man-U o con el Arsenal, que son los equipos que se han interesado por él.Pensar en Italia (Juventus), es volver a iniciar en un futbol distinto.

Hasta pronto amigo.