/ martes 23 de noviembre de 2021

Ocurrencias del futbol | Sorpresa, por fin Monterrey encontró la portería

Bonito, excitante y eficaz. Mucho he comentado acerca de lo contradictorios que son, tanto el Monterrey, como el Guadalajara, que realizando por costumbre un juego bonito, no les alcanza para ponerle la cereza al pastel, el gol, que como lo dijera Albert Camus, es el poema del futbol y, el goleador, el poeta, y, los goleadores de estos equipos, hace ya un buen de tiempo que habían enmudecido.

Así, el Monterrey volvió a ser el equipo que juega bonito, pero con la diferencia de que Rogelio Funes Mori, su goleador, rompió su largo ayuno de goles apuntándose en este partido con dos de muy buena factura.

Pero, ¿quién entiende bien al futbol mexicano? el equipo mágico de los extremos inexplicables, en los que nos sorprende con demostraciones de un futbol mágico cuyo poder invisible como la electricidad arrasa con sus rivales que nada pueden contra lo que no se ve, con un "Cabecita" incontenible al que en un año le creció tanto la cabeza que su peso le ha restado tanta velocidad, que parece ser otro distinto y no el que fue considerado mejor jugador del pasado torneo.

¿Pero acaso es el único que bajó su rendimiento? Julio Domínguez, que finalmente había conseguido ser incluido en la Selección, contrinúa en este momento buscando a Funes Mori, que se les perdió de vista, para aparecer dos veces más solo que el polo sur.

¿A quién correspondía marcar al mellizo? pues al "Cata" Domínguez, que después de esta pobre exhibición su nueva convocatoria al Tri seguramente que resultará muy complicada.

El peruano Yotún parece encontrarse en campaña por adueñarse del liderato del equipo, el joven habla más con los árbitros que con sus compañeros, produciéndose una desatención total del juego, anulándose la efectividad que no hace mucho era la garantía del buen funcionamiento de la máquina.

A eso agréguenle lo ficticio, lo irreal, aquello que los comentaristas quieren que veamos, que el "Bebote" Giménez es un verdadero dolor de muelas para los defensores rivales, lo que es totalmente falso. En un pésimo año en materia de producción de goles (la peor en este tipo de competencia), encontramos al uruguayo Nicolás López y al argentino Germán Berterame empatados en el primer lugar con 9 tantos cada uno, en segundo lugar Camilo Sanvezzo con 8, tres jugadores más con 6, otros tres con 5 y después, Giménez junto a otros 14, con cuatro goles, marca que no le quita el sueño ni a un "bebito".

Así que el peso del equipo se va a los hombros de Jesús Corona, Pablo Aguilar (hoy ausente) Adrián Aldrete, Luis Romo (hoy ausente), Ignacio Rivero, Juan Escobar, Paul Fernández, Orbelín Pineda y Roberto Alvarado.

Menos de seis meses bastaron para que los príncipes se convirtieran en sapos. Y para colmo, a la princesa que los salvó de los veintidós años de ayuno hoy le falló la varita mágica que antes le fuera tan útil para liberar a la máquina del hechizo, cuando al cambiar a un maquinista por un garrotero salía ganando, ahora que dejó en la banca a los bueneros, supongo que para meterlos cuando los esparrings cansaran a los Rayados, saliéndole el tiro por la culata, pues los refrescos lucieron más cansados que los que iniciaron.

Total, la historia vuelve a repetirse como tantas veces lo hemos visto, en donde el Campeón cae presa del maldito síndrome de la "campeonitis", que resulta más dañino que el mismo Covid-19. Todo por no respetar los protocolos. Pienso que la solución en estos casos es el borrón y cuenta nueva, así que cada equipo que se corone debe liquidar a toda su plantilla y contratar a una sana, libre de todo contagio del maldito síndrome de la "campeonitis". Se recomienda usar cubreboca si van a ver jugar al Cruz Azul.

Uno no se puede explicar cómo es posible que contando con una línea media como la que usó el Monterrey contra el Cruz Azul: Carlos Rodríguez, Celso Ortiz y Arturo González "Ponchito", con Edson Álvarez en lugar del paraguayo Celso Ortiz y adelante de ellos Orbelín Pineda, no se pueda abastecer de balones a goleadores tan eficaces como Raúl Jiménez, Henry Martín, Rogelio Funes Mori, Uriel Antuna, Alexis Vega e Hirving Lozano, goleadores probados. Si la línea media del Monterrey conserva la dinámica exhibida contra el Cruz Azul, estaremos ante el futuro campeón del futbol mexicano.

Y para el miércoles 24 abre la fase de cuartos de final con los Pumas vs. América en el estadio de CU a las 19:00 horas en el juego de ida y el mismo día pero en Montrerrey los Rayados vs. el Atlas en el estadio BBVA a las 21;00 horas en el juego de ida... El jueves 25, en el estadio Cuauhtémoc a las 21:00 horas, el Puebla vs. el León en el juego de ida... Los juegos de vuelta fueron programados así: el sábado 27 en el estadio Azteca a las 20:00 horas, América vs. Pumas y en el estadio Jalisco a las 21:00 horas, el Atlas recibe al Monterrey... el domingo 28, el León recibe al Puebla a las 20:00 horas.

Así que tendremos suficiente tema para comentarlo. Yo, contrario a este sistema de competencia, no tengo más remedio que disponerme a disfrutar de lo que tenemos, con la esperanza de que cada día que pasa se vayan más jóvenes para Europa, con el fin de que encuentren por allá la educación correcta a través de una competencia que lleve al crecimiento, tal y como lo están haciendo los estadounidenses y los canadienses.

Hasta pronto amigo.

Bonito, excitante y eficaz. Mucho he comentado acerca de lo contradictorios que son, tanto el Monterrey, como el Guadalajara, que realizando por costumbre un juego bonito, no les alcanza para ponerle la cereza al pastel, el gol, que como lo dijera Albert Camus, es el poema del futbol y, el goleador, el poeta, y, los goleadores de estos equipos, hace ya un buen de tiempo que habían enmudecido.

Así, el Monterrey volvió a ser el equipo que juega bonito, pero con la diferencia de que Rogelio Funes Mori, su goleador, rompió su largo ayuno de goles apuntándose en este partido con dos de muy buena factura.

Pero, ¿quién entiende bien al futbol mexicano? el equipo mágico de los extremos inexplicables, en los que nos sorprende con demostraciones de un futbol mágico cuyo poder invisible como la electricidad arrasa con sus rivales que nada pueden contra lo que no se ve, con un "Cabecita" incontenible al que en un año le creció tanto la cabeza que su peso le ha restado tanta velocidad, que parece ser otro distinto y no el que fue considerado mejor jugador del pasado torneo.

¿Pero acaso es el único que bajó su rendimiento? Julio Domínguez, que finalmente había conseguido ser incluido en la Selección, contrinúa en este momento buscando a Funes Mori, que se les perdió de vista, para aparecer dos veces más solo que el polo sur.

¿A quién correspondía marcar al mellizo? pues al "Cata" Domínguez, que después de esta pobre exhibición su nueva convocatoria al Tri seguramente que resultará muy complicada.

El peruano Yotún parece encontrarse en campaña por adueñarse del liderato del equipo, el joven habla más con los árbitros que con sus compañeros, produciéndose una desatención total del juego, anulándose la efectividad que no hace mucho era la garantía del buen funcionamiento de la máquina.

A eso agréguenle lo ficticio, lo irreal, aquello que los comentaristas quieren que veamos, que el "Bebote" Giménez es un verdadero dolor de muelas para los defensores rivales, lo que es totalmente falso. En un pésimo año en materia de producción de goles (la peor en este tipo de competencia), encontramos al uruguayo Nicolás López y al argentino Germán Berterame empatados en el primer lugar con 9 tantos cada uno, en segundo lugar Camilo Sanvezzo con 8, tres jugadores más con 6, otros tres con 5 y después, Giménez junto a otros 14, con cuatro goles, marca que no le quita el sueño ni a un "bebito".

Así que el peso del equipo se va a los hombros de Jesús Corona, Pablo Aguilar (hoy ausente) Adrián Aldrete, Luis Romo (hoy ausente), Ignacio Rivero, Juan Escobar, Paul Fernández, Orbelín Pineda y Roberto Alvarado.

Menos de seis meses bastaron para que los príncipes se convirtieran en sapos. Y para colmo, a la princesa que los salvó de los veintidós años de ayuno hoy le falló la varita mágica que antes le fuera tan útil para liberar a la máquina del hechizo, cuando al cambiar a un maquinista por un garrotero salía ganando, ahora que dejó en la banca a los bueneros, supongo que para meterlos cuando los esparrings cansaran a los Rayados, saliéndole el tiro por la culata, pues los refrescos lucieron más cansados que los que iniciaron.

Total, la historia vuelve a repetirse como tantas veces lo hemos visto, en donde el Campeón cae presa del maldito síndrome de la "campeonitis", que resulta más dañino que el mismo Covid-19. Todo por no respetar los protocolos. Pienso que la solución en estos casos es el borrón y cuenta nueva, así que cada equipo que se corone debe liquidar a toda su plantilla y contratar a una sana, libre de todo contagio del maldito síndrome de la "campeonitis". Se recomienda usar cubreboca si van a ver jugar al Cruz Azul.

Uno no se puede explicar cómo es posible que contando con una línea media como la que usó el Monterrey contra el Cruz Azul: Carlos Rodríguez, Celso Ortiz y Arturo González "Ponchito", con Edson Álvarez en lugar del paraguayo Celso Ortiz y adelante de ellos Orbelín Pineda, no se pueda abastecer de balones a goleadores tan eficaces como Raúl Jiménez, Henry Martín, Rogelio Funes Mori, Uriel Antuna, Alexis Vega e Hirving Lozano, goleadores probados. Si la línea media del Monterrey conserva la dinámica exhibida contra el Cruz Azul, estaremos ante el futuro campeón del futbol mexicano.

Y para el miércoles 24 abre la fase de cuartos de final con los Pumas vs. América en el estadio de CU a las 19:00 horas en el juego de ida y el mismo día pero en Montrerrey los Rayados vs. el Atlas en el estadio BBVA a las 21;00 horas en el juego de ida... El jueves 25, en el estadio Cuauhtémoc a las 21:00 horas, el Puebla vs. el León en el juego de ida... Los juegos de vuelta fueron programados así: el sábado 27 en el estadio Azteca a las 20:00 horas, América vs. Pumas y en el estadio Jalisco a las 21:00 horas, el Atlas recibe al Monterrey... el domingo 28, el León recibe al Puebla a las 20:00 horas.

Así que tendremos suficiente tema para comentarlo. Yo, contrario a este sistema de competencia, no tengo más remedio que disponerme a disfrutar de lo que tenemos, con la esperanza de que cada día que pasa se vayan más jóvenes para Europa, con el fin de que encuentren por allá la educación correcta a través de una competencia que lleve al crecimiento, tal y como lo están haciendo los estadounidenses y los canadienses.

Hasta pronto amigo.