/ viernes 7 de enero de 2022

Ocurrencias del futbol | Tercera Copa del Real Madrid

En la temporada 1957-1958 el número de equipos participantes de la Copa de Europa se amplió a 24, en representación de 23 países. Por España acudieron el Real Madrid, campeón europeo en vigor y, el Sevilla, subcampeón de la Liga. El Sevilla que era entrenado por el austriaco Saturnino Gresh, se enfrentó en la primera ronda a un equipo llamado a tener una brillante ejecutoria europea, el Benfica de Lisboa.

En el viejo campo sevillista de Nervión ganó el equipo andaluz por 3-1, con goles de Antoniet y Pepillo. En el encuentro de vuelta disputado en la capital lusitana se registró un empate a cero goles, con lo que el Sevilla pasó a la siguiente eliminatoria, en la que se enfrentó al Aarhus de Dinamarca. En el campo de Nervión ganó el Sevilla por 4-0 con dos goles de Antoniet y otros de Loren. En la ciudad danesa se impusieron los nórdicos por 2-0, con lo cual el conjunto sevillista se clasificó para jugar los cuartos de final.

El sorteo quiso emparejar a los dos equipos españoles en la antepenúltima eliminatoria. El Real Madrid, bicampeón europeo y gran favorito en la competición, se había reforzado con el fichaje del defensa uruguayo José Emilio Santamaría, el guardameta Rogelio Domínguez y un joven centrocampista, Santiesteban, designado a relevar al veterano Muñoz. Como entrenador del equipo, tras la brillante etapa de Villalonga, el Madrid había fichado al argentino Luis Carniglia.

El enfrentamiento entre madrileños y sevillanos resultó muy desequilibrado. En el encuentro de ida, disputado en el estadio Bernabeu se impuso el equipo local por un rotundo 8-0, en duro encuentro en el que fueron expulsados Campanal por el Sevilla y Marsal por el Real Madrid. Los goles fueron obra de Di Stéfano 4, Kopa 2, Marsal y Gento. En el partido de vuelta se registró un empate a dos, con tantos de "Chus" Pereda por el Real Madrid.

La tercera Copa de Europa se vio empañada por el trágico accidente aéreo que sufrió la delegación del Manchester United en el aeropuerto de Munich. Los británicos regresaban de disputar el encuentro de vuelta de los cuartos de final en Belgrado ante el Estrella Roja. En Inglaterra habían ganado 2-1 los discípulos de Matt Busby, los "Busby Babies", como se les conocía por la juventud del conjunto. En la capital yugoslava obtuvieron un empate a tres, lo que les dio el pase a semifinales.

El 6 de febrero de 1958 el cuatrimotor Elizabeth, de la compañía BEA, despegó de Belgrado llevando a bordo la expedición del Manchester, en la que figuraban futbolistas, directivos, técnicos y periodistas. El aparato efectuó una escala técnica en Munich, donde estaba cayendo una gran tormenta de nieve. Nada más al reemprender el vuelo, el avión se estrelló en la cabecera de la pista y en el accidente murieron 23 personas, entre las que se encontraban los jugadores Roger Byrnem, Geoffrey Bendt, Eddie Colman, Mark Jones, William "Liam" Whelam, David Pegg y Tommy Taylor.

Con gravísimas heridas fueron rescatados algunos de los viajeros, entre ellos el entrenador Matt Busby, que se debatió durente varias semanas entre la vida y la muerte y, el volante Duncan Edwards, que falleció catorce días más tarde en un hospital londinense. Con el equipo plagado de suplentes y traumatizado por el horrible drama vivido en Munich, el Manchester se enfrentó, en semifinales de la Copa de Europa al Milán, que no encontró dificultades para superar la eliminatoria y calificarse como finalista.

La final que jugaron el Madrid y el Milán en el estadio Heyseel de Bruselas ha sido para muchos la mejor de cuantas se habían disputado hasta entonces en la Copa de Europa. El Milán contaba en sus filas con el uruguayo Juan Alberto "Pepe" Schiaffino y con los argentinos Tito Cucchiaroni y Ernesto Grillo. Tras un primer tiempo de tanteo en el que ninguno de los dos equipos se lanzó al ataque, el panorama cambió de forma radical en la segunda mitad, Schiaffino abrió el marcador en el minuto 60 y Di Stéfano empató en el 74. Cuatro minutos más tarde se adelantaban nuevamente los milaneses por mediación de Grillo y tan sólo un minuto después volvía a empatar Héctor Rial. El 2-2 obligó a una prórroga en la que marcó Gento el 3-2 definitivo.

Ya hemos visto cómo la historia de la Copa de Europa se ha visto manchada por acontecimientos importantes como los eventos bélicos que en aquel tiempo afectaron principalmente a los países que pertenecían al bloque soviético y el fatal accidente aéreo sufrido por el Manchester United, en donde se presentaron sucesos milagrosos entre los pasajeros que salvaron sus vidas, sobresaliendo el de Bobby Charlton, que fue encontrado a 25 metros de los restos del aparato, sentado en su asiento gracias a que tenía abrochado su cinturón de seguridad, totalmente ileso pero sin sus zapatos, que no aparecieron por ningun lado.

He querido abordar este tema de las primeras cinco Copas de Europa ganadas por el Real Madrid porque fuera del aspecto deportivo registraron eventos importantes como los que les he narrado, que llamaron muy poderosamente la atención de todo el mundo y especialmente del jovencito quinceañero que era yo en mis inicios, con el hambre de conocimiento que se tiene a esa edad. No existía la TV, pero tuve suerte de conocer a jugadores tan importantes como algunos de los que aquí he mencionado, Rogelio Domínguez y Ernesto Grillo, entre otros.

Hasta pronto amigo.

En la temporada 1957-1958 el número de equipos participantes de la Copa de Europa se amplió a 24, en representación de 23 países. Por España acudieron el Real Madrid, campeón europeo en vigor y, el Sevilla, subcampeón de la Liga. El Sevilla que era entrenado por el austriaco Saturnino Gresh, se enfrentó en la primera ronda a un equipo llamado a tener una brillante ejecutoria europea, el Benfica de Lisboa.

En el viejo campo sevillista de Nervión ganó el equipo andaluz por 3-1, con goles de Antoniet y Pepillo. En el encuentro de vuelta disputado en la capital lusitana se registró un empate a cero goles, con lo que el Sevilla pasó a la siguiente eliminatoria, en la que se enfrentó al Aarhus de Dinamarca. En el campo de Nervión ganó el Sevilla por 4-0 con dos goles de Antoniet y otros de Loren. En la ciudad danesa se impusieron los nórdicos por 2-0, con lo cual el conjunto sevillista se clasificó para jugar los cuartos de final.

El sorteo quiso emparejar a los dos equipos españoles en la antepenúltima eliminatoria. El Real Madrid, bicampeón europeo y gran favorito en la competición, se había reforzado con el fichaje del defensa uruguayo José Emilio Santamaría, el guardameta Rogelio Domínguez y un joven centrocampista, Santiesteban, designado a relevar al veterano Muñoz. Como entrenador del equipo, tras la brillante etapa de Villalonga, el Madrid había fichado al argentino Luis Carniglia.

El enfrentamiento entre madrileños y sevillanos resultó muy desequilibrado. En el encuentro de ida, disputado en el estadio Bernabeu se impuso el equipo local por un rotundo 8-0, en duro encuentro en el que fueron expulsados Campanal por el Sevilla y Marsal por el Real Madrid. Los goles fueron obra de Di Stéfano 4, Kopa 2, Marsal y Gento. En el partido de vuelta se registró un empate a dos, con tantos de "Chus" Pereda por el Real Madrid.

La tercera Copa de Europa se vio empañada por el trágico accidente aéreo que sufrió la delegación del Manchester United en el aeropuerto de Munich. Los británicos regresaban de disputar el encuentro de vuelta de los cuartos de final en Belgrado ante el Estrella Roja. En Inglaterra habían ganado 2-1 los discípulos de Matt Busby, los "Busby Babies", como se les conocía por la juventud del conjunto. En la capital yugoslava obtuvieron un empate a tres, lo que les dio el pase a semifinales.

El 6 de febrero de 1958 el cuatrimotor Elizabeth, de la compañía BEA, despegó de Belgrado llevando a bordo la expedición del Manchester, en la que figuraban futbolistas, directivos, técnicos y periodistas. El aparato efectuó una escala técnica en Munich, donde estaba cayendo una gran tormenta de nieve. Nada más al reemprender el vuelo, el avión se estrelló en la cabecera de la pista y en el accidente murieron 23 personas, entre las que se encontraban los jugadores Roger Byrnem, Geoffrey Bendt, Eddie Colman, Mark Jones, William "Liam" Whelam, David Pegg y Tommy Taylor.

Con gravísimas heridas fueron rescatados algunos de los viajeros, entre ellos el entrenador Matt Busby, que se debatió durente varias semanas entre la vida y la muerte y, el volante Duncan Edwards, que falleció catorce días más tarde en un hospital londinense. Con el equipo plagado de suplentes y traumatizado por el horrible drama vivido en Munich, el Manchester se enfrentó, en semifinales de la Copa de Europa al Milán, que no encontró dificultades para superar la eliminatoria y calificarse como finalista.

La final que jugaron el Madrid y el Milán en el estadio Heyseel de Bruselas ha sido para muchos la mejor de cuantas se habían disputado hasta entonces en la Copa de Europa. El Milán contaba en sus filas con el uruguayo Juan Alberto "Pepe" Schiaffino y con los argentinos Tito Cucchiaroni y Ernesto Grillo. Tras un primer tiempo de tanteo en el que ninguno de los dos equipos se lanzó al ataque, el panorama cambió de forma radical en la segunda mitad, Schiaffino abrió el marcador en el minuto 60 y Di Stéfano empató en el 74. Cuatro minutos más tarde se adelantaban nuevamente los milaneses por mediación de Grillo y tan sólo un minuto después volvía a empatar Héctor Rial. El 2-2 obligó a una prórroga en la que marcó Gento el 3-2 definitivo.

Ya hemos visto cómo la historia de la Copa de Europa se ha visto manchada por acontecimientos importantes como los eventos bélicos que en aquel tiempo afectaron principalmente a los países que pertenecían al bloque soviético y el fatal accidente aéreo sufrido por el Manchester United, en donde se presentaron sucesos milagrosos entre los pasajeros que salvaron sus vidas, sobresaliendo el de Bobby Charlton, que fue encontrado a 25 metros de los restos del aparato, sentado en su asiento gracias a que tenía abrochado su cinturón de seguridad, totalmente ileso pero sin sus zapatos, que no aparecieron por ningun lado.

He querido abordar este tema de las primeras cinco Copas de Europa ganadas por el Real Madrid porque fuera del aspecto deportivo registraron eventos importantes como los que les he narrado, que llamaron muy poderosamente la atención de todo el mundo y especialmente del jovencito quinceañero que era yo en mis inicios, con el hambre de conocimiento que se tiene a esa edad. No existía la TV, pero tuve suerte de conocer a jugadores tan importantes como algunos de los que aquí he mencionado, Rogelio Domínguez y Ernesto Grillo, entre otros.

Hasta pronto amigo.