/ viernes 13 de diciembre de 2019

Con café y a media luz | Para ubicarnos en la realidad

El mensaje lanzado por el gobernador del estado de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, a través de sus redes sociales, en el que exhorta a los legisladores locales a evitar a toda costa la determinación de un reajuste económico al impuesto predial, así como otras medidas que pudieran afectar el bolsillo de los ciudadanos de esta entidad, nos hace ver, entre líneas, un panorama no tanto grato para el 2020.

Tal y como lo comentamos en la entrega anterior, había corrido muy rápido el rumor, que después se hizo noticia, en torno a un duro recorte de las participaciones federales para nuestro estado en el año siguiente, lo cual había encendido los focos rojos, pues muchos proyectos y programas del gobierno panista quedaban “económicamente débiles” y difíciles de subsanar.

En la entrega anterior que animosamente comentamos usted y yo, gentil amigo lector, hicimos uso de la palabra “aristas” y, abusando del espacio, ampliamos el comentario al hacer hincapié en los contextos político y social, lo que generaría una polarización de las corrientes que confluyen en este entretejido tamaulipeco.

Pues la forma en que el mandatario redactó su mensaje terminó por hacer sonar las sirenas de varios sectores de la población.

Antes de continuar, debo abrir un paréntesis y señalar que, en ningún momento estoy declarando que el texto presentó errores gramaticales, ortográficos o de sintaxis; mucho menos que persigue una intención negativa que perjudique a la población de esta parte del país y, tampoco, que este servidor o esta casa editora compartan o demeriten el proceder de la forma o el fondo de este tipo de comunicados públicos entre los poderes locales que le dan gobernabilidad a Tamaulipas.

Dicho lo anterior me permito continuar.

Resulta que en las redes sociales se han volcado dos tipos de tendencias que, a mi gusto, salvo su mejor opinión, se han limitado a percibir someramente lo que está escrito. En otras palabras, la interpretación del texto se ha limitado a escudriñar la denotación del mismo.

La primera que sostiene que García Cabeza de Vaca les está “tocando el balón” a los legisladores para hacerse a un lado de la decisión que pudieran tomar, indicándolos como los últimos responsables de una determinación que afectará o no el bolsillo de la población y, así, no macular la imagen que ha procurado, de cara a una prematura decisión de continuidad en su carrera política.

Si me permite ser un poco egoísta esta mañana y expresar mi sentir, le he de decir que pienso que “la cosa” no va por ahí. No obstante, como le escribí renglones arriba, es una de las posturas que más se han leído en las redes sociales.

La otra, es que el Gobernador está asumiendo tempranamente la responsabilidad de manera conjunta con su gabinete de trabajo y que, la invitación que les está haciendo a los legisladores locales es parte de una estrategia mayor de austeridad que involucrará a las figuras del gobierno local a fin de minimizar el impacto en la población y, a la par, tratar de sacar adelante la mayor cantidad de obras y proyectos posibles, no obstante, el “ahorcamiento” económico que se vivirá más adelante.

Espero que así sea.

Empero, lo que se lee entre líneas, y que era el objetivo fundamental del comentario que celebramos usted y yo, es que la situación ya anuncia una realidad difícil; no es un supuesto, mucho menos una quimera, no es un argumento mediático que busque la distracción sobre algún hecho qué velar a los ojos de la población. ¡Eso es lo que nos debería preocupar!

El Gobernador, entre líneas, está avisando a la ciudadanía, a través de ese “tweet” a los legisladores, que la situación no será la mejor y que esto apenas está empezando para los tamaulipecos, lo que conllevará una serie de “reajustes” que deberemos enfrentar con suma madurez y responsabilidad económica.

¡Hasta la próxima!

Escríbame a:

licajimenezmcc@hotmail.com

Y recuerde, para mañana ¡Despierte, no se duerma que será un gran día!

El mensaje lanzado por el gobernador del estado de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, a través de sus redes sociales, en el que exhorta a los legisladores locales a evitar a toda costa la determinación de un reajuste económico al impuesto predial, así como otras medidas que pudieran afectar el bolsillo de los ciudadanos de esta entidad, nos hace ver, entre líneas, un panorama no tanto grato para el 2020.

Tal y como lo comentamos en la entrega anterior, había corrido muy rápido el rumor, que después se hizo noticia, en torno a un duro recorte de las participaciones federales para nuestro estado en el año siguiente, lo cual había encendido los focos rojos, pues muchos proyectos y programas del gobierno panista quedaban “económicamente débiles” y difíciles de subsanar.

En la entrega anterior que animosamente comentamos usted y yo, gentil amigo lector, hicimos uso de la palabra “aristas” y, abusando del espacio, ampliamos el comentario al hacer hincapié en los contextos político y social, lo que generaría una polarización de las corrientes que confluyen en este entretejido tamaulipeco.

Pues la forma en que el mandatario redactó su mensaje terminó por hacer sonar las sirenas de varios sectores de la población.

Antes de continuar, debo abrir un paréntesis y señalar que, en ningún momento estoy declarando que el texto presentó errores gramaticales, ortográficos o de sintaxis; mucho menos que persigue una intención negativa que perjudique a la población de esta parte del país y, tampoco, que este servidor o esta casa editora compartan o demeriten el proceder de la forma o el fondo de este tipo de comunicados públicos entre los poderes locales que le dan gobernabilidad a Tamaulipas.

Dicho lo anterior me permito continuar.

Resulta que en las redes sociales se han volcado dos tipos de tendencias que, a mi gusto, salvo su mejor opinión, se han limitado a percibir someramente lo que está escrito. En otras palabras, la interpretación del texto se ha limitado a escudriñar la denotación del mismo.

La primera que sostiene que García Cabeza de Vaca les está “tocando el balón” a los legisladores para hacerse a un lado de la decisión que pudieran tomar, indicándolos como los últimos responsables de una determinación que afectará o no el bolsillo de la población y, así, no macular la imagen que ha procurado, de cara a una prematura decisión de continuidad en su carrera política.

Si me permite ser un poco egoísta esta mañana y expresar mi sentir, le he de decir que pienso que “la cosa” no va por ahí. No obstante, como le escribí renglones arriba, es una de las posturas que más se han leído en las redes sociales.

La otra, es que el Gobernador está asumiendo tempranamente la responsabilidad de manera conjunta con su gabinete de trabajo y que, la invitación que les está haciendo a los legisladores locales es parte de una estrategia mayor de austeridad que involucrará a las figuras del gobierno local a fin de minimizar el impacto en la población y, a la par, tratar de sacar adelante la mayor cantidad de obras y proyectos posibles, no obstante, el “ahorcamiento” económico que se vivirá más adelante.

Espero que así sea.

Empero, lo que se lee entre líneas, y que era el objetivo fundamental del comentario que celebramos usted y yo, es que la situación ya anuncia una realidad difícil; no es un supuesto, mucho menos una quimera, no es un argumento mediático que busque la distracción sobre algún hecho qué velar a los ojos de la población. ¡Eso es lo que nos debería preocupar!

El Gobernador, entre líneas, está avisando a la ciudadanía, a través de ese “tweet” a los legisladores, que la situación no será la mejor y que esto apenas está empezando para los tamaulipecos, lo que conllevará una serie de “reajustes” que deberemos enfrentar con suma madurez y responsabilidad económica.

¡Hasta la próxima!

Escríbame a:

licajimenezmcc@hotmail.com

Y recuerde, para mañana ¡Despierte, no se duerma que será un gran día!