/ domingo 10 de enero de 2021

Paradigmas | El silencio de Trump en Twitter

La toma del Capitolio por masas furibundas que terminó con cuatro personas muertas, vino después de varios de los mensajes del presidente norteamericano Donald Trump.

Twitter, Facebook e Instagram anunciaron en septiembre combatirían el contenido con información errónea sobre el proceso electoral. La semana que termina Facebook e Instagram cerraron sus servicios prestados al Presidente, de manera temporal hasta el término del periodo de mandato.

El viernes en la tarde Twitter anunció, cerraría la cuenta de Donald Trump: “Después de una revisión detallada de los twits recientes de la cuenta @realDonaldTrump y el contexto que los rodea, hemos suspendido permanentemente la cuenta debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia”.

Antes, el pasado 27 de mayo, la red social cuestionó por primera vez los hechos en dos mensajes publicados por el presidente estadounidense en su cuenta personal, en los que afirmaba, las boletas para votar por correo conducirían a un fraude electoral.

Facebook retiró el 5 de agosto un video del espacio del presidente Trump exhibiendo una entrevista en la cadena Fox News referente a la Covid-19 “prácticamente no afecta a los niños”.

Y Twitter fue más allá al alertar “Puede ser engañoso” sobre el contenido del primer mensaje de Trump, acusando al partido demócrata de querer “robar las elecciones”. Días anteriores el mandatario, se quejó de que "Twitter está restringiendo completamente la libertad de expresión y como presidente no lo permitiré".

¿Cómo solucionará su problema de incomunicación en su red favorita con los 80 millones de seguidores?

Sin embargo, las redes sociales, no han sido imparciales con quien habita la Casa Blanca. Un ejemplo es, en 2018 el gobierno de Sudáfrica criticó los mensajes quejándose de la “ideología de derecha” al señalar la violencia en las granjas.

¿Cómo es posible, las redes sociales se conviertan en poder fáctico? Adalides de la justicia, capaces de delimitar la libertad de expresión basadas en sus propios estándares regulatorios.

Querido lector: hoy es momento para, desde organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas se sienten a discutir sobre un tema esencial de comunicación y libertad de expresión, aborden el tema y elaboren leyes indispensables que establezcan lineamientos de normalización de estas herramientas sociales cada vez más presentes en el mundo. ¿Usted qué opina?

lupitarico@hotmail.com



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La toma del Capitolio por masas furibundas que terminó con cuatro personas muertas, vino después de varios de los mensajes del presidente norteamericano Donald Trump.

Twitter, Facebook e Instagram anunciaron en septiembre combatirían el contenido con información errónea sobre el proceso electoral. La semana que termina Facebook e Instagram cerraron sus servicios prestados al Presidente, de manera temporal hasta el término del periodo de mandato.

El viernes en la tarde Twitter anunció, cerraría la cuenta de Donald Trump: “Después de una revisión detallada de los twits recientes de la cuenta @realDonaldTrump y el contexto que los rodea, hemos suspendido permanentemente la cuenta debido al riesgo de una mayor incitación a la violencia”.

Antes, el pasado 27 de mayo, la red social cuestionó por primera vez los hechos en dos mensajes publicados por el presidente estadounidense en su cuenta personal, en los que afirmaba, las boletas para votar por correo conducirían a un fraude electoral.

Facebook retiró el 5 de agosto un video del espacio del presidente Trump exhibiendo una entrevista en la cadena Fox News referente a la Covid-19 “prácticamente no afecta a los niños”.

Y Twitter fue más allá al alertar “Puede ser engañoso” sobre el contenido del primer mensaje de Trump, acusando al partido demócrata de querer “robar las elecciones”. Días anteriores el mandatario, se quejó de que "Twitter está restringiendo completamente la libertad de expresión y como presidente no lo permitiré".

¿Cómo solucionará su problema de incomunicación en su red favorita con los 80 millones de seguidores?

Sin embargo, las redes sociales, no han sido imparciales con quien habita la Casa Blanca. Un ejemplo es, en 2018 el gobierno de Sudáfrica criticó los mensajes quejándose de la “ideología de derecha” al señalar la violencia en las granjas.

¿Cómo es posible, las redes sociales se conviertan en poder fáctico? Adalides de la justicia, capaces de delimitar la libertad de expresión basadas en sus propios estándares regulatorios.

Querido lector: hoy es momento para, desde organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas se sienten a discutir sobre un tema esencial de comunicación y libertad de expresión, aborden el tema y elaboren leyes indispensables que establezcan lineamientos de normalización de estas herramientas sociales cada vez más presentes en el mundo. ¿Usted qué opina?

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