/ domingo 11 de octubre de 2020

Paradigmas | La paradoja alimentaria

El Director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, David Beasley, prevé que para fines de este año habrá un incremento del 80 % (a nivel mundial) en el número de personas que padecen "inseguridad alimentaria": de 140 millones antes de la pandemia a 270 millones. En América Latina el número de personas que padecen hambre aumentará en un 269%. En el este y centro de Asia, "se espera un crecimiento" del hambre de 135% y en Sudáfrica, 90%.

Y aún más, calculan que esta crisis sin precedentes requiere una cantidad increíble de dinero: el PMA con sede en Roma necesita 4.900 millones de dólares durante los próximos 6 meses para continuar su labor humanitaria en 83 países. El año pasado, el Programa ayudó a 97 millones de personas en 88 naciones.

El pasado viernes fue anunciado por el Comité Nobel en Oslo, que el Nobel de la Paz fue atribuido al Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA).

La agencia más grande del sistema de la ONU creada en 1962 fue reconocida “por sus esfuerzos en la lucha contra el hambre, por su contribución a la mejora de las condiciones de paz en las zonas afectadas por conflictos y por su actuación como elemento impulsor en prevención del uso del hambre como arma de guerra y de conflicto”, dijo Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Noruego del Premio Nobel.

La sequía, combinada con persistentes conflictos bélicos, llevará durante el 2020 a situaciones límite a las poblaciones de una quincena de zonas del mundo, la mayoría de África, pero también de la península arábica, de Afganistán, Irak, Haití y Bolivia, según ha alertado el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas.

Por otro lado y paradójicamente los países industrializados tiran anualmente 670 millones de toneladas de comida por 630 de los países en desarrollo. Se desperdicia casi la mitad de las frutas y los vegetales (50%), pescado (35%), los cereales (30%) y la carne (20%).

En 2015, las naciones adoptaron los 17 Objetivos Globales para el Desarrollo Sostenible para mejorar las vidas de las personas antes de 2030. El Objetivo 2 (Hambre Cero) tiene la intención de acabar con el hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover una agricultura sostenible. ¡Esa es la prioridad del Programa Mundial de Alimentos!

¿Será posible cumplir la meta? ¿Usted que opina mi amable lector?

lupitarico@hotmail.com

El Director del Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, David Beasley, prevé que para fines de este año habrá un incremento del 80 % (a nivel mundial) en el número de personas que padecen "inseguridad alimentaria": de 140 millones antes de la pandemia a 270 millones. En América Latina el número de personas que padecen hambre aumentará en un 269%. En el este y centro de Asia, "se espera un crecimiento" del hambre de 135% y en Sudáfrica, 90%.

Y aún más, calculan que esta crisis sin precedentes requiere una cantidad increíble de dinero: el PMA con sede en Roma necesita 4.900 millones de dólares durante los próximos 6 meses para continuar su labor humanitaria en 83 países. El año pasado, el Programa ayudó a 97 millones de personas en 88 naciones.

El pasado viernes fue anunciado por el Comité Nobel en Oslo, que el Nobel de la Paz fue atribuido al Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA).

La agencia más grande del sistema de la ONU creada en 1962 fue reconocida “por sus esfuerzos en la lucha contra el hambre, por su contribución a la mejora de las condiciones de paz en las zonas afectadas por conflictos y por su actuación como elemento impulsor en prevención del uso del hambre como arma de guerra y de conflicto”, dijo Berit Reiss-Andersen, presidenta del Comité Noruego del Premio Nobel.

La sequía, combinada con persistentes conflictos bélicos, llevará durante el 2020 a situaciones límite a las poblaciones de una quincena de zonas del mundo, la mayoría de África, pero también de la península arábica, de Afganistán, Irak, Haití y Bolivia, según ha alertado el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas.

Por otro lado y paradójicamente los países industrializados tiran anualmente 670 millones de toneladas de comida por 630 de los países en desarrollo. Se desperdicia casi la mitad de las frutas y los vegetales (50%), pescado (35%), los cereales (30%) y la carne (20%).

En 2015, las naciones adoptaron los 17 Objetivos Globales para el Desarrollo Sostenible para mejorar las vidas de las personas antes de 2030. El Objetivo 2 (Hambre Cero) tiene la intención de acabar con el hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover una agricultura sostenible. ¡Esa es la prioridad del Programa Mundial de Alimentos!

¿Será posible cumplir la meta? ¿Usted que opina mi amable lector?

lupitarico@hotmail.com