/ domingo 26 de junio de 2022

Paradigmas | Padre Mora: ¿Cómo llegar a Dios?

De inmediato fueron los exestudiantes de escuelas privadas quienes comenzaron a enviar mensajes y fotografías por medio de Facebook sobre lo acontecido al Padre Mora. Mensajes de “... y lo llevaremos en nuestro corazón por siempre”. El sacerdote durante su estancia en el puerto de Tampico se ganó la estima profunda de quienes ayudó, entablaron amistad o fueron sus alumnos.

Pronto la red social se inundó de información, todos queríamos saber sobre el sacerdote, que en el infortunio era noticia nacional e internacional. @EspiritualidadSinFronteras subió la entrevista de la Antropóloga Gabriela Gil Veloz, a quien el entrevistado leyó parte de su diario que desde 1976 inició al llegar a Cerocahui a través de avioneta hasta a aquel lugar ubicado tras los cerros. El misionero leyó textos como: “Ahora, ya no sobrevaloro la técnica del yoga, es un medio para llegar a Dios y nada más, pero un medio muy eficaz para disponer el alma y el cuerpo para la oración. Creo que fue una gracia de Dios saber combinar el yoga con algunos momentos de oración durante los ejercicios de mes...”

Actualmente, Cerocahui es un pueblo del estado de Chuihuahua localizado en la Sierra Tarahumara, en el Municipio de Urique, una de las principales poblaciones de su región, centro de actividad económica y cultural, además importante atractivo turístico, famoso por las festividades que llevan a cabo como parte de la Semana Santa. La comunicación principal es por vía del Ferrocarril Chihuahua al Pacífico que llega a la estación de Bahuichivo. De eso saben muy bien los turistas que viajan por el “Chepe”.

Después de idas y venidas de los jesuitas por tierras tarahumaras fue a partir de 1939 cuando fijaron antiguas misiones, con la llegada del padre Andrés Lara quedó reconstruida la iglesia encontrada en ruinas. También fundó la escuela-internado, Tewecado Santa María Guadalupe para los indígenas de la sierra y continúa en operación hoy en día.

Joaquín César Mora Salazar y Javier Campos Morales fueron los sacerdotes jesuitas ejecutados, junto a un guía de turistas en la Sierra Tarahumara en medio de hechos delictivos que datan desde hace 48 años – mencionado por los jesuitas- fue por ello, desde el Vaticano el Papa Francisco, expresó: “¡Cuántos asesinatos en México! Estoy cerca con afecto y oración a la comunidad católica afectada por esta tragedia. Una vez más, repito que la violencia no resuelve los problemas, sino que aumenta el sufrimiento innecesario”.

Hay quienes exigen al gobierno aplique la de “Ojo por ojo, diente por diente”, o “Quien a hierro mata... dentro de la violencia vivida en México. Desde el Vaticano el mundo recibe frecuentes lecciones de paz en contra de agresivos actos. En su primera intervención pública tras el atentado recibido, Juan Pablo II convaleciente en una cama de hospital dijo: "Rezo por el hermano que me ha disparado, a quien sinceramente doy la absolución.”

El 27 de diciembre de 1983, hace 39 años, el Papa Juan Pablo II perdonó en persona a Ali Agca, el turco que le disparó varias veces cuando se encontraba en la Plaza de San Pedro, dejándolo al borde de la muerte. Ali, hoy de 64 años de edad, purgó una condena de 25 años en la cárcel. Actualmente se dedica a alimentar gatos y perros en Estambul.

La sociedad mexicana transformó desde tiempo de los Baby boomer, cuando estaban instalados los valores morales, el respeto, la solidaridad, justicia, el perdón, etc. Poco a poco fueron difuminándose y convertidos en antivalores; pasamos a “El que no transa no avanza, y ahí más que pintado el sistema jurídico mexicano y una lista larga de variados profesionistas en donde caben, por ejemplo: profesores, ingenieros, arquitectos, hasta los médicos, quienes antes gozaban de un prestigio intachable. Asimismo: mecánicos, tránsitos, albañiles, etc. Desde luego hay excepciones.

Mientras el tejido social no cambie, seguiremos con esta atroz violencia. Exijamos en los hogares, a nuestros, hijos, nietos, sobrinos, esposos, etc. cambio de paradigmas o continuaremos en un marco de asesinatos de toda índole y para lo cual siempre encontraremos culpables. ¡El asesino no nace, se forma en la sociedad!

lupitarico@hotmail.com

De inmediato fueron los exestudiantes de escuelas privadas quienes comenzaron a enviar mensajes y fotografías por medio de Facebook sobre lo acontecido al Padre Mora. Mensajes de “... y lo llevaremos en nuestro corazón por siempre”. El sacerdote durante su estancia en el puerto de Tampico se ganó la estima profunda de quienes ayudó, entablaron amistad o fueron sus alumnos.

Pronto la red social se inundó de información, todos queríamos saber sobre el sacerdote, que en el infortunio era noticia nacional e internacional. @EspiritualidadSinFronteras subió la entrevista de la Antropóloga Gabriela Gil Veloz, a quien el entrevistado leyó parte de su diario que desde 1976 inició al llegar a Cerocahui a través de avioneta hasta a aquel lugar ubicado tras los cerros. El misionero leyó textos como: “Ahora, ya no sobrevaloro la técnica del yoga, es un medio para llegar a Dios y nada más, pero un medio muy eficaz para disponer el alma y el cuerpo para la oración. Creo que fue una gracia de Dios saber combinar el yoga con algunos momentos de oración durante los ejercicios de mes...”

Actualmente, Cerocahui es un pueblo del estado de Chuihuahua localizado en la Sierra Tarahumara, en el Municipio de Urique, una de las principales poblaciones de su región, centro de actividad económica y cultural, además importante atractivo turístico, famoso por las festividades que llevan a cabo como parte de la Semana Santa. La comunicación principal es por vía del Ferrocarril Chihuahua al Pacífico que llega a la estación de Bahuichivo. De eso saben muy bien los turistas que viajan por el “Chepe”.

Después de idas y venidas de los jesuitas por tierras tarahumaras fue a partir de 1939 cuando fijaron antiguas misiones, con la llegada del padre Andrés Lara quedó reconstruida la iglesia encontrada en ruinas. También fundó la escuela-internado, Tewecado Santa María Guadalupe para los indígenas de la sierra y continúa en operación hoy en día.

Joaquín César Mora Salazar y Javier Campos Morales fueron los sacerdotes jesuitas ejecutados, junto a un guía de turistas en la Sierra Tarahumara en medio de hechos delictivos que datan desde hace 48 años – mencionado por los jesuitas- fue por ello, desde el Vaticano el Papa Francisco, expresó: “¡Cuántos asesinatos en México! Estoy cerca con afecto y oración a la comunidad católica afectada por esta tragedia. Una vez más, repito que la violencia no resuelve los problemas, sino que aumenta el sufrimiento innecesario”.

Hay quienes exigen al gobierno aplique la de “Ojo por ojo, diente por diente”, o “Quien a hierro mata... dentro de la violencia vivida en México. Desde el Vaticano el mundo recibe frecuentes lecciones de paz en contra de agresivos actos. En su primera intervención pública tras el atentado recibido, Juan Pablo II convaleciente en una cama de hospital dijo: "Rezo por el hermano que me ha disparado, a quien sinceramente doy la absolución.”

El 27 de diciembre de 1983, hace 39 años, el Papa Juan Pablo II perdonó en persona a Ali Agca, el turco que le disparó varias veces cuando se encontraba en la Plaza de San Pedro, dejándolo al borde de la muerte. Ali, hoy de 64 años de edad, purgó una condena de 25 años en la cárcel. Actualmente se dedica a alimentar gatos y perros en Estambul.

La sociedad mexicana transformó desde tiempo de los Baby boomer, cuando estaban instalados los valores morales, el respeto, la solidaridad, justicia, el perdón, etc. Poco a poco fueron difuminándose y convertidos en antivalores; pasamos a “El que no transa no avanza, y ahí más que pintado el sistema jurídico mexicano y una lista larga de variados profesionistas en donde caben, por ejemplo: profesores, ingenieros, arquitectos, hasta los médicos, quienes antes gozaban de un prestigio intachable. Asimismo: mecánicos, tránsitos, albañiles, etc. Desde luego hay excepciones.

Mientras el tejido social no cambie, seguiremos con esta atroz violencia. Exijamos en los hogares, a nuestros, hijos, nietos, sobrinos, esposos, etc. cambio de paradigmas o continuaremos en un marco de asesinatos de toda índole y para lo cual siempre encontraremos culpables. ¡El asesino no nace, se forma en la sociedad!

lupitarico@hotmail.com