/ lunes 4 de marzo de 2019

Quien bien tiene y mal escoge, del mal que le venga no se enoje

A Pumas solo le motiva jugar contra el América... si pierde llora todo el año, si gana justificó ya todo.

Con dos años de ausencia obligada, este sábado he acudido al llamado del clan. No es fácil renunciar a la acostumbrada asistencia semanal al Siete y Medio. Con la misma devoción con que asistimos a misa, miles de locos como yo, acostumbramos asistir al sacrificio semanal de los malos hábitos, yo he cumplido ya 59 años de hacerlo, hasta que el peso de los años cargados de obvios achaques me lo han hecho imposible; sin embargo, este sábado, la programación de juegos de la Liga MX a los que debo atender para poder comunicar eficazmente con ustedes, me fue favorable, concediéndome oportunidad de regresar a tiempo a mi casa El Sol de Tampico y así cumplir mi compromiso.

Así que a las 13:30 del sábado, ya me encontraba instalado en el campo 4 de la catedral del futbol tamaulipeco, saludando a tanta gente querida que forman parte del paisaje que 59 años han fijado en la parte buena de mi persona, gente de la que he aprendido todo lo moral, lo sano y la lealtad que conforman el perfil de los locos que corren tras un balón. El Manchester, de rancia estirpe, que junto a la Colonia Árbol Grande, conforman con sus estilos que los han caracterizado durante toda su existencia (nadie juega como el Manchester, nadie juega como el Árbol Grande), disputaba la semifinal contra mi querido Tampico FC. Quiero decirles que la Liga de Veteranos del Tecnológico de Ciudad Madero maneja todas las categorías de veteranos en donde juegan incluso futbolistas de entre 70 y 80 años y divierten más que los juegos que programan las televisoras.

Digan ustedes si no está garantizada la emoción, el juego del Manchester depende de una columna vertebral conformada por Jorge Garibaldi, Paco Solís, Fito Garza y Sergio Lira, eso por nombrarle al Manchester, pero los demás equipos también tienen lo suyo, especialmente el Tampico FC, eterno protagonista que tiene el color celeste de los grandes equipos jaibos, que fuimos apadrinados en nuestros inicios por Enrique Carretero García, un grande entre los más grandes celestes. Resultado final, 2-1 en favor del Manchester, que habla de lo apretado de las acciones, con goles anotados por Sergio Lira, que bien pudo anotar uno más cuando con su característico salto, al estilo de Pelé, dejó a nuestros centrales viéndolo bajar después de haber conectado un fuerte testarazo que pasó muy cerca del poste. Manchester fue un digno vencedor, que obligó al Tampico a brindar su mejor esfuerzo, siendo ambos equipos merecedores del reconocimiento de los presentes.

Cuando veía a Kepa Arrizabalaga hacer maravillas bajo la portería del Athletic, difería de la opinión de quienes lo hubieran querido ver con el Barcelona o con el Real Madrid, pues de haber sido así, el muchacho tal vez no hubiera sido tan exigido como para mostrar lo que exhibió con los vascos, que lo tienen ahora en el futbol de la Premier League. Lo que viene al caso ahora que vemos como partido tras partido, el joven Sebastián Jurado Roca, portero de 21 años del Veracruz que juego tras juego evita goleadas mayores a su equipo, Tiburones Rojos, que volvió a dejar en un 0-3 lo que pudo ser un 0-6. Qué triste participación la de los jarochos, que honestamente no se sabe a qué o para qué juegan. Lo mejor para Jurado, es que no dudo que ya desde este momento se estén discutiendo los términos para que el joven cambie de colores. Ayer fue vencido por tres tremendos cañonazos, todos a la distancia del manchón del penal, dando finalmente un triunfo al Toluca, el equipo más reforzado de la Liga.

Por la tarde, en Puebla, los Lobos BUAP recibieron a los venidos a menos Pumas universitarios, que al parecer únicamente compite contra el América, resintiendo solo sus derrotas y revitalizándose con los triunfos que ante ellos consiguen. Después de haber caído en su casa ante el León, han vuelto ahora a caer, en esta ocasión a manos de Lobos BUAP, que jugó toda la segunda parte con diez jugadores, pues antes de terminar el primer tiempo, les fue expulsado Leyton Jiménez, quien ante la imposibilidad de contener a Carlos González que iba a entrar al área solitario con el balón dominado, lo tomó de un brazo impidiéndole continuar. A los 21 minutos de juego, Luis da Silva puso uno a cero el marcador en favor de Lobos, imponiendo condiciones en el terreno de juego, hasta que al minuto 45 les fue expulsado Jiménez.

Era de esperarse que con la ventaja numérica a los Pumas se les facilitaría tomar el mando de las acciones, pero no fue así, continuando el juego como si los dos equipos estuvieran completos. Así, las llegadas de uno y otro se sucedían sin que ninguno de los dos pudiera concretarlas. Rodríguez, portero de Lobos, tuvo una buen tarde parando todo cuanto le tiraron, no así Saldívar, quien con menos trabajo no lució como en otras ocasiones. Fue así que al minuto 61, Mauro Lainez, fuera de su posición, por el lado derecho, despues de un buen tramo recorrido, se perfiló de zurda y antes de entrar al área, colocó su disparo justo pegado al poste contrario, haciendo inútil la estirada del portero. ¿Y ahora qué pasará? ¿Correrán tambien a Marioni? O se quedará en premio por haber vencido al América.

Hasta pronto amigo.

A Pumas solo le motiva jugar contra el América... si pierde llora todo el año, si gana justificó ya todo.

Con dos años de ausencia obligada, este sábado he acudido al llamado del clan. No es fácil renunciar a la acostumbrada asistencia semanal al Siete y Medio. Con la misma devoción con que asistimos a misa, miles de locos como yo, acostumbramos asistir al sacrificio semanal de los malos hábitos, yo he cumplido ya 59 años de hacerlo, hasta que el peso de los años cargados de obvios achaques me lo han hecho imposible; sin embargo, este sábado, la programación de juegos de la Liga MX a los que debo atender para poder comunicar eficazmente con ustedes, me fue favorable, concediéndome oportunidad de regresar a tiempo a mi casa El Sol de Tampico y así cumplir mi compromiso.

Así que a las 13:30 del sábado, ya me encontraba instalado en el campo 4 de la catedral del futbol tamaulipeco, saludando a tanta gente querida que forman parte del paisaje que 59 años han fijado en la parte buena de mi persona, gente de la que he aprendido todo lo moral, lo sano y la lealtad que conforman el perfil de los locos que corren tras un balón. El Manchester, de rancia estirpe, que junto a la Colonia Árbol Grande, conforman con sus estilos que los han caracterizado durante toda su existencia (nadie juega como el Manchester, nadie juega como el Árbol Grande), disputaba la semifinal contra mi querido Tampico FC. Quiero decirles que la Liga de Veteranos del Tecnológico de Ciudad Madero maneja todas las categorías de veteranos en donde juegan incluso futbolistas de entre 70 y 80 años y divierten más que los juegos que programan las televisoras.

Digan ustedes si no está garantizada la emoción, el juego del Manchester depende de una columna vertebral conformada por Jorge Garibaldi, Paco Solís, Fito Garza y Sergio Lira, eso por nombrarle al Manchester, pero los demás equipos también tienen lo suyo, especialmente el Tampico FC, eterno protagonista que tiene el color celeste de los grandes equipos jaibos, que fuimos apadrinados en nuestros inicios por Enrique Carretero García, un grande entre los más grandes celestes. Resultado final, 2-1 en favor del Manchester, que habla de lo apretado de las acciones, con goles anotados por Sergio Lira, que bien pudo anotar uno más cuando con su característico salto, al estilo de Pelé, dejó a nuestros centrales viéndolo bajar después de haber conectado un fuerte testarazo que pasó muy cerca del poste. Manchester fue un digno vencedor, que obligó al Tampico a brindar su mejor esfuerzo, siendo ambos equipos merecedores del reconocimiento de los presentes.

Cuando veía a Kepa Arrizabalaga hacer maravillas bajo la portería del Athletic, difería de la opinión de quienes lo hubieran querido ver con el Barcelona o con el Real Madrid, pues de haber sido así, el muchacho tal vez no hubiera sido tan exigido como para mostrar lo que exhibió con los vascos, que lo tienen ahora en el futbol de la Premier League. Lo que viene al caso ahora que vemos como partido tras partido, el joven Sebastián Jurado Roca, portero de 21 años del Veracruz que juego tras juego evita goleadas mayores a su equipo, Tiburones Rojos, que volvió a dejar en un 0-3 lo que pudo ser un 0-6. Qué triste participación la de los jarochos, que honestamente no se sabe a qué o para qué juegan. Lo mejor para Jurado, es que no dudo que ya desde este momento se estén discutiendo los términos para que el joven cambie de colores. Ayer fue vencido por tres tremendos cañonazos, todos a la distancia del manchón del penal, dando finalmente un triunfo al Toluca, el equipo más reforzado de la Liga.

Por la tarde, en Puebla, los Lobos BUAP recibieron a los venidos a menos Pumas universitarios, que al parecer únicamente compite contra el América, resintiendo solo sus derrotas y revitalizándose con los triunfos que ante ellos consiguen. Después de haber caído en su casa ante el León, han vuelto ahora a caer, en esta ocasión a manos de Lobos BUAP, que jugó toda la segunda parte con diez jugadores, pues antes de terminar el primer tiempo, les fue expulsado Leyton Jiménez, quien ante la imposibilidad de contener a Carlos González que iba a entrar al área solitario con el balón dominado, lo tomó de un brazo impidiéndole continuar. A los 21 minutos de juego, Luis da Silva puso uno a cero el marcador en favor de Lobos, imponiendo condiciones en el terreno de juego, hasta que al minuto 45 les fue expulsado Jiménez.

Era de esperarse que con la ventaja numérica a los Pumas se les facilitaría tomar el mando de las acciones, pero no fue así, continuando el juego como si los dos equipos estuvieran completos. Así, las llegadas de uno y otro se sucedían sin que ninguno de los dos pudiera concretarlas. Rodríguez, portero de Lobos, tuvo una buen tarde parando todo cuanto le tiraron, no así Saldívar, quien con menos trabajo no lució como en otras ocasiones. Fue así que al minuto 61, Mauro Lainez, fuera de su posición, por el lado derecho, despues de un buen tramo recorrido, se perfiló de zurda y antes de entrar al área, colocó su disparo justo pegado al poste contrario, haciendo inútil la estirada del portero. ¿Y ahora qué pasará? ¿Correrán tambien a Marioni? O se quedará en premio por haber vencido al América.

Hasta pronto amigo.