/ domingo 24 de marzo de 2019

Opinión de Jaibo | Quién quita y quién pone... los ciudadanos!!

Una frase que se ha vuelto muy común en la política, el pueblo pone y el pueblo quita, refiere al poder que los ciudadanos le concedemos a los políticos para que trabajen por nuestro país

Los ciudadanos tenemos el poder de poner y quitar gobernantes o representantes políticos, los gobernantes tienen la oportunidad de trascender o hacer un gran papel haciendo correctamente su trabajo, de lo contrario... habrá que cambiarlos por cualquier medio legal.

Como sabemos, existe un periodo estipulado en la ley para que las personas elegidas en las contiendas electorales tengan el poder para desarrollar correctamente su trabajo.

La reciente aprobación de la revocación de mandato es la oportunidad para que los ciudadanos tengan la posibilidad de elegir si sus gobernantes se mantienen en sus puestos o no, dependiendo de sus resultados.

Solo quien se siente seguro, tiene confianza y sabe que las cosas las está haciendo bien en beneficio del país, de su estado o su municipio, se atreve a incluir dentro de la ley la revocación de mandato, eso dará seguridad de que se tienen que hacer bien las cosas, de lo contrario puede ser despedido a la mitad del mandato, esto pudiera ser utilizado como método para evaluar a los gobernantes, y de que las cosas se hagan bien y para todos, rumbo a una democracia perfecta acompañada de delito grave la corrupción y los delitos electorales, esto tendrá muchísimo peso en las futuras elecciones intermedias del 2021 y presidenciales del 2024 y las subsecuentes.

La revocación de mandato es un procedimiento por el cual los ciudadanos pueden cesar de su cargo público a un funcionario, un presidente de la nación, un diputado o senador, un gobernador o un alcalde antes del término de su respectivo periodo mediante votación directa o por recolección de firmas, dependiendo de las dimensiones geográficas o poblacionales.

Algunos ejemplos de sociedades democráticas que tienen en su Constitución la revocación de mandato y como cultura, los primeros indicios de ello nacen en Atenas, Suiza, Estados Unidos y Canadá en algunos estados, Venezuela, Ecuador, Bolivia en todo el país, Argentina en algunas provincias. Caso curioso de la historia, el estado de Yucatán fue el primero en introducir la revocatoria en 1938 y curiosamente no se activó nunca, fue declarado inconstitucional 72 años más tarde en el 2010 por la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco (PRI), similar recorrido cabe a la revocación del mandato introducido en Chihuahua en 1997 con Francisco Barrio (PAN) y también declarado inconstitucional y eliminado de la normativa en consecuencia por el PRI de Patricio Martínez. A pesar de estos precedentes la revocación de mandato fue incluida posteriormente en los estados de Oaxaca (1998-PRI), Morelos (2011-PRI), Guerrero (2013-PRI), Zacatecas (PRD) y Aguascalientes (PAN), Nuevo León (PRI).

Todavía aún somos una democracia participativa donde las grandes decisiones de trascendencia nacional son tomadas por la Presidencia de la República y el Congreso de la Unión, que es quien las aprueba y que comparado con la democracia directa nos indica un universo de diferencia. Para fortalecer la democracia mexicana se requiere voluntad, hay quienes quieren que continúe la democracia participativa, pero también hay quienes quieren la democracia directa y vinculante. Lo que es importante incluir en las grandes decisiones para el futuro de nuestro país, son personas capaces, preparadas y expertas en los temas que detonarán el crecimiento económico de México. Es la opinión de un Jaibo de Corazón.

CONTACTO:

Una frase que se ha vuelto muy común en la política, el pueblo pone y el pueblo quita, refiere al poder que los ciudadanos le concedemos a los políticos para que trabajen por nuestro país

Los ciudadanos tenemos el poder de poner y quitar gobernantes o representantes políticos, los gobernantes tienen la oportunidad de trascender o hacer un gran papel haciendo correctamente su trabajo, de lo contrario... habrá que cambiarlos por cualquier medio legal.

Como sabemos, existe un periodo estipulado en la ley para que las personas elegidas en las contiendas electorales tengan el poder para desarrollar correctamente su trabajo.

La reciente aprobación de la revocación de mandato es la oportunidad para que los ciudadanos tengan la posibilidad de elegir si sus gobernantes se mantienen en sus puestos o no, dependiendo de sus resultados.

Solo quien se siente seguro, tiene confianza y sabe que las cosas las está haciendo bien en beneficio del país, de su estado o su municipio, se atreve a incluir dentro de la ley la revocación de mandato, eso dará seguridad de que se tienen que hacer bien las cosas, de lo contrario puede ser despedido a la mitad del mandato, esto pudiera ser utilizado como método para evaluar a los gobernantes, y de que las cosas se hagan bien y para todos, rumbo a una democracia perfecta acompañada de delito grave la corrupción y los delitos electorales, esto tendrá muchísimo peso en las futuras elecciones intermedias del 2021 y presidenciales del 2024 y las subsecuentes.

La revocación de mandato es un procedimiento por el cual los ciudadanos pueden cesar de su cargo público a un funcionario, un presidente de la nación, un diputado o senador, un gobernador o un alcalde antes del término de su respectivo periodo mediante votación directa o por recolección de firmas, dependiendo de las dimensiones geográficas o poblacionales.

Algunos ejemplos de sociedades democráticas que tienen en su Constitución la revocación de mandato y como cultura, los primeros indicios de ello nacen en Atenas, Suiza, Estados Unidos y Canadá en algunos estados, Venezuela, Ecuador, Bolivia en todo el país, Argentina en algunas provincias. Caso curioso de la historia, el estado de Yucatán fue el primero en introducir la revocatoria en 1938 y curiosamente no se activó nunca, fue declarado inconstitucional 72 años más tarde en el 2010 por la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco (PRI), similar recorrido cabe a la revocación del mandato introducido en Chihuahua en 1997 con Francisco Barrio (PAN) y también declarado inconstitucional y eliminado de la normativa en consecuencia por el PRI de Patricio Martínez. A pesar de estos precedentes la revocación de mandato fue incluida posteriormente en los estados de Oaxaca (1998-PRI), Morelos (2011-PRI), Guerrero (2013-PRI), Zacatecas (PRD) y Aguascalientes (PAN), Nuevo León (PRI).

Todavía aún somos una democracia participativa donde las grandes decisiones de trascendencia nacional son tomadas por la Presidencia de la República y el Congreso de la Unión, que es quien las aprueba y que comparado con la democracia directa nos indica un universo de diferencia. Para fortalecer la democracia mexicana se requiere voluntad, hay quienes quieren que continúe la democracia participativa, pero también hay quienes quieren la democracia directa y vinculante. Lo que es importante incluir en las grandes decisiones para el futuro de nuestro país, son personas capaces, preparadas y expertas en los temas que detonarán el crecimiento económico de México. Es la opinión de un Jaibo de Corazón.

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