Cosasdiferentes, inéditas, difíciles de entender, están pasando en la política mexicana, donde el Presidente de la República tal parece que tiene en contra a la fracción parlamentaria del Congreso perteneciente a su propio rebaño, y donde importantes militantes de otro partido renuncian a sus filas para formar uno nuevo, acusando de todo lo malo a sus correligionarios ideológicos y exhibiéndolos de corruptos y malandrines.
Por ejemplo, tal parece que el líder del Senado, Ricardo Monreal Ávila, de la fracción morenista, le está jugando las contras al presidente Andrés Manuel López Obrador con el asunto de la reglamentación bancaria sobre cobro de comisiones onerosas, pues mientras AMLO dice que en tres años no habrá modificaciones al respecto, el senador Monreal afirma que la iniciativa va en serio.
Luego entonces, ¿existe ya una ruptura entre ambos líderes políticos o se trata de un estratagema para destantear al enemigo?, Chi lo sa, como dicen los italianos, quien lo sabe, el problema es que con esa actitud están enviando un mensaje de confusión a sus propios compañeros de partido y a los millones de seguidores que votaron por ellos el primero de Julio.
Y si no fuera tan dramático y serio, podría dar risa el hecho de que el expresidente Felipe Calderón haya renunciado a las filas del PAN para formar otro partido político, acusando a sus enemigos internos de corrupción, agandallamiento y otras lindezas.
Porque en todo caso, Fecal viene contaminado de lo mismo que acusa, puesto que hace seis años fue acusado de traidor por los panistas, al entregar en bandeja de oro la Presidencia de la República al priísta Enrique Peña Nieto.
El asunto está en que hoy los partidos políticos se están dañando a sí mismos por dentro, se están erosionando de forma interna, sin necesidad de ataques o agresiones externas provenientes de sus opositores.
PRI, PAN, PRD, y ahora MORENA, traen tantos problemas y broncas dentro de sus filas, que, como los grandes imperios, corren el peligro de sucumbir por la degradación moral de sus propios dirigentes.
BUEN PUNTO
Debo decir que mucha gente del puerto comenta con acierto la acción restauradora de calles por parte del Ayuntamiento, trabajos de bacheo que se están llevando a cabo con celeridad en algunas de las arterias más transitadas.
Es cierto que falta mucho por pavimentar, pero también es verdad que las vías de comunicación que ya lo están, adolecen de un pésimo estado y se han convertido en verdaderas trampas para los automovilistas.
Estoy seguro que todo Tampico estaría feliz si se repararan todas las calles pavimentadas de la ciudad, aunque no se construyera ninguna nueva, pues de otra manera, muy pronto no habrá automóvil sano en esta zona y sólo Dios sabe cuántos accidentes fatales puedan ocurrir por tan grave problema urbano.
Por eso, bien por el alcalde Jesús Nader que inició un programa de bacheo y ojalá no lo cancele ni un solo día de su mandato.
Por último, vientos favorables soplan en los mares que surca Miguel Gómez Orta, representante del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca en el Sur de Tamaulipas. A Gómez Orta se le augura un pronto arribo a buen puerto.
P.D.- Cosas veredes, amigo Sancho.
