“Porque el deterioro inmenso de la laguna no comenzó en este sexenio, ni siquiera en los pasados, se necesitó el peor de los descuidos por la ecología por parte de gobiernos, ciudadanos y del pueblo para que lo que fuera un sitio de vida, se convirtiera en un descuido total por el respeto a la naturaleza” (crónica de un renacimiento, Isabel Arvide)
Como parte del Tampico Hermoso que recuerdo en mis colaboraciones, no puedo dejar de mencionar la “Laguna del Carpintero”, hermosísimo espacio que no sabemos apreciar los tampiqueños, hubo tiempos porque no decirlo en que el olor que despedía este bello paseo le hizo ganarse el apodo de “colonia buenos aires”.
Varios alcaldes se han abocado a su saneamiento, aunque no completamente.
La administración actual, ha puesto su mirada en El Carpintero, en varias ocasiones le he oído decir que ya se tiene presupuesto para ello, y como todos pueden ver, así es; las obras se están llevando a cabo.
Sin embargo, el incidente de una pobre mujer perturbada, víctima de un saurio habitante de la laguna, me hizo reflexionar y es la razón de estas líneas, ¡esto no puede pasar!, ¡ni mucho menos repetirse!, la población de estos animales como he sabido ya rebasó la seguridad de un parque ecológico, alguna forma debe haber de trasladarlos a otro lugar evitando su peligrosa presencia, a fin de recuperar en varias formas el uso de este hermoso regalo de la naturaleza.
