/ sábado 3 de julio de 2021

Tampico hermoso | Seguridad

Hace ya más tiempo del que quisiera acordarme, un grupo de amigos de la colonia Altavista, los Contreras, De la Cabada, el Cerro, Tamayo, Pintos, Micaela Jáuregui, el Peludo Castro, el Pipo, Pancho, los Gutiérrez Zamora, en fin, mi queridísimo amigo Rafael Trejo y muchos más, nos reuníamos en la esquina de las Calles Palma y Naranjo todas las noches y los sábados también, a platicar, chupar, maldecir, gritar, pleitar y hasta jugar burro, haciendo insoportable la vida de los vecinos, quienes pusieron su queja al municipio.

Una de esas noches de repente se presentó ante nosotros, nada menos que el jefe de veladores de la colonia, “Don Cuco”, bueno muchachos nos dijo, se acabó la fiesta “llegó la Julia”, súbanse en orden, ya se les avisará a sus padres.

Estos recuerdos sobre la seguridad de las colonias de los tampiqueños de hace tiempo, vienen a mi mente, debido a los cambios, con o sin fundamento de las diferentes policías desaparecidas, la Federal de Seguridad, la Federal del Estado, la Federal de Caminos, la Preventiva auxiliar del Ministerio Público y creo que, hasta tránsito casi desaparecida o mal ubicada, que ha convertido a la avenida Hidalgo en pista de infractores.

Porque tuvieron lugar estos cambios, lo ignoro y pido disculpas anticipadas por el señalamiento.

Me preocupa que, en estos tiempos de inseguridad, la falta de coordinación de las Policías del país, las jurisdicciones no marcan las detenciones, los delitos en general pueden ser reprimidos por cualquier policía y hasta por particulares dándose aviso inmediatamente al cuerpo policiaco más cercano.

No es posible que el Ejército y la Marina, abarquen todo y mucho menos militarizar todos los cuerpos del orden público.

Estos recuerdos sobre la seguridad de las colonias de los tampiqueños de hace tiempo, vienen a mi mente, debido a los cambios, con o sin fundamento de las diferentes policías desaparecidas, la Federal de Seguridad, la Federal del Estado, la Federal de Caminos, la Preventiva auxiliar del Ministerio Público

Hace ya más tiempo del que quisiera acordarme, un grupo de amigos de la colonia Altavista, los Contreras, De la Cabada, el Cerro, Tamayo, Pintos, Micaela Jáuregui, el Peludo Castro, el Pipo, Pancho, los Gutiérrez Zamora, en fin, mi queridísimo amigo Rafael Trejo y muchos más, nos reuníamos en la esquina de las Calles Palma y Naranjo todas las noches y los sábados también, a platicar, chupar, maldecir, gritar, pleitar y hasta jugar burro, haciendo insoportable la vida de los vecinos, quienes pusieron su queja al municipio.

Una de esas noches de repente se presentó ante nosotros, nada menos que el jefe de veladores de la colonia, “Don Cuco”, bueno muchachos nos dijo, se acabó la fiesta “llegó la Julia”, súbanse en orden, ya se les avisará a sus padres.

Estos recuerdos sobre la seguridad de las colonias de los tampiqueños de hace tiempo, vienen a mi mente, debido a los cambios, con o sin fundamento de las diferentes policías desaparecidas, la Federal de Seguridad, la Federal del Estado, la Federal de Caminos, la Preventiva auxiliar del Ministerio Público y creo que, hasta tránsito casi desaparecida o mal ubicada, que ha convertido a la avenida Hidalgo en pista de infractores.

Porque tuvieron lugar estos cambios, lo ignoro y pido disculpas anticipadas por el señalamiento.

Me preocupa que, en estos tiempos de inseguridad, la falta de coordinación de las Policías del país, las jurisdicciones no marcan las detenciones, los delitos en general pueden ser reprimidos por cualquier policía y hasta por particulares dándose aviso inmediatamente al cuerpo policiaco más cercano.

No es posible que el Ejército y la Marina, abarquen todo y mucho menos militarizar todos los cuerpos del orden público.

Estos recuerdos sobre la seguridad de las colonias de los tampiqueños de hace tiempo, vienen a mi mente, debido a los cambios, con o sin fundamento de las diferentes policías desaparecidas, la Federal de Seguridad, la Federal del Estado, la Federal de Caminos, la Preventiva auxiliar del Ministerio Público