Últimamente oímos mucho del tema. “Hackearon la cuenta de …, pero como en otros muchos temas, son cosas que les pasan a “otros”.
El robo de identidad, la suplantación de personas es algo, que cada vez pasa más, desgraciadamente y poco podemos hacer para evitarlo y peor aún, cuando sucede no sabemos qué hacer para recuperar el control de nuestras cuentas y hasta entonces nos damos cuenta que nuestra lista de contactos es materia vital para los delincuentes.
En mi caso, de repente y después de recibir y no contestar llamadas de números desconocidos de otros países, ya no tuve acceso a mis propias cuentas de Whatsapp y Telegram, esta última recién instalada y empecé a recibir mensajes por otras vías de algunos contactos, intentando saber si realmente me había pasado algo y si yo estaba “solicitando” transferencias bancarias o depósitos a tarjetas de otras personas.
Quienes me conocen bien afortunadamente no hicieron caso alguno, ya que a todas luces eran falsos por los errores absurdos de ortografía y por no ser la forma de solicitar apoyo si uno pasa por una situación delicada.
Lamento sobremanera las molestias que esto causó y que tantas personas sufrieran el asedio, en algunos casos, de llamadas y mensajes. Hasta mis hijos recibieron los mensajes porque los tengo por sus nombres. Por los medios que pude, intenté hacer saber a todos mis contactos que me habían “hackeado” el WhatsApp y Telegram.
No tienen idea, si no lo han sufrido, del complicado camino que hay que recorrer para recuperar el control de ellas. Después de gogglear la situación y leer muchos artículos, supe que hay que ingresar a “Whatsapp” y enviar un correo electrónico a support@whatsapp.com y dentro del correo escribir el texto: “teléfono robado/extraviado, por favor desactivar mi cuenta del número +52 (Y tu núm. Telefónico)”, después te enviarán un mensaje diciendo que tienes que demostrar que tú eres el titular de la línea telefónica o del celular que reportas con algún documento, en mi caso fue buscar la factura del mes pasado.
Luego te indican, hay que ir a la compañía donde contrataste el servicio para dar de baja tu tarjeta SIM, obvio, demostrando con tu INE que tú eres tú, luego comprar otra, e instalarla. Yo tengo, como la mayoría de personas, contrato con Telmex y creo que fue lo más rápido y eficiente en todo este proceso, lo cual por supuesto, agradezco.
Aún no termina mi odisea porque hay que esperar a que WhatsApp se cerciore de que tú eres tú y te envíe un código para reiniciarlo, pero con buena actitud lo espero.
Dos consejos:
DESCONFÍE siempre que reciba un mensaje donde alguien más le pase un recado de otra persona y mucho menos si solicitan apoyo económico o dan alguna mala noticia, primero chequen, seguramente tienen conocidos en común que pueden confirmar si alguien tiene un problema, pero NO depositen ni un peso, ni hagan transferencia alguna. Sin duda es un delincuente quien le está hablando.
NO CREA QUE NO LE PASARÁ A USTED Y PIDA AYUDA PARA REFORZAR LA SEGURIDAD. Recuerde que no necesitan tener acceso a su teléfono. En mi caso, nunca lo dejo fuera de mi vista, ni abro correos extraños, ni le doy click a ligas. Menos contesto llamadas cuyos números no conozco. Así que no tengo idea de cómo se apoderaron de mis líneas.
Existen mecanismos para impedir que les pase lo que a mí, si no le sabe a la tecnología, como yo, pidan ayuda a sus hijos o a sus nietos, ellos les dirán que hacer para proteger sus datos. Son un apoyo invaluable.
Detengamos esto, cuidémonos entre todos, “Más vale prevenir que lamentar.”