/ domingo 12 de diciembre de 2021

Vivencias | Trabajo en equipo

En estos tiempos complicados, en los que cada vez es más difícil alcanzar el éxito en un negocio, es importante destacar la importancia del trabajo en equipo. Hace días pude constatar lo valioso que es.

Sentir en el ambiente de un negocio el compañerismo, el buen humor, la comunicación amable, la empatía, la sincronía aunados a la eficacia hizo que me sintiera verdaderamente esperanzada y optimista.

¿Cuánto tiempo tardarían dos personas en hacer un trabajo que lleva una hora si lo hiciera una sola persona? Si la respuesta fuera matemática, el resultado obvio sería, media hora, pero a todos consta que no es así, puede tardar inclusive más o mucho menos, dependiendo del ambiente, del liderazgo del jefe y desde luego de saber trabajar en equipo.

El trabajo en equipo requiere de actitud, pero también de cooperación, de organización, de reconocer talentos en cada uno, de saber el rol que nos toca jugar, de la comunicación entre todos, de que cada uno sienta suyo el proyecto, de tener objetivos claros, todo eso y más para poder construir un ambiente propicio para crecer.

Estoy segura que en el caso que relato, su líder no ha tomado ningún curso especial, ni ha estudiado alguna maestría relacionada, ni siquiera tiene la edad para haber adquirido esa visión de futuro en la escuela de la vida, pero sabe hacerlo y lo hace, sin miedo.

Ver trabajar a todas esas personas tan distintas entre sí entusiasmadas, tan jóvenes en su mayoría, y con objetivos claros, moviéndose seguros y en total sincronía, fue realmente una visión inspiradora.

Ví con claridad que cuando hay un objetivo común, que cuando todos lo conocen y lo hacen suyo, cuando el trabajo se saborea porque el ambiente es bueno, cuando todos se ayudan porque todos se conocen, cuando todos se comunican y no se pierde la empatía, cuando ponemos nuestro mejor esfuerzo para conseguir algo, no hay nada que impida el triunfo. No hay nada que no se pueda conseguir y todo se vuelve posible.

En estas fechas de reflexión hago votos porque más allá de los esfuerzos personales tengamos la visión para poder construir juntos un futuro mejor.

En estos tiempos complicados, en los que cada vez es más difícil alcanzar el éxito en un negocio, es importante destacar la importancia del trabajo en equipo. Hace días pude constatar lo valioso que es.

Sentir en el ambiente de un negocio el compañerismo, el buen humor, la comunicación amable, la empatía, la sincronía aunados a la eficacia hizo que me sintiera verdaderamente esperanzada y optimista.

¿Cuánto tiempo tardarían dos personas en hacer un trabajo que lleva una hora si lo hiciera una sola persona? Si la respuesta fuera matemática, el resultado obvio sería, media hora, pero a todos consta que no es así, puede tardar inclusive más o mucho menos, dependiendo del ambiente, del liderazgo del jefe y desde luego de saber trabajar en equipo.

El trabajo en equipo requiere de actitud, pero también de cooperación, de organización, de reconocer talentos en cada uno, de saber el rol que nos toca jugar, de la comunicación entre todos, de que cada uno sienta suyo el proyecto, de tener objetivos claros, todo eso y más para poder construir un ambiente propicio para crecer.

Estoy segura que en el caso que relato, su líder no ha tomado ningún curso especial, ni ha estudiado alguna maestría relacionada, ni siquiera tiene la edad para haber adquirido esa visión de futuro en la escuela de la vida, pero sabe hacerlo y lo hace, sin miedo.

Ver trabajar a todas esas personas tan distintas entre sí entusiasmadas, tan jóvenes en su mayoría, y con objetivos claros, moviéndose seguros y en total sincronía, fue realmente una visión inspiradora.

Ví con claridad que cuando hay un objetivo común, que cuando todos lo conocen y lo hacen suyo, cuando el trabajo se saborea porque el ambiente es bueno, cuando todos se ayudan porque todos se conocen, cuando todos se comunican y no se pierde la empatía, cuando ponemos nuestro mejor esfuerzo para conseguir algo, no hay nada que impida el triunfo. No hay nada que no se pueda conseguir y todo se vuelve posible.

En estas fechas de reflexión hago votos porque más allá de los esfuerzos personales tengamos la visión para poder construir juntos un futuro mejor.